Capítulo 42. Ricky

1.6K 91 5
                                    

Fue inevitable que Ricky se entera de lo nuestro en el segundo uno, pues yo no podía esconder mi felicidad que sentía en aquellos momentos. Aunque Ana me había pedido discreción, no pude evitar contárselo todo al máximo detalle el mismo día que sucedió, nada mas llegué a casa. Obviamente le pedí a Ricky que fuera una tumba y no hiciera ningún comentario al respecto, pero pocos días más tarde Ana me confesó que Aitana ya estaba al corriente de todo y yo tuve que hacer lo mismo y contarle lo de Ricky. Así que poco después, decidimos quedar tomar algo los tres juntos; Ana, Ricky y yo. Quedamos a las doce de la mañana un día de finales de enero, para los tres esa era la mejor hora para reunirnos. Ana por las tardes estaba ocupada con Mía, Ricky abría el bar a media tarde y yo grababa mi disco después de comer, así que hacer unas cañas en una terraza antes de almorzar era nuestro plan ideal. Habíamos quedado en un bar cualquiera de una plaza cualquiera de Chueca, nada especial pero lo conocíamos y sabíamos que nos iban a atender bien. Cómo no, cuando llegamos Ricky y yo, Ana aún no estaba allí, así que nos adelantamos, escogimos mesa para tres y pedimos. Por suerte, ese día Ana no tardó mucho en llegar, o por lo menos por lo que ella era.

- Lo siento -dijo nada más llegar a la mesa. Saludó a Ricky dándole dos besos y luego vino a mí y, aunque con algo de indecisión, me plantó un beso en los morros.

- Suerte que queríais discreción hijas -rompió Ricky con toda la razón al ver que nos comíamos la boca allí en medio.

- Pero tu ya lo sabes, ¿no? -preguntó Ana refiriéndose a Ricky.

- Y si no lo sabía, con el beso que le acabas de plantar, ya lo sé -continuó Ricky bromeando.

- Pues ya está -respondió Ana riendo- ¿Ya habéis pedido? -preguntó.

- Sí -respondí- lo de siempre.

- Vale -dijo Ana mientras dejaba sus cosas en la silla que iba a quedar libre y se sentaba al lado de Ricky, enfrente mío. Fue entonces cuando cogió aire como si le faltara- Tengo que contaros algo -dijo algo nerviosa. Me quedé un poco parada porque no tenía ni idea de a lo que se refería y esas 4 de palabras siempre me producían algo de miedo, pero preferí no decir nada al respecto y dejar que siguiera para saber de lo que se trataba lo más pronto posible- Lo voy a hacer -continuó- El acústico, en el bar de Ricky, lo voy a hacer -nos aclaró al ver que obviamente no sabíamos de que nos estaba hablando.

- ¿En serio? -dijo Ricky emocionado- ¿Y eso?

- Quiero hacerlo, me apetece. Ya tengo escogidos los temas.

- ¿Cuándo? -pregunté sorprendida ya que no me había contado nada.

- El otro día, no podía dormir y me puse a ello. Ya he empezado a ensayar -nos contó con una sonrisa de oreja a oreja en su rostro.

- Pero eso es genial Ana -dije muy feliz por la decisión que había tomado y sin poder evitar acercarme a ella para darle un abrazo- ¿Y cuándo piensas hacerlo? -le pregunté curiosa.

- Nosotros tenemos la agenda más que vacía -dijo Ricky- Cuando quieras, el bar es tuyo.

- Había pensado antes de Semana Santa -sugirió Ana.

- ¡Uy! ¿No es un poco pronto? -le dije a Ana.

- ¿Es a finales de marzo? -preguntó Ricky a lo que Ana asintió- Sólo quedan dos meses, ¿crees que tendrás tiempo suficiente? -le insistió Ricky sumándose a mi opinión.

- Sí -dijo Ana muy segura de lo que decía- La decisión ya está tomado -continuó para que no hubiese lugar a réplicas- Además que quiero hacerlo antes de que Mimi saqué su disco -comentó Ana.

