Capítulo 14: Cazados.

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Estuvimos discutiendo con la voz, al cabo de unos minutos nos abrieron. La voz era de una mujer de mediana edad, era la alcaldesa de un pueblo cercano y ahora la jefa de aquella urbanización amurallada.

Le explicamos nuestra situación rápidamente.

- ¿Entonces, nos ayudáis a defendernos y os quedáis aquí?- Dijo el hijo de la alcaldesa- Mamá, no lo veo, ya sabes que pasó con papá.

- Ellos no son los mismos, tu hermano lo ha dicho. Se quedarán sin armas de momento- Dijo ella muy confiada.

- ¿Sin armas, no podéis hacer eso, cuando nos ataquen, qué haremos?- Dijo Carla.

- Tenemos buenas defensas, no nos atacaran sin que nos enteremos- Dijo el otro hijo.

Nos dieron una casa para nosotros, después de un rato me senté en la escaleras, había cogido una libretilla y un boli entonces empecé a escribir, se acercó Félix con una mirada que reflejaba miedo.

- ¿Qué haces?- Me dijo.

- Escribir un diario.

- ¿Lo puedo leer?

- Cuando lo termine.

- ¿Crees que habrá un mañana para leerlo?

- Siempre me han arrebatado todo lo que he querido, mi padre murió por culpa de un ladrón, luego me quedé solo con mi madre, pero esa sabandija me la arrebató, a veces me sentía huérfano. Hace unos días perdimos nuestra casa, amigos...- Estaba conteniendo mis lágrimas- Solo me quedáis vosotros, quiero pensar, que no os perderé también, por que si no, me perdería, y no podría seguir viviendo- Acabé llorando, Félix me abrazé y me besó.

Carla nos vio, se acercó, y nos abrazó.

- Hasta los mejores guerreros temen a la muerte- Dijo Carla.

Esa noche mataron a los guardias, entraron y empezaron a matarlos a todos, entraron en la casa que estábamos, estábamos en la misma habitación todos excepto, Martín. Nos habíamos enterado por los gritos, y porque más tarde nos lo contaron.

- ¿Y Martín?- Dijo Úrsula.

- Ha bajado, está con ellos- Dijo Carla

Se oyó un disparo y un grito, Úrsula abrió la puerta, Carla intentó pararla pero salió corriendo y se marchó llorando escaleras abajo. En la habitación solo quedábamos, Carla, Félix, Charly y yo, oímos otro disparo, Félix me agarró la mano.

- ¿Y si mañana no seguimos vivos?- Me dijo con lagrimas en los ojos- No quiero morir.

- This is our last goodbye and very soon it will be over, but today just love me like there's no tomorrow- Empece a cantar- Love me like there's no tomorrow, hold me in your arms, tell me you mean it, this is our last goodbye and very soon it will be over.

- Si no hay un mañana, que este sea el mejor día de nuestras vida- Le dije

- Que bonito- Dijo Charly, viéndonos abrazados, Carla le puso el brazo por encima del hombro.

- Caballeros, fue un placer sobrevivir con ustedes.

Pronto entraron dos de los hombres de Jacobo, nos cogieron y nos sacaron de allí, no intentamos nada, estábamos cansados, no sabíamos lo que se avecinaba.

Nos sacaron a la calle, nos pusieron de rodillas, lo hicieron de manera violenta. Jacobo se puso en frente, se veían algunas casas arder, gritos y llantos que poco a poco se dejaban de oír.

- David, ven, levántate y anda- Me levantó uno de los hombres, nos habían puesto una cuerda a modo de esposas- ¿Sabes cuál es el origen y significado de tu nombre?

- Sí

- Cuenta, cuenta.

- Es de origen hebreo, aparece en la biblia y significa "el elegido por Dios"

- Pues como elegido, puedes elegir a quien no mataremos esta noche de tus amigos.

- ¿Cómo?

- Elige uno y morirá, no elijas y morirán todos.

Charly, Félix y Carla estaban gritando y llorando, no recuerdo que dijeron, estaba oyendo los ecos de aquella frase "elige uno y no morirá" dentro de mi cabeza. Aquellas tres personas se habían convertido en mi familia, ¿cómo podría elegir uno?

- 10, 9, 8- empezó a contar.

- Ya habeís matado a Úrsula y el resto, ¿no os basta?- Le dije.

- 7, 6, 5- Siguió contando.

¡Estaba loco!¿Quería que eligiera rápidamente quien debía morir? Nadie debía morir aquella noche, nadie más.

- ¡4, 3, 2!- Elevó el tono.

-Charly- Dije susurrando y temblando.

- Cristián- Dijo Jacobo mirando al soldado, este apuntó y mató a Charly.

Félix, Carla empezaron a llorar y a gritar, yo no pude. No podía expresar lo que sentía, solo me quede mirando a Charly, con la mirada perdida.

- Vayámonos- Dijo Jacobo

Nos cogieron y empezamos a andar hacia la autovía donde seguían los coches, antes de llegar una luz apareció en el cielo, Carla aprovechó, había cortado su cuerda, cogió un arma mató a tres de los hombres, casi ni me enteré, Diego le apuntaba. 

- Perra asquerosa- Dijo Jacobo- ¡Mátala!

- ¡No!- Grité- El trato era que solo uno moriría, no la puedes matar.

- La quieres mucho, los quieres mucho a los dos, tengo algo perfecto para ti- Dijo mientras se acercaba a mi.

¿A que se referiría?¿Tendría que volver a elegir? Era obvio, aunque me doliese, elegiría que viviera Félix.

Nos llevaron a un almacén de productos químicos o algo así, a Carla y Félix los llevaron a una habitación y a mi a otra, me quedé con Diego, me estaba mirando, yo estaba sentado en una silla apoyando los brazos en una mesa, entró Diego.

- Las reglas son sencillas, hay varias pruebas, cuantas mejor las hagas más probabilidades hay de que tus amigos vivan, así sabremos hasta donde estas dispuesto para salvarlos a los dos.

¿Pruebas, que tipos de pruebas? Tenía la boca tapada, no se lo pude preguntar, a día de hoy no las recuerdo todas pero, sí las peores. No es que falle mi memoria, pasó hace unos días, pero no tengo tiempo de recordarlas todas, tengo que terminar esto y vengarme.

Diario Nº 02342Donde viven las historias. Descúbrelo ahora