La historia entre Aidan Gallagher y Kennedy Daccarett, es complicada de contar. Amigos de la infancia, uno sintió cosas que la otra no, la amistad se rompió y se separaron. Pero el destino juega sus cartas muy bien, los papales cambian.
Kennedy es u...
Cómo decía nos quedamos sentados y callados pero no paso ni un minuto cuando Aidan decide romper el silenció.
—¿Entonces me perdonas porque lo que te hice?—
—nunca me pediste perdón— respondo sin mirarlo
—¿Me perdonas?—
—no es lo mismo si te estás obligando a hacerlo—
—nadie me obliga, más bien quiero hacerlo—
—aja ya—
—¿entonces?— insiste
—si Aidan pero ya deja de molestar—
—claro...que tal si hacemos algo de provecho, ya que son 5 minutos pero si queremos podemos hacer que dure más—
—ni de chiste—
—¿Que tiene de malo?— pregunta con inocencia
—no soy la chica fácil que tú piensas que soy Gallagher—
—no pienso eso de ti— hace que lo mire a los ojos —creo que eres bella e inteligente, desde niños siempre lo e pensando—
—claro—
Se comenzó a acercar cada vez más hasta llegar al punto donde comenzó a hablar en mi cuello, ni puta idea de lo que estaba diciendo, algo dentro de mi impedía que le prestará atención, la sensación que tenía en este momento era indescriptible para mí, hicimos contacto visual y me besó, fue demasiado tierno, nosé cómo describirlo pero era la mejor sensación del universo.
—tu tienes novia— lo alejo
—la puedo terminar por ti si quieres—
—sería muy lindo pero a mí no se me olvida que me humillaste frente a todos— me paro de la cama —y yo no estoy a tu disposición—
Me salgo de la habitación y vuelvo a dónde todos estaban jugando, mi hermana solo se me quedó viendo y no me dijo nada, el juego terminó y siguió la fiesta por un rato más La verdad yo estaba tan cansada que me acosté en una de las tiendas que estaban ahí, me quedé acostaba y tiempo después Sofía se durmió conmigo.
|Al día siguiente|
Me desperté por un ruido muy escandaloso, era una música a todo volumen, me pare del piso y vi como pocos seguían bailando, voltie a mi lado para percatarme que Sofía aun seguía durmiendo, la desperté.
—¿Que pasa?— me dice sin abrir los ojos
—es hora de irnos—
—Kennedy es muy temprano—
—vamonos— le vuelvo a decir
—está bien pero primero vamos a bañarnos—
Se levanta del piso y se mete a un baño con su maleta, pasan 15 minutos y luego sale, me baño super rápido y luego salgo para cambiarme, me pongo esto:
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