Memento Mori

XII

2011:

Al fin tenían algo para poder investigar sin miedo a Margarita, Marta les había concedido el permiso para pedir el registro de llamadas. Pedro le llamó y le dijo que la compañía telefónica acababa de enviarlo y que tenía el registro impreso en sus manos.
Corrió a toda prisa por los estrechos pasillos, llevándose por delante compañeros, papeleras, sillas… llego sin aire y le arrebato la hoja a Pedro.
- Donde está?
- Aquí, está es la llamada de Armando y jefa, recuerdas que te dije que Margarita había dicho que hablaron unos pocos minutos? Pues teniendo en cuenta el tiempo que pasó entre la llamada de Armando y la que ella realizó cuando colgó, estuvieron hablando exactamente unos 12 minutos.
- Eso es mucho para solo haber preguntado que tal estaba.
- Si, pero el número al que llamo no está registrado en su lista de contactos  parece ser un teléfono fijo.
- Vamos a llamar y ver quién atiende.
Con el pulso a cien marco el número y puso el manos libres, ansiosos los dos esperaban a saber quien contestaría.
Al quinto tono la llamada fue contestada.
- Club de Campo en que puedo ayudarle?
- Club de campo? Es este el teléfono de la oficina del club de campo?
- No señora, esta hablando con el bar del club, puedo ayudarle en algo?
- Cómo se llama usted?
- Perdone pero quien habla?
- Habla la detective de homicidios Pinzón. Repito, su nombre por favor?
- Soy Ernesto Romero, el barman.
- Muy bien señor Romero, permanezca en el lugar hasta que yo llegue, tengo unas preguntas que hacerle.
- Oiga de que se trata esto? Yo no he hecho nada.
- Señor Romero si no ha hecho nada, entonces no tiene por qué temer. Hasta pronto.
Betty colgó y ella y Pedro corrieron al auto para irse al club.
- Reinosa dijo que Marcela Valencia se la pasaba bebiendo y uno de sus sitios favoritos es el club, Margarita debe de haberla llamado a ella.
- Mierda Pedro, todo encaja, fue Marcela, ella debe haber ido a Ecomoda, le daría tiempo para llegar, el guardia debe haberla visto y ella y Margarita le pagaron para que se callara. La huella, la altura que dijo Enrique… ninguna de esas pruebas habla de un hombre. Roberto y Daniel eran casi más altos que Armando y la talla de zapatos… no, no, tiene que ser una mujer.
- Jefa porque no la llamo a su teléfono?
- No se, quizás sabía que sería más rápido llamando al bar del club.
- Pero por qué Marcela Valencia iría a Ecomoda y estaría dispuesta a tanto por algo que paso cuando ella era una niña? Ella no tendría nada que ver con la muerte de Fuentes y que su padre se viera involucrado no le traería algo más grave que un escándalo pasajero para ella y sus hermanos, pero nada más, al menos que lo que descubrió Armando confirmara que el asesino fue Julio Valencia.
- Estuve mirando el informe forense de Fuentes, Pedro ella fue víctima de una gran violencia, la golpearon con furia y los golpes aunque abundantes no eran serios eran leves, Fuentes murió por un traumatismo en la cabeza, pero lo más probable es que se lo hiciera cayendo, esa clase de ataques los he visto antes, y son producto de una mujer.
- Entonces si su padre no estaba involucrado, por qué diablos Marcela Valencia haría algo así?
- Le he estado dando vueltas a lo que nos contó la señora Inés, ella dijo que su amiga estaba segura que Margarita se propaso con la chica. Pedro tú sabes que esa clase de comportamientos son repetitivos. Si Margarita sometió a la chica, y pudo continuar como si nada y nadie nunca sospecho o se entero de esto, quiere decir que ya lo había hecho antes, eso habla de experiencia.
- Quieres decir que Margarita se involucraba con chicas muy jóvenes?
- Si, esto no lo sé con certeza, pero la madre de los Valencia, Susana, murió cuando ellos aún eran unos niños, creo que fue en el 94 que tuvo el accidente. Y Marcela se volvió muy cercana a Margarita.
- Dios mío Betty, crees que Margarita convirtió a Marcela en su amante?
- No se, no creo que fuese hasta que Marcela alcanzara la mayoría de edad, que fue cuando volvió y empezó a pasar más tiempo con esos dos.
El teléfono de Pedro sonó, era Mari, Pedro activo el altavoz.
- Mari encontraste a Marina Coronado?
- Si jefa, trabajaba en una pequeña financiera del centro, he ido a verla, al principio ha estado muy renuente, pero logre que me contara.
- Que dijo?
- Jefa, dice que ese día Margarita la cito en su oficina, ella no sospechaba nada, había hablado antes con ella y le parecía una mujer comprensible y amable. Cuando entró Margarita le ofreció whisky y ella acepto, al poco de tomarlo empezó a sentirse mal, recuerda claramente que cuando empezó a desmayarse miró el reloj en la pared y marcaban las 18:30 de la tarde, jefa dice que cuando despertó eran casi las 9 de la noche. Margarita la miraba fingiendo preocupación pero que estaba claro que quería deshacerse de ella. Marina se sentía muy mal, tenía nauseas y un terrible dolor de cabeza. Y aquí viene lo más raro.
- Margarita abuso de ella?.
- No sabe jefa, pero esta segura de que alguien le hizo algo, dice que sus bragas y sus genitales estaban limpios, pero que tenía un intenso dolor en la vagina. Como sabes ella es lesbiana por lo que nunca ha estado con un hombre. Recuerdas que ella se fue con su tía? Bueno aquí viene lo peor, un mes después de estar con su tía empezó a sangrar se desmayo y la llevaron de urgencias al hospital, resulta que tenía un embarazo ectopico.
- Estas de broma!
- No jefa, ella jura que jamás ha estado con un hombre, el médico le dijo q estaba de poco más de dos meses, jefa las fechas coinciden
- Dios mío que mierda esta pasando aquí!!! Entonces no fue Margarita quien abuso de ella?
- Marina asegura que ese día fue violada y drogada.
- Esta bien Mari, investiga si hay algún registro de más chicas que trabajaron para Ecomoda que podrían dar indicios de lo mismo.
- En ello jefa.
El silencio en el carro era absoluto. Esto daba un nuevo giro a todo.
Llegaron al club, enseñaron sus Identificaciones y entraron buscando al barman. Este los esperaba nervioso detrás de la barra secando frenéticamente los vasos.
- Pedro déjame a mi, parece bastante nervioso y no quiero que se cierre en banda, jugaré a la chica dulce, será más fácil.
- Si jefa.
- Hola eres Ernesto?
- … si… usted la detective?
- Si, lamento haber sido tan brusca por teléfono, la cosa no es contigo Ernesto, solo queremos hacerte unas preguntas, me podrías ayudar?
Ernesto pareció un poco renuente, sabía que si hablaba de los clientes sus jefes se enfadarían, pero también está era la policía la que preguntaba no alguna esposa celosa o un marido despechado. Miró a la detective, ella le sonrió y le pareció muy atractiva. Que mal podría hacer ayudarle? Mientras no se viera involucrado…
- Esta bien, tu dirás.
- Gracias – a Betty no le gusto nada que la tuteara tan fácilmente, pero le servía así que se aguanto – dime Ernesto, el martes sobre las 18:30 más o menos estabas aquí?
- Si.
- Entonces la llamada que se realizó a esa hora la atendiste tú?
Ernesto resoplo y ni siquiera necesito una aclaración, sabía a  que llamada se refería. De hecho era la única llamada no relacionada a su trabajo que recibió ese día.
- Doña Margarita a Doña Marcela… si
- Si esa – el corazón de Betty se le estaba saliendo por la boca, la sensación en sus tripas que le decía que estaba casi ahí era más intensa, casi haciéndola correr al baño a vomitar – veo que la recuerdas bien.
- Por supuesto, no es la primera vez que Doña Margarita llama aquí para hablar con Doña Marcela.
- Cuéntame que pasó.
- Doña Marcela ya iba por su tercer vodka con naranja, realmente no se de que hablaron, Doña Margarita le dijo algo y a ella le cambió la cara, se puso pálida y colgó, me dijo que le anotará los tragos en su cuenta y se fue.
- Se fue sola?
- Si, vino sola y se fue sola.
- Muchas gracias Ernesto has sido de gran ayuda, ves? No tenías de qué temer.
- Detective me encanta ayudar, pero por favor, no le digan a mis jefes que yo le dije nada, es política del club no hablar sobre los clientes.
- No te preocupes Ernesto y gracias.
Ya en el auto volvieron a comentar.
- Pedro crees que podamos saber la ubicación por su teléfono de Valencia ese día?
- Si jefa, y creo que Marta nos podrá dar el permiso.
- De todas formas necesitamos una prueba, un testigo, una huella, un pelo… algo que nos diga que esa maldita pu… que ella estuvo ahí.
Pedro vio como su jefa aumentaba la velocidad y apretaba el volante hasta que los nudillos se le pusieron blancos.
Betty estaba furiosa, ahora ya podía ponerle una cara a la escoria que le quito la vida a su niño. Sintió ganas de llorar pensando que esa insignificante zorra lo había matado, pero en vez de transformar su dolor en lágrimas lo convirtió en rabia y odio. Imagino a Marcela Valencia frente a ella y apretó el pedal a fondo, ella pagaría… de pronto el sueño y la voz de Armando pidiéndole que eligiera bien y esa promesa hecha hace tantos años de que nunca más se tomaría la justicia por su cuenta le vino a la mente.
Pero no podía y se sintió devastada, una vez más iba a fallarle a su niño. Marcela Valencia pagaría por lo que hizo, con su vida.
Otra voz en la cabeza le advirtió de que no podía estar segura que fue ella la que lo mató. Pero Betty sabía la verdad, para ella no había duda.
Fueron ellas, Margarita y Marcela.
Volvió a apretar el volante y aceleró a fondo, no, no había duda… esas putas pagarían, solo con sus vidas Betty encontraría consuelo por la pérdida de su amado niño.

