Aviones de papel [Libro 1]

Capítulo 16

Un día impredecible

— ¿Por qué tendría que gustarme alguien? — fue lo único que se me ocurrió por decir

— No era mi intención decir eso, pero es normal que te gusten los chicos, o en otras circunstancias las chicas..., pero aún así, sólo es curiosidad

Achique los ojos en su dirección. ¿Por qué será ese repentino interés en saber sí alguien me gusta? Y ¿si yo le preguntó lo mismo? Sólo por curiosidad. No, para ser sincera no creo que sea buena idea.

— Es del instituto. No lo conoces — mordí mi tostada para hacer tiempo y que así se me ocurriese algo más

— ¿Cómo se llama? — preguntó de inmediato

Ahora quería saber su nombre, ¿qué le pasa?

— ¿De quién? — me hice la tonta

Me parecía graciosa su expresión de desagrado.

— De él. Su nombre, ¿cuál es?

— ¿El mío? Soy Amber mucho gusto — aparté la mirada al techo

— No te hagas la tonta, dime como se llama

— ¿Por qué tanto interés?

— Curiosidad

— ¿Seguro? Porque si es así, en verdad es bastante curioso, ¿sabía?

— Sólo pido su nombre

¿Nombre? ¿Qué nombre debía decir? ¿Qué se supone que diga?

Y cuando más la necesitaba, la ardilla en mi cabeza deja de girar.

— Su nombre... Claro, tiene nombre porque él es real y todos tenemos nombre porque es normal que nuestros padres nos pongan nombre. Sí...

— No hay chico — afirmó

¿Será buena idea decir qué está en lo cierto o seguir con la mentira ya en proceso?

— Tú — lo apunté — No me gustas, si eso es lo que te interesa

— Vaya, sentí como mi ego bajaba monumental mente

— No tengo nada que ver en eso — recargué mis codos en el mármol

— ¿Entonces?

— Entonces...

— Nombre

— Amber Jostice, no es un gusto conocerlo

— El nombre del chico

— ¿Cuál chico?

— Amber...

— ¡Thomas! — exclamé en un impulso — Thomas Daniels — repetí más tranquila