Willgan Month (#PremiosKarmaland2020)

Día 17: Travesura

Imagen creada por Thoke__14 , Thoke_14 en twitter e instagram. Patrocinador oficial de este month.

Willy estaba aburrido, muy aburrido, y eso no era una buena señal para los habitantes de Karmaland. Pensaba en cosas que hacer para entretenerse, la mayoría relacionadas con explosiones o trampas, pero qué le iba a hacer, le gustaban las travesuras, eran su actividad favorita para pasar el rato, sobretodo si estaba acompañado de su persona favorita. Cogió el comunicador, buscando contactar a esa persona especial que siempre estaba libre para él, sobretodo si era para hacer algo oscuro.

>>Willy: Hey, Fargan ¿Estás libre?

>>Fargan: Para ti siempre, ratón ¿Qué necesitas?

>>Willy: Nada en realidad, solo estoy aburrido ¿Sabes? Y me apetece hacer alguna travesura, no sé si me entiendes

>>Fargan: Suena divertido, me apunto. Cogeré algunos juguetes algo explosivos. Jajajaja

Ante el último mensaje de Fargan no puede evitar poner los ojos en blanco mientras sonríe, a veces era imposible.

>>Willy: Voy a buscarte a tu casa y decidimos nuestro objetivo ¿Te parece?

>> Fargan: Perfecto, aquí te espero :)

Sonríe con cariño antes de guardar el comunicador, pero pronto se transforma en una sonrisa traviesa cuando coge los explosivos, la razón por la que le había dicho a Fargan que le esperase en su casa era porque quería aprovechar para gastarle una broma, hacía mucho que no se la jugaba al búho, y no había que perder las buenas costumbres. Una vez llegó a su casa, rápidamente hizo un hueco, al fondo colocó minas de tierra, y encima césped falso para que no se notase el hoyo. Es entonces cuando avisa a Fargan de que ha ha llegado, soltando una carcajada cuando el búho nada más salir de la casa cae de bruces en la trampa, justo encima de la mina.

-¡Willy, eres una rata! -Se le escucha gritar, cosa que solo hace que el albino se ría con más fuerza

-No seas así, Fargan, que solo ha sido una bromita de nada -Se burla, mientras le revive y le ayuda a salir.

El búho se sacude la ropa con indignación, pero el enfado se le pasa al ver lo bien que se lo estaba pasando su albino favorito, lo que hace que no pueda evitar sonreír suavemente mientras su malhumor se evapora. Después de ese incidente, empezaron a pensar a quién podrían hacerle alguna que otra travesura, por supuesto que lo primero que se les pasó por la cabeza fue la puerta de Vegetta, pero eso ya era un ritual más que una travesura, además de que les sabía a poco. Al final, fue Fargan el que tuvo la idea ganadora, propuso secuestrar a Jimmy, la tan querida mascota de Alexby, y explotarle unos cuantos TNTs en la fachada se su casa de regalo. La idea maravilló a Willy, que le miró asombrado porque estuviese dispuesto a hacerle eso a su compañero policía, sobretodo porque parecían llevarse bien, ser amigos cercanos, pero el búho lo descartó diciendo que con tal de que el albino estuviese contento, no le importaba a quién tuviese que gastarle una pequeña broma de vez en cuando, lo que hizo el albino sonriese  orgulloso por significar tanto para el castaño mientras un agradable calorcito se extendía por su pecho.

Para efectuar el secuestro, decidieron ponerse los trajes de la Hermandad Oscura por si se cruzaban con alguien. No fue muy complicado de efectuar, sobretodo gracias a Willy, que tuvo la idea de atraer al bicho con su comida favorita, mientras que Fargan había tratado de arrastrarle con una cuerda sin éxito alguno. Mientras el ojiverde guiaba a Jimmy hacia su nuevo hogar temporal, el castaño se dedicaba a explotar varios TNTs, arruinando la bonita casa del comisario. También dejó un cartel para dejar constancia de que eso había sido obra de la Hermandad Oscura y con instrucciones que seguir si quería recuperar a su muy amada mascota.

Ambos debían admitir que fue divertido obligar a Alexby hacer cosas que jamás habría hecho sin ese pequeño empujoncito, como explotar por completo su amada comisaría, matar al cerdo de Luzu, Manolo, usar diversos objetos que eran ilegales... Sí, definitivamente fue divertido llevarle a su límite, romperlo por completo hasta hacerlo llorar desconsoladamente mientras se abrazaba a su Jimmy una vez lo recuperó. Desde luego, no hacía falta ponerse así, solo había sido una pequeña travesura para matar el tiempo después de todo. Que sensibles eran algunos.

Después de devolver la mascota a su dueño, se fueron juntos a la casa de Fargan para ver una película tumbados en el sofá, la travesura les había relajado considerablemente, y ahora solo les apetecía pasar el resto de la tarde/noche tranquilamente, en los brazos del otro mientras se daban mimos. Quizá mañana volverían a las andadas, quien sabe, pero en ese momento se conformaban con disfrutar de la compañía del otro mientras hacían oídos sordos al sufrimiento que habían causado, sin interés alguno ya en la persona a la que aquella tarde habían destrozado sin compasión.

Así eran, no tenían remordimientos ni compasión, pero ¿Por qué deberían tenerlos? Si lo único que hacían eran pequeñas travesuras que al final del día no eran nada ¿Verdad?

Para este tema tampoco tenía nada en mente, así que por eso me ha costado un poco escribirlo. También por eso es un poco más corto que otros capítulos. Lo siento, hice lo que pude. Espero que os haya gustado.