Cerezo ~Yoonnam~

D O C E

Jin

Antes de que empezara la fiesta tenía que obtener la ayuda de Wang, para darle un poco de celos a Yoongi y que de una buena vez aceptara sus sentimientos por Namjoon, sin más rodeos y que se diera cuenta que si no lo hacía lo perdería.

- ¿me buscabas Jin? - salí de mi transe y voltee a ver a Jackson.

- si, quería pedirte un favor - mire que no hubieran personas al rededor.

- claro, ¿que sucede?

- bueno hoy en la fiesta cuando todos estemos sentados y relajados, quiero que te acerques a Namjoon con un baso de agua o soda, lo que quieras.

- ¿para que?

- bueno creo que Yoongi le tendría envidia a alguien guapo como tu, yo no puedo ser porque ya soy papa casada.

- lo entiendo, ¿entonces solo eso?

- si, solo eso.

- muy bien, eso mismo haré - una sonrisa se formo en su rostro, no sabía como describirla, pero era extraño.

No le tome importancia y fui en busca de Taehyung, minutos antes estaba estresado porque quería que todo quedara a la perfección. Lo vi en en jardín dando ordenenes de donde poner las cosas, mientras Jimin arreglaba la mesa de dulces.

- debes relajarte.

- es que yo sabía que era mejor que fuera de los Paw patrol.

- Jungkook ya no ve eso desde hace algunos años.

- y en esos años no tuvo una fiesta con temática de paw patrol - me miro enojado - ¡¿quien fue el tonto que puso esa mesa ahí?! Muévanla - grito y no se tardaron en obedecer.

- pero ahora le gusta mas Iron Man.

- no me harás cambiar de opinión.

- ¿ni con un regalo? - dije con un tono seductor.

- lo podría considerar...

- aun quedan algunas horas antes de que empiece la fiesta - me acerqué.

- entonces vamos a utilizarlas - tomo mi mano y me llevo al interior de la casa.

Jimin

Vi como esos dos se fueron del jardín, sabía lo que iban a hacer, los conozco y no iban a jugar monopoli.

Solté un suspiro pues ahora me había dejado con todo el trabajo a mi.

Revise que todo estuviera en orden, las mesas estaban bien acomodadas, solo eran dos mesas grandes, las personas que venían eran pocas. Sin duda alguna, Jungkook necesitaba hacer amigos, no solo convivir con adultos violentos.

Mire la mesa de dulces y solo faltaba el pastel en ella. La señora Lee me dijo que lo tendrían temprano así que fui a ver como iba.

Entre por la puerta de empleados a la cocina, no hice ruido porque vi que la señora Lee hablaba por teléfono y no quería interrumpir.

- no creo que sospeche nada

- es un buen chico, eso ya lo sabe usted.

- se lo puedo poner más fácil, solo tiene que pagar.

- muy bien, nos vemos - colgó la llamada.

- ¿pasó algo señora Lee? - dio un brinco en su lugar y después volteó a verme.

- oh no, estaba hablando con una prima, lamentablemente le fue infiel a su esposo y me pide que me quede callada, pero mi silencio no es gratis.

- entiendo - estaba un poco confundido, pero lo dejé pasar - venía a preguntar si el pastel estaba listo.