#10.- ༉ El rayo de sol que se la llevó ᬊᬁ

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༉ 𝑊ℎ𝑖𝑡𝑒 𝑡𝑢𝑏𝑏𝑖𝑒:

Las montañas: Un lugar frío a más no poder, pero más seguro y útil a comparación de la cueva.

Tomé con fuerza mi sombrero, el aíre podía arrebatarmelo. Caminé y a unos pocos metros vi troncos con señales de haber sido talados hace un rato.

─¿Troncos? Nadie ha estado aquí en años, es imposible la vida aquí. ─Mire a mi derecha. ─¿Papilla tan arriba de las montañas? Lo peor es que no está congelada.
Escuché una voz con eco, una voz chillona e irritable. No me dio tiempo de reaccionar cuando una figura grande me noqueó.

Desperté, sobre un charco de sangre y con restos desmembrados de tubbies. ─Vomitaré. ─Me levanté, manchado de sangre, la neblina no era tan densa como al principio de las montañas. Un droide se acercó a mí mientras talaba un árbol.

─Despertaste, saludos.

─¿Hola?, ¿Qué haces?

─Corto leña para el señor, yo lo mantengo vivo ─Respondió.

─¿El "señor" es quién me trajo aquí? ─Pregunté confundido, repito. La vida aquí es imposible para cualquier teletubbie.

─Eso es correcto ─Contestó.

─¿Y por qué trabajas para él?

─Me ordenaron matar al señor antes de que saliera de la tierra principal, una vez que lo vi sabia que no podia matarlo, solo tenia 2 opciones servir o ser destruido; decidí servir ─Explicó.

─¿Y por qué me trajo aquí?

─Mañana será cocinado y tragado por el señor, no se preocupe, haré una buena salsa con usted, morirá pero sabrá muy bien -Sacó un cuchillo.

─¡No soy comida! ─Grité, pero sabía que saldría de aquí.─ Ugh, como sea, ¿Viste una cámara de visión nocturna?

─Ahh, sí. La dejó caer cuando el señor lo trajo aquí. ─Afilaba el cuchillo.

─Ya, adiós. ─Me alejé.

─¡¿A dónde va?! ─Preguntó el droide.

─No seré comida. ─Aclaré y seguí mi camino.

─No ser irá, no, no lo hará, el señor se dará cuenta y lo asesinará de inmediato. . . Y a mí, por haberlo dejado ir.

─Mmm me parece que ese no es problema mío, tengo algo urgente por hacer y mucho más interesante que ser comida, suerte. ─Me despedí.

─. . .

Corría mirando a todas direcciones para encontrar mi cámara de visión nocturna. Escuché un grito, de dolor, con tono grave, supuse que era el señor de quien hablaba el droide. Corrí más rápido hasta llegar a un portón de rejas, cerrado con una cadena. Cerca estaba una cabaña, fui hacia ella y encontré un tubo, lo llevé a la puerta y forcé la cadena. Estaba amaneciendo, mi cámara de visión nocturna estaba lejos, había un tal "señor" el cual quería comerme, hacía mucho frío. Me olvidé de la cámara y crucé el portón, colocando la cadena de nuevo en él.

─La estación de satélite no está lejos, el sol comienza a salir, podré sin mi cámara.

Este nuevo lugar era cálido, pero desierto, muy poca vegetación había en él. Apresuré el paso, la liga que sostenía mi cabello se rompió y este cayó sobre mis hombros.

─Me siento libre.

༉ 𝐷𝑖𝑝𝑠𝑦:
Ya amanecía, desperté antes que Laa laa. Sobraba leña de la noche y la utilicé para prender otra fogata. Me iba calentando poco a poco, pensaba en lo que había ocurrido, a lo lejos vi una silueta de un tubbie, venía de prisa, y era alto. No sabía quien era, No era Tinky Winky, no era Yeti. No era Po.

─Laa laa ─La moví para despertarla. ─¡Laa laa!

─¿Qué sucede? -Preguntó quejando. Odiaba despertar temprano.

─Vámonos, alguien viene y no podemos bajar la guardia. ─Tomé su mano y la levanté, la cargué en mi espalda y corrí.

