Jungkook negaba de un lado a otro, la acompañante de su hermano no quería irse del apartamento. Jeongguk reía escandalosamente mientras tiraba las pertenencias de la chica fuera del lugar, la joven se fue antes de pronunciar un "llámame".
—Pobre chica —se lamentó Jungkook— si supiera que eso no volverá a pasar.
—Así es hermanito —sonrío coqueto mientras se tiraba en el sofá cruzado de piernas— sabes que no me gusta repetir.
Jungkook lo miró asqueado antes de dirigirse a la cocina para preparar café. No faltaba nada para que la chica llegara, quería dar una buena impresión, pero con el pervertido de su hermano le sería bastante complicado. Jeongguk no tenía pelos en la lengua para decir las cosas tal y como las pensaba; sentiría demasiada pena por Sea si llegara a decirle algo fuera de lugar. Su hermano era todo un Playboy, las tenía a todas muertas por él, a pesar de tener la misma cara, sus personalidades eran muy diferentes.
Jungkook era tranquilo; odiaba el ruido, las fiestas y el alcohol. Prefería más la paz y tranquilidad, un libro y entretenerse viendo Netflix en su habitación.
A diferencia de Jeongguk.
Jeongguk amaba a las mujeres; el sexo, las fiestas y el alcohol.
Hubo ocasiones en donde solían confundirlos a ambos por tener la misma cara y complexión.
Ambos eran musculosos, se la pasaban mucho en el gimnasio. Pero Jeongguk era el que portaba tatuajes; en cambio, Jungkook odiaba las agujas por lo cual no tenía ninguno.
Eran iguales pero a la vez tan diferentes.
Suspirando tomó la bandeja que contenían las tazas de café y el azúcar para dirigirse hacia la sala donde Jeongguk se encontraba aún cruzado de piernas con los pies sobre la mesa de centro. Con un manotazo, Jungkook sacó ambos pies de su gemelo para dejar la bandeja sobre esta ignorando los quejidos de su hermano.
—¡Oye! —se quejó— dime una cosa, la persona que ocupará la habitación, ¿es hombre o mujer? —preguntó interesado.
—Es una chica —pudo imaginar los ojos ardientes en lujuria de Jeongguk en ese momento— trata de no seducirla como a las demás Jeongguk, no seas pervertido.
—Si está buena es obvio que debe estar en mi cama —lamió sus labios como si se la estuviese saboreando, Jungkook hizo un gesto de asco— ¿Cómo se llama?
—Sea. Y ni se te ocurra tocarla, aún es joven —Jeongguk lo miró esperando a que siguiera— es una niña aún Jeongguk, tiene veinte años y tu veinticinco, no seas un cretino pervertido. Además; por lo poco que pude hablar con ella, es demasiado inocente.
—Eso quiere decir que aún es virgen —exclamó emocionado.
—Jeongguk —le echó una mirada fulminante— no te acerques a ella. No quiero que le hagas daño como a las demás —Se lamentó.
—Cuando me dices eso es claro que debo hacerlo, Jungkook —habló burlándose.
—Eres un... —el timbre lo interrumpió.
—Cállate y ve a abrir la puerta; ya quiero conocer a esa muñeca —habló ronco.
Jungkook suspiró, era bastante obvio que Jeongguk no le haría caso, nunca lo hacía. tendría que protegerla de él, no quería que Sea salga lastimada, no dejaría que se convirtiera en otra víctima de Jeon Jeongguk.
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Promise | JJK & JJGK ✓
De TodoJeongguk y Jungkook buscaban a una mujer, una mujer que los amara a ambos por igual, con la misma fuerza, con la misma pasión e intensidad. Sea Park es una chica inocente, tranquila y muy tímida. ¿Que pasará cuando conozca a los gemelos Jeon?