ϲαριτυℓο 64

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SOPHIA

Me siento muy mareada, cansada y con dolor de cabeza  siento el cuerpo muy pesado, intento abrir los ojos pero siento los parpados tan pesados que se me complica mucho abrirlos.

De lo que si me doy cuenta es de que estoy acostada en un colchón y encima de unas sabanas muy suaves me intento levantar de la cama pero algo sujeta mis brazos y tobillos impidiendo que me levante. Al no poder levantarme me empiezo a sofocar e intente zafarme de lo que sea que me este sujeta pero bien al intentar zafarme me lastimo.

No encuentro otra opción más que rendirme. Pero luego recuerdo lo que paso, se quien era la persona que tapo mi nariz con ese pañuelo lleno de cloroformo que sostuvo por un gran rato contra mi nariz hasta dejarme inconsciente, se quien es la persona que me susurro "al fin  te tengo preciosa" esa es la persona que a sido mi pesadilla durante muchos años la persona que nuca me va dejar en paz hasta que yo muera.

Decido no rendirme, no quiero rendirme no esta vez, no quiero que me toque de nuevo pero se que eso es imposible de detener no puedo contra el no puedo contra nada soy débil, siempre he sido malditamente débil. No puedo contra los demonios que me atormentan

Vuelvo a intentar zafarme de los nudos de lo que sea que haya usado para amarrarme pero no puedo, volteo a ver a los lados para ver si hay algo que pueda usar pero no veo nada todo esta oscuro y se me va hacer mas imposible salir de aquí. 

Me rindo. Claramente no nací para luchar con nada, soy muy débil

Escucho pasos afuera que cada ves se escuchan mas cerca hasta que suena como introducen algo en la puerta para luego abrir. 

Ese sonido de esas botas que tanto me atormentan cada vez que las escucho caer sobre el piso de madera.

—Por fin despiertas preciosa  —Escucho que dice esa persona que tanto detesto con esa voz tan repugnante que tiene. No necesito verlo para saber quien es, me basta con escuchar su asquerosa voz para saber el depravado que tengo adelante.

Al no escuchar nada de mi parte continua hablando

—¿Ahora que? ¿Se te comieron la lengua los ratones? ¿No me quieres hablar amor? —Siento como cada se acerca más a la cama hasta que siento que de un lado de la cama se unde y me doy cuenta que se acaba de sentar a la par mía. Me pongo mas nerviosa pero no hablo

—¿Te gusta lo rudo cierto? porque te he dicho muchas veces que no me gusta que te quedes callada cuando yo te hablo que si no me respondes me iba a empezar a portar rudo contigo, al parecer eso es lo que te gusta —Siento su aliento cerca de mi cara y trato de girarla en el sentido contrario para no tener ningún contacto con el.

Ignoro lo que el dice y no le respondo.

—Te he dicho que me respondas zorrita —Dice eso para luego agarrarme muy fuerte del  cabello para voltear mi cara hacia el haciendo que nuestras caras estén cerca.

—AARGHH —Pego un grito cuando jala con brusquedad mi cabello.

—Esto es lo que te gusta ¿no? ¿Te gusta que te agarre con fuerza? —Dice pegando su nariz a mi mejilla para empezar a  pasarla ahí mientras olfatea 

 —No —Digo tratando de alejar mi cara de la suya.

 —Nena ¿Sabes porque te he traído aquí? —Habla sosteniendo con mas fuerza mi cabello para pegar mas su cara a la mía provocando que sus labio rocen los míos.

—No —Espeto con molestia mientras muevo mi cara con brusquedad para no tenerle cerca.

—No te muevas —Dice agarrando mi cara para ponerla en el misma posición que antes— Pues le comunico nena hoy le voy a dar su regalo de cumpleaños y va ser el mejor de su vida aunque ya sabe que es pero igual se que le encanta que le de este tipo de regalos —Dice besando mis labios.

¿POR QUÉ A MÍ? •📖•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora