Durante sus meses fuera, Hinata e Ino habían conseguido un gran avance en el hospital que ya se encontraba en operación; faltaban si quiera unos detalles en dos zonas del mismo, pero sin duda alguna su tiempo en África había valido la pena y Hinata había podido concluir con su parte antes de regresar a Tokio.
-Lo lograste, loca hija del demonio, lo lograste -Hinata rio, amaba los inusuales saludos de su mejor amiga- cumpliste con tu parte del proyecto y en cinco días estarás en Tokio esperando a que Akane nazca.
-Me va a doler que no estés para cuando ella nazca. ¿Quién me comprará mis rollitos de canela de camino al hospital? -ambas amigas rieron ante el recuerdo de Hinata del día en que los mellizos nacieron-
-Naruto estará ahí contigo... además todavía te faltan cuatro semanas. Sabes que yo termino mi parte aquí en, máximo, tres semanas: ¡claro que llego a tiempo para ese día!
-¿Y si se adelanta? Recuerda que los mellizos se adelantaron 2 semanas
-¡Por eso tienes que regresarte ya!
-Cinco días más -respondió emocionada la Hyuga
Al momento de pararse de su escritorio, Hinata sintió un leve dolor provocando una mueca en su rostro que inmediatamente Ino lo notó ¿una contracción?
-¿Estás bien? -preguntó rápidamente la rubia
-S-sí solo fue -ambas amigas se miraron directamente a los ojos- No, no, no, no -Hinata negó rápidamente, ella no podía empezar su labor de parto ahora, todavía le faltaban 4 semanas y un vuelo a Tokio
-Vamos a esperar, ¿de acuerdo? -sugirió Ino
Después de una hora en la que Hinata no sentía nada más que leves contracciones, supo que fue hora de hablarle a Naruto.
.
-¡HINATA VA A TENER AL BEBÉ! -gritó Naruto al abrir la puerta de su departamento
Hace casi un año, Shikamaru Nara había recibido un mensaje por parte de Naruto Uzumaki que decía "Emergencia, tienes que venir a mi departamento ya mismo" y la emergencia era que dos niños habían aparecido en la puerta del futbolista. Ahora recibía el mismo mensaje y otro niño más aparecía en la vida de su rubio amigo
-¿De qué estás hablando? -claro que todo era confuso para Shikamaru, había sido obligado a salir de su departamento en pijamas después de haber logrado que Shikadai durmiera
-"Hinata empezó a tener leves contracciones, puede que sean para entrar en labor de parto y no va a poder volar, ¿a qué hora te consigo vuelo para que tú y los mellizos vengan?" -nunca en la vida Naruto había puesto tanto empeño en aprenderse algo hasta ahora- Ino llamó para decirme eso; viejo tienes que ayudarme estoy en shock ¿qué hago?
-Oh viejo, se adelantó el bebé
Shikamaru sabía que no era una situación que tomarse a la ligera, comprendía lo importante que era para Naruto el estar presente en el nacimiento de su hija por lo que puso manos a la obra para ayudar a su amigo a conseguir vuelos para aventurarse en África.
-Maldición
-¿Qué pasó? -Naruto paniqueó y sentía que todo se iba a la borda
En su mente jamás cruzó por la cabeza que el bebé pudiera llegar antes provocando que él y los mellizos cruzaran medio continente para presenciar el nacimiento de su nueva hija en África. Y con su nula experiencia acerca del proceso por el que pasa una mujer para dar a luz, era claro que cualquier cosa lo pusieran en ese estado.
-Necesitamos un permiso firmado por Hinata para que los niños vuelen contigo
-¡Pero son mis hijos!
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Los mellizos de papá
Fanfiction-¿Quiénes son ustedes? -Soy Boruto y ella es mi melliza, Himawari -¡PAPÁ! -gritó la pequeña aferrándose a la pierna de su padre ¿Papá? ¡Imposible! Nunca había dejado a alguien embarazada, tenía que ser un error, esos niños no son mios. Pero, ¿tienen...
