Luego de un caótico fin de año escolar. Los vampiros aún no capturaron a Víctor, y perdieron a una de ellos. ¿O tal vez no?
Wyatt se siente culpable, y tiene la necesidad de buscarla. ¿Encontrará lo que esperaba?
Tal vez no todas las historias eran...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La noche anterior, había sido la mejor. LA MEJOR. De lejos.
- Awooo - Escuché aullar a Wynter asustada, mientras miraba en mi dirección.
- ¿Qué pasa? - Dijo Willa llegando. Wynter me señaló, y mi hermana se giró a verme. - ¿Qué rayos te paso?
- ¿De qué hablas?
No quería que me hagan otro interrogatorio. Así que en cuanto regresé, de llevar a Liv a su casa, me cambié de ropa y me bañé. Intenté eliminar todo rastro de su olor en mí. Me gustaba cuando su aroma es impregnaba en mí. Me hacía sentir que siempre estaba con ella. Pero Willa y Wynter no dudarían en empezar a molestarme, así que no me quedaba de otra.
- Parece que no dormiste nada.
- Somos hombres lobo, no dormimos de noche.
- Pero desde que vamos a la preparatoria humana, nos vemos obligados a hacerlo. - Se acercó a mi lentamente, hasta quedar en frente de mi. - Esas ojeras dan miedo. ¿A qué hora te acostaste?
- Creo que no pude dormir en toda la noche.
- Se nota. Si vas así a la preparatoria, asustaras a todos. - Dijo Wynter. - Tal vez no debas ir.
Al instante, el sueño abandonó mi cuerpo.
- No, estoy bien. Vamos a la preparatoria. Caminen. - Dije intentando irme.
- Wyatt. ¿Seguro que quieres ir así?
- Liv no se va a querer acercar. - Susurró Wynter en broma, causando que Willa se riera un poco y que yo la mirara molesto. - Lo siento.
- No tengo otra opción. No pienso faltar hoy.
- ¿Qué les parece probar con un poco, mucho, de maquillaje? Algo podríamos hacer.
- Wynter tiene razón.
- No, lo siento. Pero no lo haré.
- Piensa que no es diferente a las marcas del cuerpo. Solo que estas van a disimular tus ojeras. ¿A qué hora te dormiste?
- A eso de las tres de la mañana. Pero solo entre ratos. - De hecho... apenas dormí veinte minutos. Siempre que cerraba los ojos, recordaba lo que pasó con Liv. Así no podía dormir.- Y no pienso dejar que me maquillen. Así que caminen.
Ellas se rindieron y nos fuimos a la preparatoria. Los otros lobos me miraban un poco asustados. No podía verme tan mal ¿O sí?
- ¿Seguro que no quieres el maquillaje? Sabes que es normal en nosotros.
- No, gracias.
- Entonces, mejor no levantes la mirada. Vas a asustar a Liv.
- ¿Quieres apostar a qué no?
- Esto se pondrá bueno. - Escuché susurrar a otro lobo.
- Si yo gano... te vestirás con el uniforme de animadores. Una semana.
