🍒Gᴏᴅ Is A Wᴏᴍᴀɴ 🍒 | 𝟓𝒔𝒐𝒔

🍒God knows I tried🍒

Me sentía física y mentalmente agotada.

Debí darme cuenta de que sería un día del asco desde que intenté comer cereal con leche y la leche estaba caduca.

Mi vida se estaba saliendo de control, estaba perdiendo la confianza en mi misma, porque no podía creer como es que el universo conspiraba tanto en mi contra.

Fui directo hasta mi habitación encerrándome en ella y me tiré en la cama.

¿A caso esta era una señal?.

Estaba tratando de ser buena, de arreglar mi vida, me alejé de las drogas y estaba siendo aplicada en la universidad.

Hasta me enamoré.

Pero todo lo que hacía parecía no ser suficiente, era como si el universo me empujara a ser una perra sin corazón. ¿A caso era eso? ¿Tenía que ser una mala persona para recibir cosas buenas?.

Tenía que dejar de confiar en todo el mundo, eso era seguro y comenzar a tomar las riendas porque sentía que me estaba descarrilando. En serio creí que mi vida se había arreglando cuando conocí a Chuck, tener un novio doctor era algo de que presumir y hasta pensé en restregarselo en la cara a mi familia.

Y todo sería mucho mejor cuando me graduara en psicología, dejaría el porno y me dedicaría a otras cosas.

Casi por un instante creí que sería posible, ¿pero a quien quería engañara?, una chica como yo jamás iba a dejar de ser juzgada, para la sociedad, yo era un desperdicio.

Para los hombres siempre seria una puta y para las mujeres una vulgar, integrarme a la sociedad sería imposible, aunque lo intenté.

Dios sabe que lo intenté.

Dejé de lloriquear secándome las lágrimas que nunca debí haber derramado. Saqué la bolsita de coca que había comprado hace un par de horas y acomodé varias lineas en mi mesita de noche.

No lo había comprado con ese propósito pero resultó ser la mejor idea que pude haber tenido esa noche. Saqué un billete de mi bolsillo y lo enrrollé hasta convertirlo en una pajilla.

Inhalé la primera línea y me sentí tan bien que hasta sonreí. Esperé sólo unos segundo y volví a inhalar la segunda línea sintiéndome cada vez mejor.

Ya no me importaba nada, estaba convencida de que si esto era lo que el universo quería de mi pues, eso le daría.

Me cansé de intentarlo.

.....

—Colson—me paré detrás de él llamando su atención, estaba concentrado haciendo abdominales y al verme se levantó rápido—Ten—le arrojé una bebida energética la cual atajó ágilmente, me guiñó el ojo mientras la destapaba y bebía un sorbo.—Vengo a agradecerte por lo que hiciste por mi anoche.

—Estamos para ayudarnos, ¿no?—asentí sonriéndole—¿Ya hablaste con el chico?.

—Recibí un texto de él en la madrugada y me llamó en la mañana.—asentí mordiéndome el labio—Se fue—me crucé de brazos.

—Es lo mejor, esa gente es muy peligrosa.

—En fin, quiero agradecerte. Así que esta noche te presentaré a las personas que te prometí.

—¿Esta noche?.—dijo entusiasmado.

—Sip—sonreí alzando las cejas—Iremos a un club super popular de aquí así que, vístete lindo y nos vemos a las nueve.

—Copiado—hizo un saludo militar y me eché a reír. 

.....

Estaba sentada en la cafetería de la universidad, sola, revolviendo la ensalada mientras miraba hacia el vacío.

—¿Estás viva?—dijo Michael pasando su mano varias veces frente a mi rostro y se sentó junto a mi.

—Hola, Michael—lo saludé desganada y metí ensalada en mi boca.

—Tengo entradas para la comic-con—las dejó sobre la mesa y sonreí mirándolas—Sabía que eso te haría sonreír...¿Qué tienes?.—me le quedé viendo a las entradas y luego lo miré a él.

—Ayer fue unos de los peores días de mi vida.

—¿Qué te pasó?.

—Me subí al taxi de la muerte.—frunció el ceño—Pedí un taxi usando una aplicación y el chofer era un violador, intentó secuestrarme pero fui astuta y cuando comencé a darme cuenta de que algo estaba mal le escribí a Luke y le mandé mi ubicación...un amigo de él que es policía me rescató—sus ojos se abrieron por completo—Y el chico con el que estaba saliendo, se tuvo que ir de la ciudad porque los bloods lo están persiguiendo para matarlo y pues...no volveré a verlo de nuevo.

—Espera...con lo del violador, ¿te hizo daño? ¿estás bien?.—preguntó preocupado.

—Define bien.—volví a mirarlo.

No dijo nada, sólo me abrazó estrechándome con fuerza en sus brazos y me sentí tan reconfortada que mis ojos se cerraron automáticamente, lo abracé del mismo modo hundiendo mi cara en su cuello y nos quedamos así por un buen rato.

Un abrazo sincero era lo único que necesitaba.