Conectada a ti 3: Reecuentro en Londres (Harry Styles y tú)

Capitulo 25 (HOT)

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Harry

Se me cayó la camiseta al suelo en cuanto lo dijo. ¿Lo había dicho en serio? ¿Quería que la besase? Sé que le dije que sería ella la que me pidiese que la besara, pero pensé que después de la "conversación" de esta mañana eso había quedado en el olvido

En ese momento, toda la rabia que tenía por lo que me contó ________, se evaporó como el agua y dejó paso a la incredulidad y el deseo. Yo quería hacerlo, moría por hacerlo, más que nada en el mundo, pero no quería que lo hiciese sólo por pena por todo lo que había leído

"Da igual, Harry. Quiere besarnos. Hazlo ya, idiota" -me contestó mi corazón con ansia

Sus ojos marrones achocolatados y dulces habían vuelto, vivos e iluminosos y sus labios estaban abiertos, preparados para recibir mi beso y mi calor. Parecían tan sabrosos y dulces. Sabía que lo eran, incluso después de tanto tiempo separados, pero ahora tenía oportunidad de volver a comprobarlo. ________ seguía esperando que me moviera para que mis labios se juntasen con los suyos. Y no la iba a hacer esperar mucho tiempo

Intenté parecer entero ante esta situación que hacía que me volviera de mantequilla así que tragué saliva y obligué a mi corazón y a mi respiración a que se tranquilizasen. Una de mis manos se dirigió de forma casi firme a la cintura de _______ y la acerqué lentamente a mí. Podía sentir cómo su pecho subía y bajaba de forma apresurada, igual que el mío. Ella colocó su mano suavemente en mi brazo y millones de terminaciones nerviosas se accionaron inmediatamente, haciendo que se electrificasen, haciendo que esa electricidad atravesase mi piel hasta llegar a mi corazón como un rayo veloz

Mis ojos no perdían de vista los suyos, no quería hacerlo en ningún momento, y mi otra mano subía lentamente hasta su cuello y atraer su cara un poco más. Pasé mis nudillos por su suave y sonrosada mejilla y después, la acuné en mi mano. Ella cerró los ojos y me sujetó la mano, justo como yo lo había hecho abajo en el salón. Jamás sentí tanta ternura y delicadeza como la que desprendía aquella hermosa criatura que estaba delante de mí. Era hermoso a la vez que aterrador. Me abrumaba todo el amor y el deseo que me hacía sentir esta mujer con tan sólo una caricia. Podría hacer cualquier cosa que me pidiese con tan sólo un roce de sus manos en mis mejillas. Acaricié la mejilla de nuevo con mi pulgar y me atreví. Fui bajando poco a poco hacia su boca, dándole tiempo por si acaso se echaba a atrás, y ella cerró sus preciosos ojos cuando planté mis labios con los suyos, besándola cariñosamente

Los fusibles de mi cabeza terminaron de fundirse con aquel beso. Mis pulmones se cerraron e impidieron que entrara algo de aire en ellos y mi corazón bombeó tanta sangre y tan deprisa que pensé que me iba a dar un ataque al corazón. Ese beso era tan dulce y tan deseado. Siempre soñé estar con ella de esta forma desde que lo dejamos y ahora por fin estaba realizando ese sueño que jamás pensé que se cumpliría. El mismo deseo que pedía cuando veía una estrella fugaz o cuando soplaba las velas de mi tarta de cumpleaños se cumplió. Tardó seis años, pero se cumplió. Y yo no podía estar más extasiado de felicidad. Era imposible ser más feliz de lo que yo estaba ahora mismo. Era como estar sobrevolando el cielo a cientos de kilómetros del suelo sin tener miedo de las alturas

Pero tenía que parar. Yo no quería, pero tenía que hacerlo. No por mí (me pasaría la vida así con ella), sino por ella. Habían pasado seis años y se había peleado con Lucas, su marido. No quería aprovecharme de ella de esa manera. No quería asfixiarla. Así que me aparté como pude, aún con el sabor de su pintalabios en mi boca, y la miré, tomando una leve bocanada de aire para mantenerme firme en pie. Ese beso me había trastocado seriamente. Ella se me quedó mirando con esa mirada que tanto me encandilaba y me enamoraba. Ahora ya podía volver a ver a la _________ de la que estaba profundamente enamorado