╚»★My world is you★«╝ [sesshome]

Capítulo XXVI

Los ojos de sesshomaru se ven realmente furiosos y el hecho que este encima de mí no me ayuda en nada.

—¡Joven maestro!—hadita entra por la puerta—¡Perdónenos!—tiembla—Cuando usted la atacó en el desayuno sin querer el collar se le desprendió—habla nerviosamente.

El collar que tiana me dio no lo tengo puesto, realmente. . .¿Se me cayó?

—¡Mire!—apunta debajo de una mesa—Por eso. . .por esa razón entramos a buscar ese collar—

Es el mismo lugar donde el me arrojo cuando me ha herido.

—Aún así, no tenían permitido entrar—

Sin cuidado me toma del cuello apretándolo haciendo que el aire me haga falta.

—¿Enserio vas ha matarla?—

Con un poco de esfuerzo volteó mi mirada hacia la puerta donde se encuentra la reina.

—Grrr—gruñe fastidiado.

—Déjala—camina hacia nosotros—Ella no hubiese entrado si tu no la hubieses herido—

El responde apretando más cuello, estoy segura que perdí el color en mi rostro.

—No te metas—

—Solo entro a buscar ese collar—señala el objeto—¿Realmente vas a matarla solo por eso?—

Suelta mi cuello haciendo que tome aire tratando de recuperarme, mi respiración es acelerada.

Sin decir ni una palabra se marcha dejándonos solas.

—¡Aome!—hadita viene a abrazarme—¡Lo siento! ¡No se como ha entrado!—

—Estoy bien—trato de relajarme.

Me incorporo mirando a la reina que tiene la vista perdida mirando un punto fijo hasta que suspira.

—Ese hijo mío es muy complicado—camina hacia mi—Aunque el jamás te hubiese matado—la miro—El realmente desprecia a los humanos con todo el corazón—cierra los ojos—¿Aún estas dispuesta a permanecer a su lado?—

—Si—dijo seria y firme.

Hadita me mira sorprendida negando con la cabeza, se que me ha hecho daño pero lo hago por nuestro futuro por que estaremos juntos nuevamente cuando todo esto acabe, el sesshomaru que conozco me ama pero el sesshomaru del pasado apenas y me ha conocido por lo que es comprensible su actitud.

—Quizás otra sirvienta rogaría de rodillas por asignarle otro puesto—abre los ojos—Siempre ha sido asi—

—¿Por qué odia. . .a los humanos?—

Una sonrisa irónica sale de sus labios.

—¿Por qué?—toca mi mejilla—Son criaturas ambiciosas llenas de prejuicios, ansioso por conquistar los desconocido—su mirada se pone seria—¿No viste que nos temen sin siquiera conocernos?—

—. . .—

Tiene razón, cuando estaba en el instituto vi como los seres humanos llegamos a la cima de la cadena alimenticia cada vez superando a la anterior generación, siempre encontrando nuevas facetas del mundo, siempre encontramos la manera de sobrevivir. Y no olvidar el hecho de que quieren ser los más fuertes .

—Critican a los nuestros por ser asesinos pero. . .¿Quien fue el que inició la guerra?—Calla un momento—Mi familia lo vio querida. . .los de tu especie fueron los que arrojaron la primera piedra odiándonos y matando a los nuestros sin compasión—Quita su mano de mi mejilla—  Por esa razón nuestro imperio está muy bien oculto entre las sombras y aquellos humanos que nos descubren son esclavos—

—Eso es triste—expresa hadita.

—Nosotros quisimos hacer las pases pero los humanos son muy desconfiados—pone a hadita en su hombro—Lo que realmente me pregunto es. . .—la interrumpió.

—¿Quién es el verdadero monstruo?—digo completando que diría.

—Comprendes rápido querida—camina aún lado—Sin embargo durante estos años he visto que no todos los humanos son iguales—

—¿De que forma?—

—Existen humanos que no se dejan llevar por la ambición, son nobles y de buen corazón—me mira de reojo—Por los que yo misma juzgo quien tiene maldad en su corazón—

—Pero esos esclavos —me interrumpe.

—Mi hijo los mató en verdad los odia por que vio su lado oscuro de una manera cruel—suspira—Yo se que hay humanos bondadoso y valientes por esa misma razón quiero que sesshomaru deje aún lado todo ese odio—

—He. . .—

—Hay muchas cosas que no sabes—empieza a caminar—Esta vez te salvaste aunque en realidad . . Note que dudo  en matarte—susurra antes salir de la habitación.

