Todavía recuerdo, aquellas clases interminables, lo único que deseaba eran los recreos para poder ser testigo de tus bromas y palabras. Aquella situaciones en las que en base a pretextos lográbamos tener un contacto leve hasta presuntuoso que sin más hacían reír a la gente, por dentro para mí era la felicidad necesaria para seguir adelante.
Nunca supuse que esto resultaría en sentimientos. Aquellos que sin parar crecían cada vez más, pero que constantemente lograban dañar incluso más mi corazón. Me hundía como nunca, pensar que aquellos sentimientos pudieran dañar nuestra amistad. Aquella que nació un día llena de risas y miradas.
Un día víctimas de la adrenalina, fuimos capaces de dar un paso más allá. ¿Qué hago?. Ya no hay vuelta atrás. Esa acción promiscua surtió fruto de mis deseos más íntimos. Aquellos que con tanto afán ocultaba con palabras y pequeñas acciones. Salieron a flote como si nunca hubiera sido feliz en mi vida. Esa sonrisa pudo haber sido única en sus tiempos y borrarla de mi mente hubiera engañado mi corazón. Pero la felicidad instantánea tiene su fin. Y no tomó mucho tiempo llevarnos a la realidad. No eran necesaria las palabras pero no quedaba otra opción que dejar una claridad nefasta para procurar limitar nuestras intenciones. "No creo poder hacerlo, pertenecemos a distintos caminos".
Mi vista se nublaba con cada palabra que salían de esos labios que tanto amaba, aún así, no había otra opción más que aceptar que fue lo único por lo cual pude dejar de lado mis sentimientos y seguir adelante. Ese miedo que inundaba mi cuerpo era el juez de aquellos sentimiento que no eran más que pecados frente a esas miradas prejuiciosas que juraban prometer las acciones ajenas como producto del pecado y la culpa. Pero qué mas da. Lo que no es mutuo no se puede forzar y menos luchar por ello. Eso pensé.
En el vivo presente superpongo mi felicidad a través de lo que se llama "normalidad", gastando mi corazón en todo aquel que propone un final feliz a esta historia. Infraganti. Ya que nunca podré volver a ser el mismo. Infraganti . Una identidad oculta que no podrá ver la luz ya que lo tacharé de marcas oscuras que nunca perseverarán en la esperanza de un cambio.
Lo siento yo, no es tiempo de hacer valer mi vida por completo.
- Septiembre, 2019 -
Este relato va dedicado hacia un amigo muy querido, también para aquellas personas que por bastantes años dudaron sobre ellos mismos debido al juicio social.
La identidad es nuestra y por ello, nunca debería ser un tema para el otro, espero con grandezas que esto no se siga dando para nadie, y que las minorías sexuales siempre sean respetadas como cualquier persona.
Con Cariño, para S.

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WORLDMIND
Storie breviSi alguna vez tu mente se ilumina, no desperdicies el momento, es tu hora de brillar. Genera conocimiento, palabras llenas de emoción dignas de ser compartidas. No temas. La imaginación es una vía llena de oportunidades que al ser aprovechada pued...