SEAMOS ERÓTICOS ❴RAYEMMA +18❵

O7

Hoy era domingo, de vería con Ray en el karaoke.

Tomó una ducha, se arregló y salió.

Ahí estaba Ray fuer de su casa, en el camino hablaron de sus cosas hasta que llegaron. Los atendieron y les dieron un cuarto.

–¿Qué quieres cantar?.– pregunto Emma.

–Servamp-Codicia.– Emma puso la canción y cuando empezó la melodía empezó a cantar. A Emma la tenía fascinada, cantaba muy bien su mejor amigo amante.

–Ahora tú.– Le dio el micrófono. Busco entre las canciones y puso la que le encantaba.

–Gravitic Love.– Ray se reía de ella porque hasta seguía los pasos de baile de los chicos 2D.

–Me encantan esas canciones. Sigue cantando Ray.–

–Bien... Chiisana Hibi.– Empezó a cantar el opening que tanto le encanta a Emma.

Ahora le tocó a Emma y puso Blurry sorrow.

–Estoy cansada de tanto cantar.– Dijo una Emma medio muerta. Ray se subió en ella.

–R-ray... ¿Q-qué haces?..– Ray le sacó algo que Emma llevaba en el cabello y se alejó de ella.

Ray le sonrió y ella seguía nerviosa, mientras juntaba  sus piernas.

A Ray le llegaban pensamientos pervertidos haciendo que su amiguito despertará. Emma no lo notó.

Ray sacó su pene de su pantalón y empezó a mover su mano de arriba abajo. Emma Volteo a ver que estaba callado y de repente soltó un suspiro.

Ray se estaba masturbándose. Emma gateo hacía él y atrapó su pene en su boca.

–Valla~ la niña quiere probar~.– Tomó los cabellos de ella mientras se movía hacia adelante para meter su pene más adentro.

–Sigue así perrita~– Era la primera vez que Ray la llamaba así, siguió masturbando con su boca su pene mientras enredaba su lengua sobre su glande.

Se corrió dentro de boca chiquita.

–Tragalo.– hizo lo que le dijo Ray.

La tomó, se sentaron el sillón. Mientras metía un dedo dentro de ella y lo movía. También tocaron la puerta.

La chica pasó y Ray rápidamente tomó una sábana y los tapó.

–Buenas ¿Gustan algo?– La chica no paraba de ver a Ray y eso molestó a Emma.

Ray al darse cuenta metió un segundo dedo, haciendo casi gemir a Emma.

–¿Le pasa algo a ella? Esta roja.– Obvio la desconocida no se preocupó por ella, pero seguía viendo a Ray.

–Amor~ comprame unos dulces.– Emma hizo un puchero roja, porque Ray metió el tercer dedo haciendo embestidas.

–Lo que dijo mi vida. Unos dulces y te puedes largar.– Aquella mujer salió enojada.

–Me gustó tus celos. Pero me hubiera gustado que gimieras frente a ella.– Ray río burloso.

–¿Soy tuya?– Emma sonrió. Ray tomó las piernas de su amante y se metió en ella. Moviéndose lentamente.

–M-más rápido~ ¡baka!– Ray negó con la cabeza. Tomó su trasero y ahí empezaron las embestidas rápidas.

–M-me estas partiendo la vagina ¡R-ray!.– Se corrió Emma. Aún así Ray siguió con sus embestidas, tanta lujuria y empujo tan fuerte haciendo que Emma se corriera y él dentro de ella.

Emma golpeo su pecho.

–¡Me dejarás embarazada!.– Lo regaño.
Ray chasqueo la lengua.

–Sé que te encanto.– Se arreglaron y volvieron a sus casa, eran las 6 de la tarde y Norman estaba en casa.

–Hola mi vida.– Habló Emma besando la mejilla de Norman.

–Hola.– Fue lo que dijo y entristeció a Emma.

Se fue a su recámara donde dormían.

Estuvo charlando con las chicas sobre aquel día, les fue muy bien a las 3, claro, Emma no contaría que tiene sexo con Ray.

Ya era muy noche y se acostaron y durmieron como siempre.

Mañana había trabajo.

CONTINUARÁ...

-Akiko.