Me dejo sorprendida , me pregunto  que es lo que le pasó para odie a los humanos de esa forma, estoy empezando a dudar.

Camino hacia la mesita y recojo el collar de tiana, creo que ha sido hadita quien puso esto aquí no hay duda ¿Realmente encontraré el anillo?






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Ahora mismo me encuentro viendo el entrenamiento de sesshomaru peleando con un soldado a diestra y siniestra.

La reina me ha ordenado permanecer a su lado sin importar que suceda, aunque no lo hago por obedecer si no por que realmente lo extraño quiero permaneces a su lado para siempre aunque sea de lejos.

—Aome~. . —canturrea akito viniendo felizmente a mi lado.

—Hola—le sonrió.

—Veras pasaba por aquí y quise. . .—ve la pelea de sesshomaru—¡Mami!—se esconde detrás de mi como un pequeño.

—¿Qué sucede. . .?—Pregunto confundida.

—El amo se ve tenebroso—tiembla como gelatina—¿Siempre fue así de peligroso y frio?—

Sonrió  con ternura al verlo como un niño asustado escondiéndose detrás de mi, es adorable.

—El sesshomaru del pasado y del presente son los mismos pero ahora en el pasado. . .—le toco el hombro—Es mucho más frío y de un corazón sin escrúpulos—

—Recuerdo que el amo no tenía esa mirada gélida y cruel después de todo el nos ha recibido en su palacio cuando nadie nos quiso—se pone triste—Ahora es irreconocible—

Siento una punzada en el corazón al verlo triste, ha sido mi culpa después de todo pero ahora quiero remediarlo.

—No te desanimes akito—sonrió para darle ánimos—Pronto volveremos y todo será como antes—

—¿Enserio?—

—Confía en mi—


Esta faceta mía me sorprende incluso a mi si antes hubiese sido un poco como ahora tal vez mi vida no fuese la misma. Sin decir nada ambos nos sonreímos mutuamente.

—¿Qué te traía por aquí?—

—Pues la verdad me han mandado a por leña—se rescata la cabeza nervioso—Haru y yo andamos ocupados ya sabes. . .el “Traigan esto" “aquello" “¡Más agua!” cosa así durante todo el día—suspira cansado.

—Ohhh. . .debemos ser fuertes akito pronto todo será como antes—digo acariciando su cabeza.

Aunque solo me dieron ganas de acariciar sus orejitas son tan suaves y esponjosas. Se sienten blanditas tanto que me dan ganas de abrazarlo.

Akito se siente a gusto mientras lo acarició pero luego se convierte en cachorro.

—Uh. . .lo siento creo que me pase—digo apenada.

Se ve tan pequeñito, controlate aome.

—Así que se encontraban aquí mientras que yo buscaba a akito como un tonto—

—Haru—murmuró nerviosa.

—Vamos, hagamos esto rápido—se inclina hacia mi mostrándome sus orejitas.

—¿Qué?—

—No es justo que los acaricies solo el—

Iba a negarme pero sus orejitas se mueven, no, aome contrólate, no seas inmadura, se vuelven a mover.

Haru y akito están transformados en cachorritos.

—Lo siento. . .no pude evitarlo—murmuró avergonzada.

Solo atinan moviendo sus colitas y luego me hacen señas.

—Esperen. . .—se fueron corriendo.

Justo en ese momento sentí un escalofrío espeluznante en mi espalda haciendo que tiemble levemente, me doy la vuelta encontrándome con esos ojos dorados que analizan mi alma.

Había olvidado que el estaba entrenado, otra vez querrá matarme.

—Yo lo sien. . .—

Pasa de mi sin mirarme sorprendiéndome por su actitud, al menos esta vez no hubo amenazas. Lo sigo en silencio mientras entramos en al palacio.

—Alista ropa limpia de inmediato— ordena frío.

—Si, joven maestro—

Se fue a bañar y aprovecho a buscar el anillo, no me importa cometer el mismo error pero esta vez fue fácil ya que antes he revisado la mayoría de las cosas sin embargo aún no hay nada.

Apresuro y pongo ropa limpia en su cama para que disponga a cambiarse cuando salga de su baño.

