Hasta morir.

-Capítulo 6:

Salgo de la clase en cuanto veo que la mayoría ya se ha ido, últimamente tengo que hacer esto porque me llevo algunos insultos al oído y empujones intencionados si estoy muy cerca de la gente, todos me han cogido asco de repente, o bueno, más bien desde que soy la pardilla del lugar. Me dirijo hacia mi taquilla a dejar los libros cuando noto a mucha gente apelotonada delante mío, no me dejan pasar así que cambio de trayectoria encontrándome con Ben, quien me mira con preocupación, eso me recuerda que no he hablado con él desde la última vez que quedamos a comer.

-Hola. -Le ofrezco una sonrisa confusa, ¿por qué me mira así?-

-Hey, ¿cómo te encuentras? -Contesta con cuidado en sus palabras-

-Bien... ¿Qué quieres decir? -Frunzo el ceño-

-¿No lo has visto?

-¿El qué?

-Ya sabes, lo que pone en la taquilla.

-No, ¿es por eso que está todo el mundo aquí? -Miro a la multitud, todos murmuran cosas y ríen- No me dejan pasar para dejar los libros así que tendré que cargar con ellos todo el descanso.

-De hecho, no creo que debas mirar ahí.

-¿Qué ocurre con las taquillas a ver? ¿Tan grave es? -Veo cómo se forma una lucha interna en él sobre si decirme o no y en seguida entiendo por qué no va al grano- ¿Qué le han hecho a mi taquilla?

-Han escrito unas palabras en ella, con graffiti...

-Vaya, vaya, vaya... ¿Mirad a quién tenemos aquí chicos? -La voz del maldito Larry le interrumpe en su explicación- ¿Ya has visto tu taquilla?

-No, todos estáis en medio... -Digo sin estar muy segura de si hablar con él es seguro en estos momentos, esto va a acabar mal... para mí-

-Chicos, dejarle paso a nuestra querida Alix, o más bien no querida a juzgar por los mensajes que te dejan. -Todos ríen por lo bajo mientras me miran con burla en sus caras-

-Ben...

Pero él no responde, miro hacia atrás y está mirando al suelo, no puedo ver su expresión y siento temor, no quiero ir hacia allí. Me giro con rapidez para marcharme a los baños y poder estar sola, pero alguien es más rápido que yo y me coge del brazo para que no pueda escapar, ese 'alguien' por supuesto es Larry, el cabecilla de todo esto.

-¿Adónde crees que vas? ¿No quieres ver el regalito que te han dejado? -Su voz es maliciosa, no quiero hacerlo pero creo que estoy entre la espada y la pared-

Camino con inseguridad por el pasillo que me han hecho todos y evito sus miradas, en este momento me gustaría desaparecer, pero sólo me queda mirar mi taquilla abierta, estaba todo desordenado en su interior, pero eso no importaba comparado con las palabras que había.

"Que hayas hecho caso sólo demuestra la perra que eres, y lo debe saber todo el mundo"

Está escrito con palabras pequeñas en color negro por toda mi taquilla y las dos que están a sus lado ya que no cabía.

-Bueno, pues ya lo sabe todo el mundo, Alix Moore es una gran perra. -Larry continua con su show, pero yo ya no escucho lo que dicen-

Una mano agarra mi brazo de nuevo y me saca de allí, es Ben, y entonces consigo escuchar la voz del director diciendo que qué había pasado, llega demasiado tarde para salvarme del ridículo que acabo de hacer.

-Hey, Alix. -Me coge por los hombros y me sacude un poco cuando estamos lejos de la gente, entonces noto que no llevo los libros conmigo, se me habrán caído al ver esa cosa- ¿Te encuentras bien? Estás pálida.