Eres mi diario! ~EN PAUSA

Deka Eyen ~09

Sufrir

-Bueno tú me llamaste, soy Ashton -dijo.

Estoy soñando.

-Yo solo conozco a 2 Ashton y uno en defenitiva no es como tú y el otro no tiene vida -rebati

-Bueno en definitiva uno físicamente no se parece a mi y el otro te esta consiguiendo al amor de tu vida.

Oh por Dios

-Deka, despierta, Deka despierta.- me repetí.

Cuando abrí mis ojos aquel chico ya no estaba en mi habitación.

-Ya estoy alucinando -me convenci.

-¿Sabías que autoconvencerte de que es un sueño no cambiara la realidad? -dijo alguien a mi costado.

-¡Por Jesucristo Rey!, ¿en qué momento te sentaste? -exclamé asustada

-Cuando dijiste "Deka, despierta, Deka, despierta" -dijo imitando mi voz de una forma muy burlona y me regalo una sonrisa.

Genial, lo que tiene de guapo lo tiene de idiota.

-¿Donde están tus ojos? -dije burlandome por la desaparición de sus ojos cuando se empezo a reír.

-Si, chistosa. ¿Donde quedo tú belleza? - dijo.

Y me callé.

Es cierto, aun seguia en pijama.

-Chistoso.- dije rodando los ojos.

-Y ¿bien? ¿qué quieres que te opine?

-Bueno, primero me cambiaré y bañaré, luego vuelvo.-suspiro.

-Okey, señorita. -dice en tono burlón Ashton.

Abrí mi cajón y saqué mi ropa interior escondiendola entre el vestido que me pondría y me dirigí al baño.

-¿Te vas a cambiar en el baño? -preguntó Ashton, haciendo así que dejara de caminar.

Voltee la cabeza como el exorcista en su dirección y lo mire sin ganas, mi diario era mas pesado de lo que pensaba.

-Pues obviamente, ni que me pudiera cambiar al frente tuyo .-dije rodando los ojos.

El me miro, miró el piso pensativo, se tomo el mentón, levanto la mirada y la dirigió a mi.

-Pero si ya te eh visto -dijo.

Y me sonrió, ¡se estaba burlando!.

-Bueno que tu recién te dignes a aparecer asi -dije señalandolo con la mano por todo él- no es mi culpa, y si disfrutaste antes pues ya no lo haras más.

-Lo hago justo ahora -dijo levantando una ceja.

¡¿Cómo hacía eso?!

-¿A qué te refieres? -le dije.

-Tu pijama son unos shorts y tu polo es de tiras, digamos que no le dejas mucho trabajo a mi imaginación -dijo con simplesa y una sonrisa ladina.

¡Rayos!

Me dirigí corriendo al baño, con las mejillas sonrojadas.

¿Cómo no habia pensado en eso antes?

Me desnude con rapidez y me adentre en la ducha.

Cerré los ojos al sentir la lluvia artificial caer por mi rostro, acaricie mi cuerpo hasta que estuve en su totalidad mojada, tome el jabón y lo esparci por mi cuerpo, tome el shampoo y me lo apliqué en el cabello haciendo una serie de masajes hasta que haga espuma.