Capítulo 6
Una resaca de la puta madre... y un remordimiento de conciencia que no se disiparía con solo un "lo siento..." Harry sabía que hubiera sido muy bueno para él saltarse el trabajo durante al menos dos días y caer en el ministerio como si nada. Pero también sabía que no era un cobarde... que a pesar de que lo pasado en casa de Ginny la noche anterior fue completamente increíble, asombroso, también fue erróneo, y debía pedir disculpas. No por el acto en si, el cual aun recordaba a pesar de las lagunas mentales que aparecían entre un recuerdo y otro, sino por su actitud, por las palabras, por ser algo brusco al confundirla con la zorra de Romilda, por todo... y por sobre todas las cosas, bajarla de la nube del "y vivieron felices para siempre," por si ella, esa pelirroja de fuego, que se veía, y se movía magníficamente, encima o de debajo de él durante el sexo, y creyera que podía haber una oportunidad entre ellos. No, no, no, se repitió mientras cerraba los ojos, para evitar las nauseas. Eso no ocurriría nunca. Miró su dedo anular a medida que entraba al ministerio. Ese maldito anillo era día tras día el recordatorio de que no era libre, y nunca lo sería mientras la maldita perra que tenía por esposa estuviera con vida. El matrimonio en el mundo mágico era "hasta que la muerte los separe" la de ella, o la suya.
Subió apesadumbrado al elevador y se encontró cara a cara con alguien a quien nunca quisiera encontrarse, y menos en un lugar tan pequeño como ese maldito habitáculo. La sonrisa falsa, y el olor a perfume a rosas, junto con el monocromático traje del mismo color, le reventaban los globos oculares. Pidió a todos los santos magos que esa mujer no hablara... si hablaba, juró que iba a vomitarle encima.
- ¡Señor Potter! – mala suerte, el agudo y chillón timbre de Dolores Umbridge, se hizo eco en el pequeño ambiente, e hizo que el dolor de cabeza de Harry se intensificara al triple... - que bueno es verlo de pie.
- ¿Y por qué diablos podría estar en el suelo? – dijo con ironía y apretando los dientes, tratando de que su cerebro se quedara quieto y las nauseas no solo de la borrachera, sino también de ver a esa vieja bruja pasaran inadvertidas.
- Bueno... - carraspeó y sonrió con una mueca de su boca, tan cínica – todos sabemos qué sucede una vez al año...
- No tengo la mas puta idea de lo que habla – y cuando ella iba a abrir la boca, él a interrumpió – y tampoco me interesa lo que una vieja de mierda como usted tenga que decirme...
- Vaya - chasqueó la lengua – alguien debería enseñarle modales – bufó – es increíble que usted tenga el puesto de trabajo que tiene con esa tan mala educación – Harry se puso rojo de la bronca y el odio que le cargaba a esa mujer afloró, primero en sus ojos y luego en sus movimientos cuando se acercó a Dolores Umbridge como un tigre que acecha a una vieja y gorda gacela, y sin dejar de mirarla la acorraló contra una pared. La mujer abrió los ojos sin dejar de parpadear. El odio se acrecentó en su garganta y lo expulsó en palabras.
- ¿Ah, si? – dijo apoyando las manos a ambos lados de la cabeza de Dolores tan pulcramente adornada con su asqueroso moño – y por lo que veo, usted tendría especial interés de ponerme en cintura – le mostró su mano con la vieja lección que le enseñara esa misma mujer – y estoy seguro que sus métodos serían altamente productivos, no me olvido de ello – sonrió con insolencia – no crea que no se que usted es una hija de puta de primera clase... - la miró de arriba abajo haciendo temblar a la mujer – y tampoco voy a negar que si tuvo el descaro de ponerse al lado de los mortífagos hace unos años, no podría estar haciendo lo mismo en estos momentos – sonrió – usted tiene las cualidades de las cucarachas... soportan el paso de los años, los diferentes cataclismos y continúan viviendo... y revolcándose en la mierda – le tomó la barbilla con fuerza – te estoy vigilando... un paso en falso y seré feliz de estar allí para hacértelo notar.
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Lo que no fui
FanfictionNada es igual.Los amigos se separan,el amor se pierde y lo que fue alegría, hoy es infelicidad.Hasta que el mundo está nuevamente en peligro y deberán unirse para evitarlo. qué hacer cuando se pone en la balanza lo que se debe hacer contra lo que se...