Willgan Month (#PremiosKarmaland2020)

Día 9: Genderbend

La imagen ha sido creada por Thoke__14 , Thoke_14 em twitter e instagram. La canción "i'll be good" de Jaymes Young va perfecta con la historia.

Advertencias: Intento de violación (no entre ellas)

Willy se miró al espejo, frunciendo el ceño al ver su reflejo, sus ojos verdes, su cabello blanco antes largo, ahora corto y alborotado, su pecho ni muy grande ni muy pequeño. Se examinó exhaustivamente. No podía decir que fuese poco agraciada ni mucho menos, pero claramente algo debía faltarle para que ahora Fargan pasase más tiempo con Alexby que con ella ¿Quizá era porque Alexby era más adorable, y por lo tanto, más agradable de mirar? No estaba segura. Quizá era por la personalidad más que la apariencia, reflexionó.

Es cierto que Alexby era más graciosa, más vivaracha, menos sombría, menos oscura que ella. No por nada se unió al cuerpo de policía, junto con Fargan. Ahí fue cuando la búho la empezó a dejar de lado, saliendo más con la comisaria. Es cierto que desde entonces la castaña no hacía tantas maldades como antes (¿Quizá para impresionar a Alexby?) y que parecía agradarle la actitud de niña buena de su compañera, así que debía ser eso, a Fargan no le gustaba que fuese tan oscura, por eso ya no pasaba tanto tiempo con ella. Decidida, asintió mirando su reflejo, a partir de ahora se comportaría para volver a agradar a la búho.

Empezó reconstruyendo la puerta de Vegetta que ese mismo día había explotado sin que nadie la viera, prometiendo silenciosamente dejar de explotar, cosas por muy difícil que le resultase resistirse a la tentación. Después paseó por el pueblo, atenta a si alguien necesitaba su ayuda para cualquier cosa. Su momento de lucirse fue cuando Auron le pidió que organizase un funeral para sus familiares en presencia de Fargan, haciéndolo sin cobrarle un solo karma al psicólogo para sorpresa de ambos.

Todos sospechaban de su nueva actitud, pero Willy les ignoraba, dispuesta a demostrar que podía ser tan buena como los demás, por muy agotador que le resultase mantener esa imagen. Lo peor fue cuando varias personas se aprovecharon de esto para vengarse de ella por eventos pasados, explotaron su casa hasta prácticamente dejarla sin ésta, explotaron sus huertos, a sus animales, e incluso un par de veces a la propia albina, pero eso no hizo que cejase su empeño de recuperar la relación que antes tenía con Fargan, incluso aunque estuviese a punto de un colapso nervioso. Algunas noches, cada vez más, lloraba en su saco de dormir, colocado en lo que quedaba de su jardín, por la frustración de tener que dejar que la humillasen de aquella manera. Ella era Willy, la amante de las explosiones, la líder de la tan temida Hermandad Oscura, si tan solo pudiese olvidarse de aquel sentimiento que estaba condenado al fracaso haría que todos los que se habían atrevido a importunarla llorasen de puro terror en sus últimos momentos de vida.

Al día siguiente, mientras reparaba su casa como buenamente podía, Fargan fue a visitarla, observando horrorizada lo que le habían hecho en sus terrenos a la albina.

-Hey, Willy -Saludó con cautela

-¿Qué pasa, Fargan? -Se gira rápidamente para saludarla con una sonrisa

-Nada, pasaba por aquí y pensé en saludarte. Oye ¿Qué ha pasado? Casi no tienes casa

-Nada, ya sabes como es Karmaland -Finge indiferencia mientras se encoge de hombros

-Ya, cierto ¿Y no has pensado en denunciar? Porque esto no es una broma sin importancia, esto ya es pasarse. Alexby y yo encontraremos al culpable, te lo aseguro -Un ramalazo de dolor atraviesa el corazón de la albina al escuchar ese "Alexby y yo", su sonrisa volviéndose forzada.

-No, no te preocupes, esto se arregla más rápido de lo que parece

-Si insistes...-Mira a su alrededor para asegurarse de que nadie les está escuchando- ¿Y si la Hermandad Oscura toma represalias contra los que han hecho esto? Hace mucho que no hacen acto de presencia, ya sabes -Dice con un tono más bajo