- Si es por eso -le dije a Ana- quítatelo de la cabeza -continué, por que para nada me importaba que hiciese su concierto cuando yo ya hubiese sacado mi disco, menuda tontería.

- Ya lo tengo decidido -dijo Ana con su característica cabeconería- El 20 de marzo hago el concierto.

- Pues ya podemos espabilar con la promo -dijo Ricky- O se nos va a tirar el tiempo encima.

- ¿Y de eso quién se encarga? -pregunté sin tener ni idea de cómo se organizaba Ricky en su bar, porque a decir verdad, jamás me había interesado por ello.

- Lucas se apaña para hacer los carteles, ¿verdad Ana? -a lo que esta asintió- y nosotros nos encargamos de moverlo por redes. Por cierto, ¿has visto tu Instagram Ana? -le preguntó Ricky- Has crecido más de cien mil seguidores en apenas un mes -comentó.

- Ya ves, no pensé que lo del documental iba a pegar tan fuerte, por eso debemos hacer el concierto pronto ¿lo veis? -insistió Ana.

- No creo que sea por el documental hija -respondió Ricky riendo sorprendido por su incredulidad- La rubia tiene algo que ver -dijo refiriéndose a mí- Porque yo no he subido apenas, y los demás tampoco.

- Sea lo que sea -dijo Ana obviando el comentario- Vamos a anunciarlo en cuanto sea posible, ¿vale? -continuó- Así que voy a hablar con Lucas esta misma tarde.

- Vosotros os apañáis -dijo Ricky queriéndose desentender del tema.

- Oye Ricky -interrumpí la conversación- ¿Pero tu trabajas? -dije vacilándole.

- ¿Aguantarte es un trabajo? -preguntó devolviéndomela.

- Oye, te vas a quejar, que soy yo la que la tengo todo el día metida en casa -respondió Ana riendo.

- Pero bueno -interrumpí- Y a vosotros quién os aguanta ¿eh?

⏳⌛️⏳

Ese día nos liamos y al final tuve que correr para llegar a todo, puesto que no me senté a comer hasta las tres de la tarde, demasiado tarde para ser un día de diario y tener que estar en el estudio a las cuatro en punto. Y para colmo poco después de llegar a casa Ricky me dio una mala noticia que me llevó de cabeza toda la tarde.

- Mira que cuadro -dijo tendiéndome el móvil.

- ¿Que dices? -dije agarrando el teléfono de Ricky- ¿Que es esto? Por dios encima salgo fatal

- ¿Que hago?

- Nada, ignóralo -le dije a Ricky- De verdad -continué poniéndome algo más seria- Si haces algo al respecto Ana lo va a ver y no quiero que lo vea. ¿Entendido?

- Me parece hasta gracioso -comentó mi amigo.

- Ricky, no hagas nada. Por favor.

- Antes nos hubiéramos reído de todo esto, ¿que ha pasado? -me dijo Ricky algo decepcionado con mi respuesta a aquello.

- Ana no quiere hacerlo público aún ¿lo entiendes? Si ve eso se echará aún más para atrás. No quiero que vuelva a ocurrir lo que ya pasó hace años. Me niego que por una maldita foto se vaya todo a la mierda.

- ¿Quizás un poco exagerada no? En esa foto os estabais comiendo la boca...

- Da igual Ricky, no me la voy a jugar por una broma de mierda.

- Pues a Ana seguro que le haría gracia. Una pena... -quizás Ricky tenía razón y me había tomado demasiado al pie de la letra las palabras de Ana, ella quería ir poco a poco y por eso yo estaba siendo tan prudente pero lo cierto es que ella no se cortaba de besarme en medio de la calle o de demostrarme todo su cariño en cualquier sitio. Pero yo andaba con pies de plomo con todo lo que hacía fuera de aquellas cuatro paredes. Quería que saliese todo bien y quizás me estaba equivocando teniendo tantísimo cuidado con cada detalle y sin dejar nada en manos de nuestro destino.

Tiempo Perdido | ‪WARMIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora