Diario Nº 02342

Capítulo 8: La lavadora

Le besé en la boca y bajé al cuello, le quité la camiseta, me quité la camiseta, lo levanté para que se sentara en la mesa que había detrás, bajé mi mano hasta su entrepierna y noté como se le ponía dura, le quité los pantalones y les vi sus bóxers azules que le quedaban apretados también se los quité y empecé a masturbarle mientras iba besando su cuerpo bajando mi boca hasta que metí su miembro en mi boca.

[...]

Pasaron varios minutos y entró Carla, nosotros ya habíamos acabado, fue la mejor experiencia en mi vida, por lo menos hasta entonces.

- Espero no interrumpir nada- dijo Carla al entrar.

- Qué va ¿ Has conseguido limpiar tu ropa? Nosotros también necesitamos lavarla- le dije.

- Pues por eso venia, tenemos una misión, buscar una lavadora y traerla.

- Qué divertido- dijo Félix.

- Nos acompañara Oliver y nos guiará, además la señorita filóloga a pedido que le traigamos libros infantiles si vemos.

- Pues vamos allá- Dije mientras cogía mi arco, que aunque aún no tuviera flechas reales de algo serviría.

Fuimos al hall y allí estaba Oliver esperándonos con un palo de alguna fregona vieja, salimos cogimos la camioneta y nos dirigimos a las casas que había cerca.

Carla rompió la puerta de la primera casa que vimos.

- ¿Hay alguien en casa?- Dijo Carla con el arma por delante- Parece que no hay nadie.

- Mejor si no sería incómodo explicar el porqué has roto la puerta y no has tocado antes- Dije mirando la casa.

- Pues le diría que se mudan- dejó de hablar porque oyó un ruido en la planta de arriba- ¡¿Hay alguien en casa?!

Se oyeron más ruidos y una puerta abriéndose, algunos gruñidos preparé una flecha en el arco, cuando el zombie se cayó por las escaleras y se quedo allí muerto.

- Un suicidio involuntario- Dijo Félix.

- Veamos si tiene una buena lavadora- dijo Carla entrando en la cocina que daba al patio.

- Esta nuevecita- dijo Carla al ver la lavadora, cogió un post-it- "Cariño he metido la ropa solo tienes que encenderla, no te quería despertar, ya sabes que me pareces muy mono durmiendo"- leyó el postit.

- Qué conmovedor, saca la ropa y nos la llevamos- Dije- nosotros vamos a mirar qué hay en la cocina.

Oliver ayudó a Carla y nosotros buscábamos comida cuando entró alguien por la puerta.

- Alto- le dije apuntándolo con el arco.

- Oye, oye baja eso, estoy buscando amigos no la muerte- Dijo cagado de miedo.

- Vale, dime como te llamas- le dije bajando el arco.

- Carlos, pero llamarme Charly- dijo extendiéndome la mano- ¿Vosotros?

- Yo soy David y el es Félix- le dije agarrándole la mano.

- ¿Sois amigos, hermanos, novios...?- Dijo Charly.

- ¿Qué más te da?- Dijo bruscamente Félix.

- Bueno solo era para saber en qué onda estáis.

- No estamos en ninguna onda especial, somos como tú- No sabía si Félix estaba celoso por que Charly era guapo y más alto que él o es que había sentido odio a primera vista.

- Eso me gusta, el que seáis como yo digo, siempre me han dicho que era algo friki.

- ¿Y porque le dicen eso a alguien como tú? Tengo entendido que los guapos son populares- Le dije amablemente pero Félix parecía mirarle con mucho odio.

- Por favor, no me digas esas cosas o me sonrojo- Eso fue lo que pasó- Siempre me han dicho friki por que me gustan las pelis y pasarme las tardes jugando a videojuegos, aunque seas guapo te llamaran friki si lo eres.

- ¡Con quién habláis!- Gritó Carla desde el patio.

- ¡Con un desconocido y no sabemos que intenciones tiene!- Gritó Félix.

- ¿Qué te pasa tío?- le pregunté

- A mí nada ¿y a tí?

- No creí que fueras celoso- Le dije mientras nos alejábamos de Charly que estaba hablando con Oliver.

- ¿Qué dices? Voy a estar yo celoso de ese cuerpo perfecto y tez morena, y una mierda se tiraba la tarde jugando videojuegos.

- Lo que te hecho en el instituto no se lo hago a cualquiera, ¿entiendes? Aunque viniera un Playboy a por mí, no te cambiaría por él – Dije mirándole a los ojos.

- Te aprovechas de que no puede venir ningún famoso guapo, para decirme esas cosas- Dijo Félix con esa sonrisa suya que tanto escaseaba y era preciosa.

- ...Pues lo siento mucho- Eso fue lo último que oí de la conversación de Oliver con Charly.

- ¡Ahhhhhhhhhhhh!- Gritó Carla desde el patio- ¡¡Auxilio!!