Cuando disponía a salir de sus aposentos una voz fría me detuvo.

—¿A dónde crees que vas?—

—Ya puse ropa limpia en su cama para que se cambie y he alistado su armadura, lo dejaré para que cambie de vestimentas—hablo con la mirada  baja.

—Ponme la armadura—

Eso hizo que abra los ojos sorprendida pero tengo que obedecerle, me doy la vuelta encontrándolo vestido y sin  su armadura.


Lentamente voy camino hacia el.

*—Nunca le mires a los ojos —*


Recuerdo lo que la reina me dijo y bajo la mirada no quiero problemas, lo único que quiero es encontrar el anillo. Su semblante no se inmuta por mi toque, es un rostro inexpresivo que no cambia por nada.

—Suficiente—

Me da la espalda mientras me quedo parada viéndolo como se convierte en una esfera azul y se va volando.

*—No lo pierdas de vista—*

*—Siempre tendrás que estar a su lado—*

Rápidamente me alarmó buscándolo por todas partes, en la cocina, en el pasillo principal, en el jardín. . .

No hay rastros de sesshomaru, estoy en verdaderos problemas.

—¡Aome!—

Veo a hadita viéndome preocupada.

—Hadita. . .¿Ya lo has encontrado?—

—No, busque en todas partes pero no lo hayo—

—No entiendo por que se comporta de es manera—digo sujetado mi cabeza.

Sesshomaru, yako ¿En verdad me odian?

—Hadita tu ve buscarlo una vez más, iré a revisar el jardín del palacio de atrás—

Cada una fue a buscarlo pero no había rastro de él, la desesperación se siente presente en mi.

—Una genuina joya—

Veo a un demonio grotesco mirándome intimidante.

—¿Qué es  lo que quiere?—trato de mantener la calma

—Tu poder—

Sus garras me aprestan mientras me mantengo en shock, es el segundo demonio que reclama la perla ¿Podría ser que ellos sepan de mi?

—¡Déjame!—trato de liberarme

—El poder proviene de tu pecho—

Su mano izquierda se me mueve velozmente, solo atino a mirar con impotencia el por venir de mi muerte.

—¿Qué crees que haces?—

Veo a sesshomaru tomando a ese demonio con su látigo.

—Joven…—es interrumpido antes de que su brazo con el que iba atacarme es arrancado por el látigo de sesshomaru.

La sangre salpica mi rostro dejándome inmóvil.

—¡Se lo….—ahora su otro es brazo es arrancado—¡Ahhhhh!—

—¿Cómo osas entrar en el palacio?—su mirada se oscurece—Un demonio de clase baja como tu no merece vivir—

Veo atónita la escena ante mi, yako mata lentamente a ese demonio haciéndolo sufrir, esta siendo muy sádico.

La sangre en mi rostro y mis manos me dejan helada.

Una vez que el terminase de masacrar a ese demonio limpia su mejilla con asco hasta que su vista se fija en mi poniéndome tensa.

—¿Aún quieres estar aquí?—habla malicioso.

Yako está tratando de inculcar el miedo en mi para que corra fuera de este palacio.

—Mi deber es servirlo joven amo—

Frunce su ceño, creo que no se esperaba esa respuesta, me ve frío e intimidante.

Se da la vuelta, tratando de estabilizarme por el shock rápidamente me levanto por si quiere irse de nuevo.

—Andando—ordena con su voz normal.

Esta vez no me ha rechazado, algo en mi se remueve emocionada.


—¡Amo sesshomaru!—

El señor jaken viene corriendo feliz pero sesshomaru pasa encima de el sin importarle.

Observo de reojo Al señor jaken y aún está desmayado espero que se recupere. Caminamos dejándolo en medio del jardín.

Caminamos en silencio, lo sigo a una distancia discreta.

Ya llegando la hora de comer lo sigo a lo que supongo es el comedor, todo es tan grande mientras me paro a un lado estando un poco alejada para no incomodarlo.

*—Vigila que coma todo los alimentos—*

Tengo que obedecer la orden de la reina.

Lo miro discretamente y no ha probado nada, solo mira su comida de forma seria sin interés.

Me descubrió viéndolo, bajé la mirada nerviosa mirando el piso como si fuera lo más interesante del mundo.

—Ven aquí—ordena fríamente.