.Unexpected.

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A este punto Derek no podía negar que estaba ligeramente preocupado por su salud, lo había dejado pasar y se había dado la excusa de "solo uno efecto del wolfsbane" demasiado. En los últimos días había comenzado a experimentar ligeros cambios de humor, mayormente por su parte lobuna, sensaciones extrañas al despertar, un incremento de su olfato, una leve disminución de su energía y lo peor de todo, hace un par de días había descubierto que ya no podía tomar su forma animal.

Aquello no podía significar nada bueno.

Sintiendo un extraño pesar en su estómago, limpio su boca de nuevo y se observo en el espejo por un par de segundos, para luego finalmente regresar a la habitación y recostarse sobre su enorme cama.

Menos de media hora después finalmente escuchó el Jeep de Stiles aparcarse afuera de su loft y sin esperar demasiado se puso de pie y se dirigió hacia este para ayudarle con las compras.

Una vez adentro y con todas las cosas sobre la barra, Derek tomó la decisión de sorprender a Stiles, tomándole de la cintura para luego abrazarle con algo de fuerza.

— No tarde tanto así -bromeó con una enorme sonrisa en su rostro.
— Te amo -susurró.
— Tam..también te a..amo Derek -respondió en un tartamudeo.

Stiles no pudo evitar sentir un ligero temblor en todo su cuerpo, era la primera vez que escuchaba aquello salir de la boca de Derek -al menos en estado de sobriedad- y honestamente se sentía en el cielo.

— Puedo ayudar con algo? -preguntó separándose del menor.
— La verdad no Lobito, además tú debes descansar, ya hiciste suficiente por hoy- le sonrió dulcemente, tomándolo del brazo para sentarle en una silla de la barra- — Yo me encargare de todo esto, quizá puede que necesite ayuda abriendo un frasco o algo, pero solo eso, todo está controlado -palmeo su hombro ligeramente.

Sin más tiempo que perder, Stiles puso manos a la obra y comenzó a preparar lo que el lobo había pedido. Y a pesar de que aquel era un platillo increíblemente sencillo, habida sufrido algunas cuantas dificultades inesperadas en el proceso, pues a mitad de este el lobo se había levantado y había decidido pararse justo detrás de este y mantenerse pegado casi todo el tiempo.

— Muy bien Derek, es hora de sentarse, no puedes pasar todo el día pegado a mi como si fueses un chicle -soltó ligeramente burlón, colocando la comida en un plato- — Estás actuando ligeramente extrañó Sourwolf -admitió, dejando el plato sobre la barra.
— Solo estoy realmente hambriento, mi estómago me está matando -respondió, tomando asiento de nuevo, esta vez con un vaso de té en su mano.
— Lo entiendo, por eso le he puesto triple carne a tu hamburguesa y te he dado medio paquete de papas -le sonrió dándose la vuelta- — No tienes que esperarme pero mi hamburguesa estará lista en un par de minutos por si lo deseas -agregó, comenzando a preparar otra hamburguesa.

Al no escuchar ninguna respuesta por parte de Derek este se extraño ligeramente, por lo cual se giró para verle y lo siguiente que vio casi hace que se le caiga el plato y desapareció su sonrisa, intercambiándola por una cara de sorpresa.

— Es una broma verdad? Cómo es posible? -casi susurró, sin poder creer lo que veía.

Frente a él estaba nada más y nada menos que Derek, un vaso y un plato completamente vacíos.

— Te comerás eso...? -susurró con las mejillas enrojecidas, señalado el plato de este.
— Dios...Derek...ha pasado como un minuto desde que empezaste a comer...-le observo mucho más sorprendido- — Te gustaría competir en el concurso de comedores en la feria? Escuche qué hay buenos premios -bromeó, sonriendo ligeramente, para luego poner su plato sobre el de Derek- — Toda tuya campeón, yo podré preparar otra para mi...aunque me tomara un par de minutos y quizá muera de hambre en el proceso -fingió un pequeño puchero.

Y de nuevo Derek hizo algo extraño que cambió por completo la expresión del rostro del menor.

— Derek? Qué sucede? Estás bien? -le observo preocupado.

El rostro del mayor se encontraba ligeramente arrugado y parecía que no la estaba pasando muy bien.

— Si -soltó en un susurró, muy de golpe.

Y en segundos Derek se encontraba devolviendo el contenido de su estómago sobre el lavabo de la cocina, con Stiles justo detrás de él, acariciando su espalda con suavidad.

— Maldición Derek, lo sabía, no debía dejar pasar esto tanto tiempo -soltó Stiles entre dientes, ligeramente molesto.
— Estoy bien -murmuró una vez que había terminado, para luego abrir el grifo y limpiar el desastre- — Comí demasiado rápido, ni siquiera un hombre lobo se salva de ello -sonrió débilmente, sin apartar la vista del lavabo.
— Ya no se si creerte Derek, realmente todo esto no suena bien para nada -suspiró- — Es...es demasiado, desde aquel día tienes extraños cambios de humor, te cansas rápidamente y al grado de marearte, ahora incluso comes como si fueses flash y a los minutos todo termina en el lavabo, de no ser hombre estaría describiendo un embarazo -admitió con preocupación.

Después de un par de segundos en completo silencio, Derek se dio la vuelta y le observo con una seriedad tan extrema que el corazón de Stiles pareció detenerse por un segundo.

— Derek era solo una broma...ya sabes que siempre hablo de más -murmuró.

Ahora Stiles estaba mucho preocupado, pues Derek seguía en completo silencio, dedicándose solamente a observarle. Había herido su ego o algo así?.

— Derek yo...-intentó disculparse de nuevo, pero este negó ligeramente perdido.
— No...-susurró- — Stiles...lo que...lo que dijiste es..posible -admitió- — Recuerdas...recuerdas lo que hicimos? -agregó.
— Te...tenemos que ir con Deaton -susurró tan bajo que de no ser lobo,
Derek no le hubiese escuchado.
— Está bien -se rindió, inconscientemente bajando la mirada.

Su parte lobuna estaba de acuerdo.

Cuales eran las posibilidades?.

Lamento que sea ligeramente corto. Los amo! Realmente espero que les guste!.

Cómo se lo tomarán?.

Uh...Dad, I Got My Boyfriend PregnantDonde viven las historias. Descúbrelo ahora