EL CHICO EN MIS SUEÑOS

UNA DESPEDIDA

Despierto llorando y no evitó el dolor que siento, muchas situaciones en mi existencia me han dejado marcada para mal, pero ese pequeño niño me recordó que por más que el mundo te haga daño, al final existen personas llenas de calor y amor, que con solo su existencia te alegran la vida.

Mi mente da un vuelco y reaccionó ante mi estupidez. ¡ES MÁS QUE OBVIO!—me digo, es este collar lo tomo en mis manos y lo analizo; jamás lo usé después que me lo regalará Tomy, y no lo hacía porque se me olvidaba quitármelo y no se puede llevar accesorios al hospital.

¡Claro! Aún después de su muerte no lo usé hasta hace poco que arreglaba mi cuarto.

Flashback

—¿Dónde guardaré esto? —me digo; hoy me puse a ordenar mi pequeño apartamento; así que me dirijo a mi clóset para guardar algunos accesorios , pero en un descuido me tropiezo con la alfombra y logró sostenerme con la cama para evitar golpearme, pero todos los collares, anillos y pulseras se riegan en el suelo, lo cual provoca que me moleste de solo pensar que tendré que recoger este desastre.

Después de recuperar mi poca paciencia, comienzo a levantar y guardar todo, al finalizar mi mirada se concentra en aquel objeto sobre mi cama, el collar de Tomy.

Lo usé desde entonces, incluso en el hospital debajo de mi uniforme.

Fin del Flashback.

¿Será este collar la razón de tus apariciones en mis sueños?, pero que tiene que ver, ¿cómo haces para estar en ellos?. Mi cabeza es un lío, estoy molesta porqué no logro entender que pasa conmigo y mi vida, ¡no sé qué hacer! ¿A quién voy le preguntar por ti? ¿Cómo voy a descubrir lo que realmente pasa?

De repente lo recuerdo, ¡mi libro de escritos!, allí podría haber algo más; lo busco bajo mi almohada y nada.

—¿Dónde te deje? —dije y cerré mis ojos—¡Por favor aparece ya!—continúe; ya estaba cansada de no hallar respuestas a este enigma y sobre todo de no poder hacer nada.

Al abrir mis ojos pude ver que había algo en mi cama, me acerco con rapidez y es mi libro de escritos. Tiene una nota pegada en su portada, la tomo y leo:

Perdóname Fer, soy un cobarde y te he hecho sufrir, pero quiero que sepas la verdad...

Bien y ¿cómo voy a saberla? Estoy muerta de miedo, no quiero descubrir algo que me haga daño, pero quiero saber qué pasa. Abro el libro y paso cada página con cautela para no perderme ninguna pista; al llegar a las últimas hojas, pude notar que estás han sido escritas y comienzo a leer:

Querida Fer.

Sé que soy un tonto y cobarde por no decirte esto cara a cara, pero es que no se me dan las palabras y quiero que sepas todo.
Cuando lleve a mi hermano Tomás al hospital y me fui, lo hice porque no podía quedarme, mi padre tenía que desquitar su irá con alguien y no permitiría que fuera Tomy, pero Fer, me desmaye... Soy un estúpido, no soporte más y mi padre se fue a buscar a Tomy, no sé cómo lo halló pero... Ya sabes que pasó, acabó con su vida y su inocencia de niño, no me lo perdonó aún y aunque me duela es algo que tengo que llevar conmigo, es mi carga...

No pude aguantar las lágrimas y algunas se escaparon manchando aquella página, pero debía ser fuerte, debía terminar de leer.

Lamentó aparecer así en tus sueños y atormentarlos, pero ese collar que te dio Tomy, siempre fue mío. Se lo di la vez que lo dejé en el hospital, así siempre estaría con él.

El collar es un comunicador y puedo sentir y ver todo lo que el portador este viviendo, no físicamente, pero sus recuerdos, pensamientos y sentimientos. Lamentó si parezco acosador por entrometerme en tu vida, pero algo me hizo pensar que podía apoyarte de la misma forma que lo hiciste con mi hermano. Lo ayudaste demasiado y te agradezco, porqué gracias a ti, mi hermano encontró alguien que le brindara el amor que mi padre jamás le dio. 

¡Oye! quiero que nunca dejes de sonreír y espero enteramente que seas feliz y desde hoy voy a romper mi comunicación contigo, pensé que te cuidaba pero solo estoy contribuyendo con las tristezas de tu vida, adiós Fernanda.

A...