Uh...Dad, I Got My Boyfriend Pregnant

.Vet.

Los ojos de Derek se abrieron de en par en par y la confusión inmediatamente inundó su ser. Pues ya no estaba en la cocina, sino recostado en su habitación y Stiles ya no se encontraba frente a él, ni siquiera cerca del lugar, pues su aroma era muy débil.

— Qué rayos? -murmuró e inmediatamente se sentó, observando el lugar en completa confusión.

Se había desmayado o algo así?.

Y entonces el sonido del Jeep de Stiles llamo su atención.

Sintiendo como su cuerpo le pesaba ligeramente, bajo hacia el último piso y con rapidez corrió hacia la puerta y la abrió de golpe, para luego observar cómo Stiles comenzaba a sacar un par de bolsas del Jeep.

— Hey Sourwolf -se detuvo y giró para observarle- — Lamento la tardanza, había mucha gente en la tienda y una viejita me quizo robar el último paquete de helado que te encanta -dejó escapar una risita, siguiendo con su tarea, para luego cerrar la puerta del Jeep y caminar hacia el mayor con sus compras- — Estas bien? Estás muy callado -le observo extrañado, deteniéndose frente a él.
— Si...lo siento...estoy muy cansado -murmuró, para luego apartarse para dejar entrar a Stiles.

Tardo un poco en comprenderlo, pero era más que obvio lo que estaba pasando. Había sido solo un sueño. Seguramente se había quedado dormido cuando salió del baño y se recostó de nuevo para esperar a Stiles.

Pero que sueño tan raro. Sin saber porqué con exactitud, una pequeña risa escapó de su garganta, Un hombre lobo embarazado? HA. No había ninguna posibilidad de que eso pasase. Porque bueno, principalmente porque era un hombre.

— Hoy comerás como rey -soltó Stiles con emoción, dejando todo sobre la barra- — He traído lo que pediste, helado y algunas cuantas chucherias que se qué amarás -contó, comenzando a sacar las cosas de las bolsas.

Inmediatamente el estómago de Derek soltó un gran rugido, que incluso hasta Stiles logro escuchar, quien no dudo en reír un poco.

Tiempo después, justo como en su sueño Derek devoro todo lo que había sobre su plato, con la gran diferencia de que esta vez había alcanzado a comerse la comida de su novio y un poco más también y esta no había terminado en el lavabo de su cocina.

— Gracias por todo...lamento haberme terminado la mayoría de la comida...-le observo ligeramente apenado.
— Está bien Derek -le sonrió con cariño- — Eres un hombre lobo, entiendo que necesites la energía, además, Nunca te ha tocado ver a Scott comer después de un duro entrenamiento? Puede devorar hasta ocho combos de hamburguesas con papas -recordó, riendo un poco.

El sonido y la imagen de Stiles riendo era demasiado para el lobo, quien no pudo evitar tomarle entre sus brazos y sentarle en su regazo para besarle con lentitud y suavidad, sintiendo cada milímetro de su boca bajo la suya.

— Woah, Derek, Por qué no hacemos eso más seguido? -preguntó una vez que se separaron, observándole con una enorme y boba sonrisa.
— Te amo Stiles -soltó, sintiendo alguna clase de dejavú.
— Te amo Lobito -contestó, con el corazón increíblemente acelerado y la mirada brillante.

Y entonces de la nada un par de lágrimas abandonaron los ojos del lobo, extrañando ligeramente al humano.

— Hey -con preocupación llevo ambas manos al rostro de este y limpio sus lágrimas cuidadosamente- — Qué pasa? Estás bien? -murmuró con suavidad, observándole directamente a los ojos.

No sabía porqué pero por alguna razón se sentía increíblemente sensible y no podía evitar sentir una horrible presión en su pecho, ni mucho menos detener aquellas lágrimas que escapaban de sus ojos.

