•CASTIGO•

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Una semana, una maldita semana había pasado desde que Hogwarts se convirtió en el mismísimo infierno, Umbridge le daba honor a su nombre, me daba dolores de tan solo verla.

Lo único bueno es que Draco y yo habíamos estado más unidos que nunca y lo sentía; él sentía lo mismo que yo.

Bueno, al entrar a mi sala común el primer día todo estaba tan tenso, todos miraban el periódico donde yo era el entretenimiento principal; Harry me había dicho que igual a él le habían hecho lo mismo, el cabeza hueca de Fudge era un idiota, además el segundo día en Hogwarts, Harry me contó sobre una pesadilla/ visión/ sueño que tuvo, pero su explicación no me quedaba clara. 

Hoy era la primera clase de defensa contra las artes oscuras con Umbridge, no sé cómo podré soportarla por tanto tiempo, su voz chillona me va a romper mis tímpanos.

Todos en el salón estaban entusiasmados pues la clase nunca la habían tenido o al menos no era constante por lo cual el rendimiento de esta materia estaba por los suelos.

Umbridge entró por la puerta resonando en el piso sus odiosos tacones y se hizo presente su rosa chillante.

Dio inicio a la clase con la explicación de los TIMO'S, que eran uno de los exámenes que tienen mayor influencia sobre nuestro futuro.

Repartió unos libros que a mi parecer, eran como para unos niños y era pura teoría, lo que escuché de Hermione en el banquete era cierto, el ministerio estaba interviniendo.

-Aquí no hay nada sobre cómo usar hechizos de defensa.- Agradecí mentalmente a Hermione por decir aquello.

-¿Hechizos de defensa?- Rio.- No sé por qué necesitarías hechizos de defensa en mi clase.

-¿No usaremos magia?- Preguntó Ron.

-Van a aprender sobre hechizos de defensa de una manera segura y sin riesgos.- Lo que me faltaba, ir a una escuela donde te enseñan a emplear la magia y que venga esta loca a dar clase sin magia.

-¿Y de qué nos serviría? Si nos atacan sería un gran riesgo.- Dije ahora yo.

-Deben levantar la mano para hablar en mi clase.- Rodé los ojos al escucharla. -En la opinión del ministerio, el conocimiento teórico será suficiente para que pasen sus exámenes, que después de todo, es para lo que sirve el colegio.- Demonios, ya no puedo con su voz.

-Y ¿cómo nos preparará para lo que existe en el exterior?- Esta vez Harry fue el que habló.

-No hay nada en el exterior, querido, ¿quién te imaginas que atacaría a niños como tú?- Esta vez la voz chillona de Umbridge sonaba de superioridad.

-Am... no lo sé, tal vez, Lord Voldemort.- Todos quedaron boquiabiertos cuando dije esto, nadie esperaba que lo mencionara.

-Les explicaré claramente, les han dicho que cierto mago tenebroso está al acecho nuevamente, eso es una mentira.- Dijo Umbridge mientras pasaba por donde estaba sentado Harry, no puedo creer lo ignorantes que son los del ministerio.

-No es mentira, lo he visto, luché contra él, ¿Verdad, ___?- Dijo Harry mirándome y yo asentí dándole mi apoyo.

-Casi muere Cedric Diggory, hay tres testigos que le pueden asegurar que todo es verdad, Harry, Cedric y yo.- Sentía la impotencia de Umbridge y eso me brindaba gran satisfacción.

-Está castigado señor Potter y usted también Salvatore.- Dijo rápidamente, ejerciendo su poder.

Toda la clase estuvo tensa lo que restaba, Harry y yo estábamos castigados así que fuimos a la oficina de Umbridge.

Secretos del pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora