CAPÍTULO 8.

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8.

UN HOGAR LLAMADO MADRIGUERA.

La madriguera estaba a reventar decenas de personas deambulaban por la casa, después del grandioso partido de Quidditch todo se veía caótico, pues toda la casa de Gryffindor se les había venido encima a los Weasley. Había una gran mesa con muchas sillas alrededor, todas ellas ocupadas por supuesto, en la mesa había una infinidad de platillos con cantidades enormes. Tonks estaba sentada con el pequeño Teddy en brazos junto a Harry y Hermione, Ron, Ginny y los gemelos estaban frente a ellos, en la silla principal estaba Arthur junto a Molly y Percy, Fleur y Bill con la pequeña Victorie, además de los Weasley en la reunión también estaban Luna, Neville y demás que estaban esparcidos hablando de trivialidades sin parar mientras cenaban plácidamente.

—Pásenme el jugo de calabaza.

—Aquí tienes querida Tonks.

—Gracias Fleur —dijo Tonks mientras se servía más jugo de calabaza en su vaso, jugo que desde luego termino regando en la mesa, por lo distraída que era.

—Yo también quiero un poco —pidió Fred sonriéndole a la peli-rosa.

—Igual yo —secundo a su hermano gemelo como siempre, George.

—Tengan.

Tonks estiro el brazo para servir en los vasos, con Teddy en el otro brazo y dedicándoles una sonrisa.

—Mejor déjanos —dijo Fred.

—Hacerlo nosotros —y luego George.

—Si déjalo Tonks, no te molestes —mencionaron los gemelos.

—Pero no es molestia —dijo Tonks, mientras servía en vasos de Fred y George y con jarra de jugo de calabaza a casi termina tirando todo lo que había en el centro de la mesa, después de hacer un desastre les sonrió a los chicos —creo que tienes razón, sírvanse ustedes.

—Gracias —respiraron con alivio Fred y George.

—Yog tamgbigén quiegro —dijo Ron con la boca repleta de comida.

—Eso es asqueroso Ronald, no hables con la boca llena, me das vergüenza —declaró Ginny con molestia y una mueca de desaprobación.

—Deja de molestar hermanita —dijo con bajo pero notorio enojo y luego se dirigió a su amigo —Harry controla a tu novia.

—Harry dile algo —gritaron al unísono los dos hermanos, inmediatamente que se paraban de sus sillas.

— ¿Y por qué yo?

—Porque soy tu novia.

—Y yo soy tu mejor amigo.

Harry estaba en graves aprietos se podía notar en su rostro pálido y contrariado, no sabía de qué lado estar, Ginny era su novia y hasta cierto punto la quería, pero Ron era su mejor amigo le había acompañado en los peores momentos y aunque sonara gracioso en ese momento prefería enfrentarse a un basilisco que a ese par, que no hacían más que pelear en serio.

Las peleas entre Ron y Hermione nunca habían sido tan intensas por pequeñeces, -porque ellos peleaban por cosas con importancia- en cambio Ginny y Ron hacían batallas campales por insignificancias casi todo el tiempo y él no se salvaba, -cuando por fin Ron y Hermione dejaron de hacerlo la vida no cambio mucho en su amistad, pues se sentían en confianza- los demás solo rieron ante el dilema del chico y la pelea de esos dos.

Hermione aún sentada, mientras comía no pudo evitar darse cuenta de los problemas que ocasionaban ese par de hermanos, así que soltó su cuchara, arrimo su silla hacia atrás y al instante se puso de pie.

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