— Sourwolf...-murmuró Stiles abrazándole.
— Lo siento, lo siento -se disculpo apresuradamente, abrazándole con algo de fuerza.
— No te disculpes, esta bien, cuéntame que sucede...me preocupas...con todo lo qué pasa últimamente no me siento tranquilo -respondió, dejando escapar una pequeña mueca de tristeza.
— No lo se Stiles -confesó- — Me siento tan extraño...no entiendo lo que me está pasando -agregó, sintiendo un pequeño nudo en su garganta.
— Es todo, iremos con Deaton -demandó, intentando ponerse de pie pero el mayor le detuvo- — No me digas que tu lobo no quiere, te dije que lo obligaría -amenazo.
— No es que no quiera...esta...esta asustado...-susurró.

Y entonces Stiles casi sufre un ataque de ansiedad, para que el lobo de Derek este asustado aquello debía ser algo muy grave.

— Muy bien, Derek, iremos con Deaton, sino moriré de un ataque de pánico y no quieres quedarte viudo antes de tiempo -esta vez se pudo poner de pie.

Y sin más el humano obligó al lobo a ir con el veterinario.

Al llegar al lugar, este estaba ligeramente ocupado haciendo una cirugía a un perro, así que tuvieron que esperar media hora en la sala de espera. Media hora en la cual Derek sentía que estaba apunto de vomitar en cualquier momento.

— Muy bien Derek -suspiró Deaton algo agotado- — Stiles me ha dicho que te has sentido diferente este último mes y bueno, no he olvidado la llamada de Lydia...donde claramente le dije que te necesitaba aquí -le regañó.
— No era cuestión mía...mi lobo...estaba molesto...no quería venir -respondió con seriedad, sentándose sobre la mesa de metal de este.
— Eso es lo que no me gusta, si tú lobo estaba mal no puede significar nada bueno -suspiró, para luego observar a Stiles.
— No puede ser, Lo escuchaste Derek? -soltó entre molesto y preocupado.
— Te daré algunas revisiones, quizá pueda encontrar algo, sino tendré que usar un último recurso que no será muy bueno para ti, ni tu lobo -explicó, comenzando a buscar un par de cosas.

Después de casi 15 minutos intentando encontrar algo, Deaton termino igual que en el principio,
Sin ninguna respuesta clara a los que le pasaba a Derek.

— Bien, mi último recurso es inyectar una hierba a tu sistema y según el resultado podremos tener una idea de lo que sucede, pero debo advertirte que es algo que dejará daños por un par de días, tu cuerpo se atacará así mismo durante una hora, pero si todo sale bien en tres días estarás como nuevo -explicó.
— Está bien -respondió.
— Bien -asintió, comenzando a preparar la mezcla.

Un par de minutos después la inyección estaba lista y sin más Deaton tomó el brazo de este y justo cuando este estaba apunto de clavarla un fuerte sonido afuera de la habitación les interrumpió.

El llanto de un bebé hambriento que espera junto a su madre para atender a su gatito.

Bebé.

Justo en el último momento algo hizo clic en su cabeza. Y si era ligeramente posible?.

— Espera -inmediatamente se apartó como si este estuviese hecho de fuego.
— Derek? -murmuró Stiles, observándole con preocupación y confusión.
— Deaton...un hombre lobo...Un hombre lobo puede quedar en cinta? -susurró, sintiéndose ligeramente incómodo e idiota.

Y honestamente jamás había visto la mirada que Deaton le dio, ni mucho menos la de Stiles.

— De...de que hablas? -preguntó un ligeramente tembloroso Stiles.

Realmente no estaba seguro de que había escuchado bien.

— Es...es posible -confesó- — Todo es posible en el mundo sobrenatural -agregó ligeramente perdido- — Dios...Crees qué puedas...? -preguntó y este asintió no muy seguro- — Derek...de ser así...esto pudo haber matado al niño -susurró, lanzando la inyección a la basura.
— N..no entiendo nada -interrumpió Stiles completamente nervioso, agarrándose de la superficie más cercana.
— Stiles, Derek podría estar esperando un cachorro -soltó con seriedad, para luego apartarse y dirigirse hacia una pequeña habitación.

Whoops.