Contraofensiva.

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Temari revisó su estuche de armas por sexta vez y eso era una clara señal de que estaba algo más que nerviosa, Shikamaru dejo de lado lo que tenía entre sus manos y avanzó hasta su esposa, el trascurso del día se había arrastrado con pereza y algo de incomodidad, el resto del equipo se había dirigido la palabra exclusivamente para lo relacionado al plan y de ahí en fuera todo había sido silencio y más silenció.
Y finalmente todo gracias a Ino que no conforme con armar un buen lío también había comenzado con pequeños comentarios a susurros con su esposo quién no parecía tan divertido escuchándola, Shikamaru suspiro, Sai le daba pena de cierta manera ¿Cómo es que había terminado tan mal parado? Aunque a decir verdad el tampoco podía decir mucho, seguramente Sai pensaba lo mismo de su Temari aunque no había punto de comparación y si bien era cierto que Temari solía ser algo impulsiva, jamás compararía eso con el gran talento de Ino para hacer las cosas que ya de por sí eran malas fuesen aún peores.

— ¿Que es lo que te preocupa? — Shikamaru se detuvo a un costado de su esposa y atrajo sus caderas contra sus brazos — ¿Es por lo que dijo Ino? — Temari pareció sorprendida por un momento, luego soltó los kunais que portaba y enredo los brazos alrededor de él — No y si — replicó pegando sus labios brevemente a los de su amado esposo.
— Mujeres — resopló el en tono de broma — ¿Que quiere decir que no y luego que si?
— Eso — replicó la rubia con una amplia mueca dibujando un par de nuevas arrugas en su frente — es sobre lo que dijo pero no es exactamente eso... — Temari tomo una bocarada de aire como si se  estuviera cuestionando lo siguiente que diría — es que me preocupa Tenten.
— eso ya no es nuevo — convino él.
— Ya sé pero esta vez es diferente.
— Diferente ¿Por qué?
— Es que Madara vino a mí.
— ¿A ti? ¿Y por qué?
— El quería decirme...
— ¿Chicos? — la voz de Sakura interrumpió la conversión — Sasuke quiere que nos reunamos para partir a la salida de la aldea, desde allí podremos plantearnos el siguiente movimiento de la contraofensiva.
— ¿Ahora? — Temari se puso en pie de un salto.
— ¿Y Madara y Tenten? — interrogó Ino tras la pelirosa.
— Ellos nos alcanzarán allí — esta vez fue el turno de Sasuke de intervenir.
— pero...
— No hay "peros" — contradijo el pelinegro — solo aclaremos algo, estoy a cargo de este grupo y haré mi mejor esfuerzo por hacer que todos entiendan algo, las órdenes las daré yo, no quiero ni una discusión más ¿Esta completamente claro? — Temari fue la primera en asentir, luego le siguieron los demás, uno a uno, todos tuvieron su respuesta.
— Partiremos en breve, apresurense a terminar lo que tengan pendiente.

***

A pesar de que podia sentir las miradas curiosas de los transeúntes, Tenten se sentía cómoda y extrañamente felíz, incluso cuando algunos tenían la desfachatez de detenerse para mirarlos desde un mejor ángulo.
Madara sin embargo caminaba a su lado como si nada existiera más que ella, minutos atrás se habían visto obligados a salir de su pequeño nidito de amor cuando ambos se percataron de lo tarde que resultaba ser y el peso de la realidad habia terminado por destruir sus ensoñados sueños de amor.
— Pagaría lo que fuera necesario por saber ¿Que es lo que piensas? — replicó de pronto Madara logrando atraer la total atención de la castaña.
— Eso es sencillo — canturreo ella jugueteando con sus manos entrelazadas, Madara enarco las cejas, quizás para ella fuese fácil pero en contraparte para el todo lo que respectaba a Tenten era un sutil misterio, uno que había aprendido amar inesperadamente.
— ¿Así? — interrogó y Tenten asintió casi al instante logrando que su cabello se balanceara de un lado a otro — ¿Y que es lo que piensas entonces?
—En ti — sentenció ella — resulta extraño por qué en lo único que puedo pensar en es tí.
—Se llama estar loca por mi — replicó el Uchiha y Tenten dirigió la mirada hacia el frente del caminó, más allá de ella unos niños corrieron en mitad de empedrada calle, la castaña resopló —  Es verdad señor Uchiha — replicó manteniendo la barbilla muy en alto — estoy loca por usted.

Puñetazos de tu ausencia [Sin editar] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora