O6

3.4K 136 121
                                    

Emma tomó el pene de Ray y lo metió de golpe en su interior haciendo sacar un gemido a los dos.

Emma empezó a saltar rápidamente sobre el pene de Ray, sacando gemidos ya que lo hacía muy fuerte.
En eso Emma tomó las manos de Ray y las puso en sus pechos, Ray apretaba los pechos de Emma y jugaba con sus pezones.

Emma dejó el pene de Ray y lo sacó. Ray se confundió.

Pero gimió cuando Emma lo volvió a meter pero más fuerte, se escuchó como sus pieles chocaban haciendo ruidos excitantes.

Bajo sus manos al culo de Emma y ella se sobresalto al sentir un dedo en el otro agujero.

D-duele... R-ray~...– No le hizo caso y siguió moviéndolo mientras ella volvía saltar más rápido. Sacó su dedo haciendo gemir a Emma su nombre. Sólo observó a su querida anaranjada saltar sobre su pene, con su lengua afuera, con líquidos saliendo de su vagina, acariciando sus propios pechos y gemir el nombre de Ray.

–¡M-me... V-voy a v-venir~!–

H-hazlo~.– Eso hizo se corrió sobre el pene de Ray. Pero todavía no acaba Ray, la tiro al suelo y el subiéndose encima.

Metió su pene de nuevo tomando las piernas de Emma. Metió muy adentro su pene haciendo gemir a Emma más.

Lo sacó y lo metió más fuerte. Y así empezaron las embestidas sobre Emma. Más embestidas salió de Emma y se corrió en la boca de la chica, ella se lo tragó.

Limpio todo, los jugos de Emma mientras metía dedos en ella.

–Y-ya habíamos terminado... ¿Por qué si-sigues?– Beso los pechos de ella y sacó los dedos.

Terminamos. Volvamos.– Le sonrió, y salieron no sin antes pagar la ropa interior que compró.

Cuando Emma volvió a su casa con Norman supo que no estaba. Soltó un suspiro triste.

Pensó en por qué hacía eso con Ray y no con Norman. En pensar en Ray volvió a sentir un cosquilleo en su entrepierna.
Buscó entre los cajones sus juguetes sexuales, hasta que encontró el que buscaba.

Lo colocó en su lugar y lo metió dentro de ella.

Ah~.... No es tan bueno como el de Ray.– Volvió a meterlo y sacarlo muchas veces.
Así siguió hasta que se cansó y calló al suelo, enseñando el trasero, y empezando a masturbarse pensando en Ray.

R-ray~...– y así hasta que se corrió.

Pensó que le hacía infiel a Norman, pero no es su culpa de ella, él no quiere tener sexo con ella.

Mañana es domingo. Tomó su celular y le llamó a Ray.

–¿Hola?–

–¿Mañana tienes el día libre?– espero la pregunta.

Si.–

Salgamos mañana al karaoke.– Del otro lado se escuchó un Ray pensativo.

–¿Por qué ese lugar?– Se escuchó con una voz ronca. –¿Quieres que te folle de nuevo~?– Emma no supo que decir, se quedó muda.

Broma, si, hay que ir.–

Emma chilló feliz.

Adiós.– se despidieron y colgó.

CONTINUARÁ...

-Akiko.

SEAMOS ERÓTICOS ❴RAYEMMA +18❵Donde viven las historias. Descúbrelo ahora