─¿Y a dónde vamos? No conocemos el lugar. ─Decía preocupada.

─Podemos encontrar algún escondite.

Llegamos a unas ruinas, la bajé y tomé su mano. Nos escondimos debajo de un pequeño puente. Ella me miró, yo a ella, me abrazó y después se separó para señalar un plato azul.

─Mira, una papilla.

─¿Qué hace aquí? ─Pregunté confundido.

─Y recordar que antes pensábamos que nosotros éramos los únicos teletubbies. Resulta que fuera de nuestro hogar hay más -Dijo ella.

─Que miedo, e interesante a la vez, sigamos caminando Laa laa, parece que no hay peligro. ─Salimos del escondite.

─De acuerdo ─Contestó.

Cuando llegamos a la salida de aquellas ruinas, Laa laa cayó al suelo, debajo de dos grandes pilares a punto de colapsar.

─¡Laa laa! ─Me tiré a su lado─ ¿Estás bien?

─Mi cuerpo. . . Todo mi cuerpo duele -Respondió con dolor.

─Yo te cargo, ven.

─No, no quiero convertirme en un monstruo ─Sus ojos dejaban salir lagrimas.

─No no, tú no serás un monstruo, no digas eso -acaricié su mejilla. Empezando a llorar, su cabello rubio claro poco a poco estaba tomando un tono más oscuro.

─Dipsy déjame aquí, huye -Me tomó de los hombros.

─No te dejaré sola ─La abracé.

─Vete ya, por favor ─Su cuerpo, lentamente expulsaba humo violeta. ─Por favor, mírame.

─No te voy a dejar, si voy a morir que sea a tu lado. Total, yo también moriré. ─Le di un beso en la frente.

─¡Po aún está vivo! ─Gritó ella.

─¡Eso no lo sabemos! ─Contesté yo.

─Po está vivo, él vive todavía, encuéntralo, él espera ─Dijo ella, con seguridad. ─Jura que lo encontraras.

─No sé donde está o si aún está vivo, además ─Respiré hondo, y cerré mis ojos. ─Él. . . probablemente ya sea como Tinky.

─Eso no, jura que lo encontrarás, por favor hermano. ─Lloraba, y sostenía mis manos con fuerza.

─Lo juro. Tú promete, que nos veremos en la otra vida ─Llorando, solté las palabras.

Se levantó del suelo, un poco más alta que antes, más que yo, con el pelaje más oscuro, con el humo expulsado de su cuerpo. Tomó mis manos y las entrelazó con la suyas.

─Te veo en la próxima vida, nuestra otra vida.

Me llevó a la salida, nuestras manos se separaron y un rayo de sol cayó sobre nosostros. No.

Sobre su cuerpo, el sol la iluminó a ella, a su ternura. A su belleza. Ese rayo de sol era suyo, de ella.
Y cuando el sol subió más, se llevo el rayo, y con él, a mi hermana.

Laa laa ya no estaba.
Soltó un grito, no era su voz. Su voz se fue. Ella se fue.

Mi hermana era un monstruo ahora, y ella murió sabiéndolo. Lloré.

Lloré y lloré de dolor, el alma me dolía. Me desgarraba la garganta con la fuerza de mis gritos, tiraba de mi cabello, arrancaba mechones de este. Dolía, dolía de la manera más horrible que existía.
Ardía.
Quemaba.

Quería morir.

Llegué a un lugar, cerrado, la puerta era de metal, y a su lado había una gran antena. Con un destello hasta lo más alto. Subí y me recosté sobre su techo.

Laa laa ya no me acompañaba, su cuerpo estaba lejos de mí.
Tinky Winky era un monstruo.
Po estaba perdido. Vivo o muerto. Monstruo o no.

Yo estaba solo. Odiando todo.
Sin quererlo, dormí.

 || Tнє єи∂ σƒ тнє ѕтσяу ||『 𝐒𝐥𝐞𝐧𝐝𝐲𝐭𝐮𝐛𝐛𝐢𝐞𝐬  AU ෴Donde viven las historias. Descúbrelo ahora