12 días [Lee Jooheon]

Día 10 - Segunda parte

In Na POV

JooHeon y yo caminábamos entre los hermosos y coloridos árboles de cerezo a la orilla del arroyo Yangjaecheon. La brisa vespertina de primavera golpeaba con suavidad nuestros rostros y la sonrisa de JooHeon llenaba de calidez mi corazón. Caminamos un poco más hasta encontrar un lugar en donde sentarnos, mi adorado pelinegro sacó algunas cosas de su mochila mientras yo lo observaba curiosa. Tendió sobre el suelo un mantel colorido, sacó unas pequeñas cajitas y algunos dulces, fruta y jugos. Él preparó un picnic para nosotros. ¡Es lo más tierno que alguien ha hecho por mí! 

—Debiste haberme dicho para traer algo también— agregué aún conmovida por su idea. 

—Quería que fuese una sorpresa— dijo con ternura— ¿Te gusta?

—¡Me encanta!— no podía dejar de sonreír por lo feliz que estaba— Es lo más bonito que alguien ha preparado para mí. 

El lindo chico de los hoyuelos se puso de pie y me acarició la mejilla con suavidad, mi corazón se detuvo por un momento cuando nuestras miradas se cruzaron. 

—¿Sabías que estás más bonita cuando te emocionas? Tus ojos brillan como estrellas Ha In Na, si me sigues mirándome de esa forma no podré seguir conteniendo mis sentimientos— dijo casi en un susurro que paralizó mi cuerpo por un momento. ¿A qué se refiere? 

—¿Qué es lo que quieres decir?— pregunté intrigada. 

—Deberíamos comer ya. ¿No crees?— evadió mi pregunta y volvió a sentarse sobre el mantel para después invitarme a hacerlo.  En fin, ya le cuestionaría más tarde al respecto.

Entre los bocadillos que había traído para nosotros había principalmente kimbap y dumplings. Todo se veía delicioso así que me senté para disfrutar de ellos. 

—¡Todo está muy rico!— exclamé al probar un poco de la comida— ¿Tú lo preparaste? 

—¿Enserio te gustó? Recibí la ayuda de un amigo, estaba preocupado de que resultara un desastre— río avergonzado. 

—Hablo enserio, todo sabe muy bien— comí un poco más. JooHeon se acercó más a mí poniéndome nerviosa y con los palillos me ofreció un poco de kimbap, su rostro estaba ligeramente sonrojado. Avergonzada, abrí la boca y acepté el bocadillo lo que provocó que sonriera con dulzura. 

—Eres tan adorable, no comprendo cómo es que no nos conocimos antes— puso los palillos sobre el mantel y dirigió su mirada al arroyo.

—Diferentes carreras y generaciones, quizá— agregué.

—Es verdad señorita escritora— volvió su vista a mí— ¿Siempre supiste que querías escribir?

—Desde que aprendí a leer, de pequeña me gustaba mucho escribir breves poemas y cartas a mi madre. Ella siempre me ha alentado a hacerlo desde entonces y ahora mi sueño es poder tocar los corazones de las personas a través de mis textos. Poder transmitirles emociones, hacer que rían, que lloren de emoción o felicidad— respondí con sinceridad, él era una de las pocas personas a las que había hablado de mis sueños. 

—Vas a lograrlo, conmigo ha funcionado y seguramente con muchas personas que te leen a través del periódico escolar ocurrió lo mismo— sus hoyuelos volvieron a adornar su linda sonrisa. 

¿Estaba diciendo que había tocado su corazón? Él no tenía ni idea de lo feliz que me sentía al respecto, en ese momento lo único que deseaba era hacérselo saber así que me acerqué a él y besé su mejilla con suavidad. JooHeon me miró con sorpresa y no hice más que mostrarle una sonrisa inocente. Me miró unos segundos y después se dejó caer suavemente sobre mi regazo. No supe cómo reaccionar en ese instante, este chico siempre lograba sorprenderme a cada momento. 

Cerró los ojos y aproveché para mirar su rostro detenidamente, entonces deslice suavemente mis dedos sobre su mejilla y una bella sonrisa iluminó su semblante. 

—¿Qué hay de ti? ¿Por qué decidiste estudiar arquitectura?— acaricié su cabello con suavidad, parecían gustarle mis caricias. 

—Para poder construirle la casa más hermosa a alguien importante— abrió los ojos y suspiró— cuando mi madre era joven ella se enamoró de mi padre y él le dijo eso, ella vivió completamente por ese sueño hasta que mi padre nos abandonó cuando yo tenía cinco años, desde entonces mi pobre madre dió lo mejor de sí para que pudiera criarme— una sonrisa triste apareció en sus labios. Me siento culpable por hacerlo recordar esas tristes memorias de su pasado— al ver el esfuerzo que hizo por los dos yo decidí que si mi padre no fue capaz de hacerla feliz y cumplir su promesa yo lo haría, es por eso que estoy en ese camino. Pero no me malinterpretes, amo mi carrera y te diré que mis amigos y yo estamos trabajando en un proyecto a futuro— dijo con orgullo. 

—Tu sueño es hermoso, vas a hacer que tu madre se sienta muy orgullosa de ti— mis ojos están húmedos pero no puedo evitar sentirme conmovida con su historia. 

—In Na, no era mi intención...

—Tranquilo, soy demasiado sensible a veces— tomo aire y miro al cielo— eres un buen chico— siento sus brazos rodear mi cintura y su cuerpo ceñirme en un cálido abrazo. 

—Eres la segunda persona a la que le cuento esta historia, es muy fácil hablar contigo— susurra sin soltarme aún— gracias por escucharme— su ternura me conmovió. 

—Siempre que quieras hablar aquí estaré— susurré abrazándolo también, su abrazo era sincero, nada incómodo o con segundas intenciones. JooHeon me estaba demostrando su lado dulce y sensible pero lo mejor de todo era que su presencia me daba mucha paz y tranquilidad. 

Nuestra cita primera cita fue perfecta, seguimos comiendo los deliciosos bocadillos que trajo para nosotros y platicando sobre mil cosas más. Pudimos conocernos mejor y acercarnos más al otro. El rompecabezas de nuestra historia es mucho más hermoso de lo que imaginé. 

¡Hola! Por fin les traigo la segunda parte de la cita con Honey. ¡Quiero poder caminar a su lado bajo los cerezos! 🥺
¿Cómo están?Espero que de maravilla, yo soy feliz de compartir otro capítulo más con ustedes, gracias por el amor que le han dado a esta historia 🥰🤗