2009:

- Qué te parece?
- Si… es hermoso, me encanta toda la luz natural que entra… es muy hermoso.
- Lo apruebas?
- Necesitas que lo apruebe?
- Sabes que si.
Betty miró a su niño y sonrió, tantos años y él aún le seguía pidiendo permiso para las cosas importantes.
- Mi amor, es hermoso, y te queda perfecto y espero que esta habitación me la guardes para mi.
- Por supuesto, ya es tuya.
- Cuando te mudaras?
- Pues este sábado, Mario Calderón a prometido venir a ayudarme, pero no se….
- El que no sabes?
- Be, a veces creo que ya no me siento cómodo con él.
- Por qué?... Te ha hecho algo? Te lastimó?
- Ay Beee basta ya! Por qué siempre piensas que alguien me ha hecho algo?... No, no es eso, pasa que me parece que es demasiado inmaduro y ya no me gusta salir con él, solo le interesa la fiesta y las mujeres, y además ya me canse de como trata a las chicas. Las acosa hasta seducirlas y luego una vez que se ha acostado con ellas las abandona dejándolas con el corazón roto. Muchas de esas chicas son mis amigas, o eran, porque la mayoría ya no me hablan porque se piensan que soy como él.
- Tu no eres así… espero. Sabes que tendríamos un gran problema si descubriera que andas haciendo eso.
- Ya sabes que no!!!... Nunca haría eso, y de cualquier forma ya creo que soy demasiado grande para ser tan inmaduro. Sabes he hablado con mi padre.
- Y que ha dicho Mussolini?
- Beee jaja Dios, eres rencorosa he?... Sabías que en Ecomoda tienen graves problemas financieros? Mi padre quiere que le haga un préstamo, que meta dinero para reflotar la situación.
- Armando dime por favor que no has dicho que si.
- No, ya no soy tan estúpido. Le he pedido que me pase un balance general del estado de la empresa, recuerdas que te hablé de un chico que conocí en la universidad? Nicolás Mora?
- El tipo ese con el que se meten todos?
- Si al pobre le hacen bulling, por lo menos se lo hacían hasta que le aclaré las cosas a la imbécil esa de Patricia Fernández, ella lo utilizaba para que le hiciera los trabajos y luego lo humillaba públicamente. Tendrías que ver la cara que se le quedó cuando la desenmascare frente al decano. Jaja se volvió loca, intentó sacarme los ojos!
- Se hubiera atrevido-
- Que no pasó nada déjalo ya! Dios que eres insoportable he?... Bueno a lo que iba, Nicolás está en su último año en economía y es un genio, así que le pediré que revise el balance y me explique sobre la situación real de la empresa.
- Y si es mentira?
- El que?
- Y si tu padre te pasa unas cuentas falsas?
- Bueno yo… quería pedirte un favor, pero no se si es legal y no se si te puedo pedir esto.
- Pídeme lo que sea.
- Crees que podrías hablar con alguien que sepa si la empresa está metida en algo raro? Si está siendo investigada o… bueno ya sabes…
- Aha… si, no hay problema, hablaré con un amigo que trabaja en fraudes y me enteraré de lo que sea.
- Gracias. Bueno si todo está bien y si Nicolás piensa que podría presentar un plan que pueda remontar Ecomoda tengo la intensión de hacerle un préstamo a mi padre con un condición. En un año me graduare y luego haré mi especialización y cuando acabe quiero la presidencia de Ecomoda.
- Hablas en serio?
- Si Be, sabías que en esa empresa trabajan más de mil personas? Mi conciencia no me permitiría darles la espalda, si esta en mis manos poder ayudarles, no me lo pensaré dos veces.
- Pero rey, tú no conoces a esas personas.
- Be, tú más que nadie tiene que entender esto, tú tampoco conoces a ninguna de las personas que ayudas en tu trabajo y sin embargo lo haces, tienes la necesidad…
- Si… no me digas más, lo entiendo.
Betty se acerco y le pellizco la mejilla, por que tenía que crecer? Por que no podía ser su niño para siempre?
Cada día que pasaba la sorprendía más y más, y sintió que todo lo que sacrificó para estar con él valió la pena.
Que clase de hombre hubiera sido si su educación hubiera corrido a cargo de los Mendoza?
Sería una persona que no querría conocer, de eso estaba segura.
Armando le tiro el pelo y le dijo que dejara de estar en la luna. Que niño más atrevido!
Se fueron del apartamento que en una semana sería el nuevo hogar de Armando y aunque Betty estaba nostálgica porque ya no lo tendría en su casa con ella, también estaba feliz de que él se hubiese convertido en un muchacho tan responsable que cada día quería probarse más y más y crecer.
Si, su niño la haría bien! Seguro que sería presidente de Ecomoda, el mejor de todo.
Tenía un futuro brillante por delante… y Betty solo pedía salud y vida para poder estar presente.