Aries
Ver objetos volando podría ser algo normal en nosotros, claro, cuando la persona que lo hace no regresa de la muerte, y peor aún, no quiso hacerlo intencionalmente.
Aries- ¿Seguro que no quisiste hacerlo? -pregunté al responsable-.
Capricornio- Literalmente ayer regresé de la muerte, ¿Y tú crees que de lo primero que quiero hacer es levitar toda una sala?
Leo- A veces las personas tienen diversiones extrañas -concluyó viendo que su hija se montó en uno de los sofás voladores- ¡Baja de aquí enana!
Cáncer- ¿Pero puedes hacer que se detenga? -cuestionó-.
Capricornio- Me ofendes -dijo simple y con una elevación y bajada de mano todas las cosas cayeron, menos la bebé- el problema es que no sé cómo lo hice estando dormido.
Leo- ¿Puedes dejar a mi primogénita conmigo? -dijo indignado, el chico solo llevó la niña que levitaba desde un punto hasta los brazos de Leo-.
Pensé seriamente qué podría haber pasado, quizá solo era la novedad de regresar al mundo vivo, pero algo me decía que había algo más.
Aries- Mmh, probablemente no estás acostumbrado a usarlos aún, solo relájate, no creo que sea algo grave -recomiendo- ahora, hay que salir a comprar algo de comida.
Antes de que me respondieran algo, una voz desde las escaleras nos interrumpió.
Piscis- Tienen que venir -dijo alarmada-.
No cuestionamos absolutamente nada y subimos a prisa. Todo indicaba a la habitación de Cáncer, seguro algo le pasó a su novio.
Pero cuando entramos, no era eso lo que nos esperaba.
Ahí se encontraba Sagitario, dormido, sin ningún problema, Orión en el suelo a un lado de la cama.
Pero eso no era lo raro, lo raro era, que de Sagitario desprendían una especie de rayos, de descargas eléctricas, no chocaban con ningún lado, no había metal cerca, solo estaban en él, desprendiéndose.
Piscis- Escuchaba ruidos desde mi cuarto, quise venir a ver pero, no sé qué le pase -confesó-.
Aries- Es mejor despertarlo, Leo si quieres puedes irte, no hay que poner en riesgo a tu hija -ordené-.
No se opuso, inmediatamente salió de la habitación con su hija la cual estaba curiosa por ver qué pasaba, pero no sólo eso, se le veía con necesidad de saber qué le ocurre a Sagitario específicamente.
Aries- Sag, despierta -susurré acercándome al chico lentamente-.
Moví un par de veces su hombro, sin recibir respuesta.
Aries- Sag -volví a decir, pero el chico no respondía- ¡Sagitario!
Sagitario- ¡Dos de carne! -gritó levantándose de golpe-.
Mis reflejos me hicieron bajar la cabeza, porque había soltado un rayo hacia la pared que le dejó una marca de quemado.
Cáncer- Vaya, eso sí fue extraño -opinó, poniendo de pie a Orión- ¿Qué es lo que les pasa? ¿Y por qué Orión sigue dormido?
Piscis- Cuando entré estaba empezando a entrar en pánico, tuve que dormirlo de nuevo, y a Ofiuco igual.
Asimilé algunas cosas, tenía que juntar lo sucedido con probables opciones o finales, y así debí llegar a una conclusión.
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La Batalla Continúa (C.D.Z #2)
FantasiaTodo acabó. Todo terminó. La guerra de hace años finalizó, vidas lamentadas de por medio. Pero qué pasaría, si esas vidas pudieran regresar... Peor aún, qué pasaría si la batalla no ha acabado. (Para entender esta historia es necesario leer la prime...