La Llave del corazón de un Angel

Capítulo 22

El ángel conoció la pasión en los brazos de su demonio y se dio cuenta que le gustaba arden en el infierno de la pasión que él hacia arder en sus venas

Los besos de Hunter comenzaron siendo suaves mágicos, cálidos, pero se fueron subiendo la intensidad al volverse más exigentes demandantes, impetuosos y ardientes, ¡dios sentía que moría con cada uno de ellos ¡

- Déjame amarte – susurro – sus manos comenzaron a acariciar su espalda lentamente a levantar su vestido para poder sentir la piel de sus piernas, la reclino en la cama, la continúo besando de forma erótica sensual, sintió las manos de su esposa en su pecho de como quería quitarle la ropa, el rápidamente se quito las prendas quedando con su pecho al descubierto

- Enséñame Hunter enséñame – paso sus brazos por el cuello de su esposo y lo acerco a ella y lo beso, jugo con su lengua, acaricio su pecho araño su espalda paso sus piernas por la cintura de Hunter deseaba sentirlo cerca - ¿peso demasiado?

Sentía que ardía por dentro sentir como ella le respondía, como lo deseaba – eres perfecta créeme cuando te lo digo todo de ti es perfecto, tu rostro, tu cuerpo, tu peso todo - le desabrocho el vestido con tan poca delicadeza, la recostó en la cama y puso sus rodillas a cada lado de las caderas ella paso su dedo por el contorno de su seno, y comenzó a quitarle el corset, con cada amarra que iba soltando los encanto de su esposa estaban para su deleite, si piel blanca y cremosa, la turgencia de sus senos, sus formas de mujer, sentía como el deseo lo golpeaba fuerte y su miembro saltaba dentro de su pantalón – eres exquisita bajo la cabeza y comenzó a besar el nacimiento de sus pechos, tiro uno de sus pezones y la sintió saltar y como enteraba sus uñas en sus muslos - ¿Qué deseas, mi diosa?

- No lo se – susurro, sentía como si su cuerpo tuviese vida propia, sus manos comenzaron a tocarlo, primero comenzó a tocar sus muslos, sus manos subieron hasta la cinturilla de su pantalón acariciando su estomago marcado, desabrocho el pantalón y metió su mano, abrió los ojos al sentir como de la boca de su esposo escapaba un gruñido, se sintió poderosa al ver como cerraba los ojos, verlo así como disfrutaba le dio valor para tocarlo mas íntimamente para acariciar con timidez su miembro.

- No sigas – dijo ronco

- He... he... hecho algo mal

- No, pero si sigues por ahí perderé el control totalmente y tu mi diosa eres virgen, debo prepararte- tomo sus manos y las puso por sobre su cabeza – eres mi sueño, la comenzó a besar y acariciar lentamente, beso su cuello, lo mordió, paso su lengua por el deseaba saborearla amaso en su mano un pecho lo apretó, pellizco el pezón fuerte y sintió como ella contenía el aire y se movía bajo el

Sentía que el aire le faltaba, estaba deseosa de más de mucho más sentir los besos de él como iban bajando por su cuerpo, desde su cuello hasta su ombligo, estaba enloquecida su respiración era rápida, sentía que algo le quemaba por dentro, abrió muchos sus ojos y levanto un poco su cuerpo – ¿Qué hace? – dejo de hablar al sentir como su esposo pasaba su lengua por su sexo, y jugaba en ese lugar hasta hacerla gritar de placer - ¡DIOS NO PARES! – levanto sus caderas y abrió mas sus piernas no estaba consciente de lo que hacía, su cuerpo se entregaba al placer y el mandaba por sobre todo aquello que le enseñaron desde niña de ser una dama recatada y prudente, hoy esas enseñanzas se fueron por la ventana

- ¿te gusta? – la miro – y volvió a acariciar su botón , sentía como ella se estremecía como su cuerpo se ponía tenso como las cuerdas de un violín, la siguió torturando acariciando, besando succionando hasta que la escucho gritar su nombre y verla tener estamos y temblores , se recostó a su lado y vio como su rostro reflejaba que había alcanzo el orgasmo