♡ One Shots ♡ ATEEZ [Pedidos Cerrados]

๑ yunho ๑

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Me sentía estúpida, me sentía oprimida, sentía como me quemaba la garganta, como ardía mi piel de la rabia misma también. Me sentía decepcionada de mi misma.

Más que humillada por la escena que me acababan de montar.

Me siento asqueada de la persona que me lo dijo, hasta me da pena.

Más que una puñalada, o algo así, me sentía insatisfecha, me quedaron muchas cosas por decirle y hasta una buena patada en los huevos no hubiera estado de más, pero me tuve que quedar con las ganas.

Cuando me metí en una relación, aún yo creyéndome la mujer más experimentada, con maestría y todo, basándome en puras películas de amores "verdadero" y haber leído historias de amor. Y es te llegas a sentir tan inútil y tonta que asusta, me convencí tanto de que era el indicado, que ni me di cuenta de cosas de mi pasado que daban pena.

Todas las veces que me dijo que mi falda estaba muy corta y yo intentaba bajarla, bien estúpida y callada ante todo.

Cuando me quise cortar el pelo hasta los hombros y me dijo que se me vería mal, que me veía más bonita con el pelo largo. Me lanzó una lista inmensa de halagos, y me convenció en todo el sentido de la palabra.

Todos los momentos en los que según yo me sentía en calma, realmente eran de aburrimiento, porque nunca podía hacer nada de lo que yo quería realmente.

Me creía la chica más intelectual, que nunca me iba a enamorar de un chico que se peleaba todos los fines de semana, uno que fuma cigarrillos por simple estética y que en vez de caminar cree que levita.

Y todos los tornillos que se supone que tenía se me fueron cuando, el maravilloso y hermoso Jangjun me pidió salir con él. Era el chico que apenas los veías te llegaba a la mente la palabra ternura. Irradiaba inocencia, una sonrisa que achicaba sus ojos siempre y una mirada de yo no mato ni una mosca.

Y creí haberme enamorado, realmente pensaba así, pero quién lo diría, ni siquiera tengo veinticinco y ya lo creía el amor de mi vida, como esas historias dónde tu primer amor se casa contigo y terminan viviendo felices para siempre y por siempre.

Bueno, pues ahora no solo tengo mi primer ex novio, sino también mi primera dislocación y en una sola noche, dos pájaros de un tiro querida.

Hace un par de horas, o no sé ya siquiera cuánto llevó aquí en el hospital, ni cuánto llevó pensando en todo esto frente al espejo del baño, pareciera como si hubiera llegado hace unos minutos y hace tan solo unos minutos estaba sentada en el sofá de mi departamento, y no me refiero a solo el recuerdo, sino porque el dolor era tan asqueroso que lo único que podía hacer era pensar en eso.

—Voy a llamar a la policía —Juna estaba escandalisada, claro que yo lo estaría también si fuera al contrario. Pero desde la puerta del baño le indique con gestos como pude que luego resolvíamos todo esto. Ya tengo suficiente dolor de cabeza con esto, no necesito que me termine de estallar la cabeza. Casi que sentía mi pulso en la sien.

Me senté en la camilla de la reducida sala a la que me pasaron esperando a ver qué decia la radiografía que me tomaron, aunque me considere peor que Google que te dice que tienes cáncer de pulmón por respirar mal, está vez realmente yo sabía que esto por más que estuviera deseándolo, no era nada simple.

Me volví a sentar en la camilla incomoda y de nuevo me atropellaron los recuerdos. Estaba recostada en la cama haciendo alguna cosa que ni recuerdo. Cuando los gritos de Jangjun inundaron todo el piso o el edificio entero, y yo no tenía ni la más mínima idea, nunca he sido alguien buena para ese tipo de cosas mientras él parecía un completo demente despeinado con las venas del cuello brotadas.