Capítulo 14

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JungKook y Sunhee caminaban tomados de la mano por un enorme centro comercial, pero en la ciudad vecina, porque no querían correr el riesgo de que John y Simone los vieran, ya que ellos también andaban de compras. Aunque no les hubiera importado que los vieran, de no ser por el hecho de que se estaban dando besos o haciéndose cariñitos a cada rato.

—Pequeña, tenemos horas y horas aqui. ¿No crees que ya es suficiente? Mira todo lo que hemos comprado.
—¡Espera! —Dijo ella, mirando en dirección hacia un "Victoria's Secret".
—Amor, yo sé que te verías como una diosa con todo lo que está ahí, pero mejor espero a verte en casa con todos esos conjuntos puestos. Así que, yo me quedó aquí.
—Mi amor, no me dejes sola. —Lo miró con cara de desilusión. —Vamos, acompáñame. ¿No me digas que te da pena?
—No, claro que no, pero...
—Pero nada. Por favor, ven. —Lo arrastró prácticamente hacia la tienda.

A ella no le hubiera molestado ir sola, en lo absoluto, pero tenía una descarada fantasía en mente, y ese se le hacía el lugar perfecto para llevarla a cabo.

Después de escoger unas cuantas cosas más, Sunhee se acercó a Jungkook, que estaba sentado en un pequeño sillón, con unas cuantas pijamas muy sexys de encaje y otras un poco más cómodas en mano.

—Bien, ¿ya terminaste?
—Creo que sí. Pero aún falta probármelas.
JungKook suspiró.
—Amor mío, mi bella y hermosa princesa, sabes cuál es tu talla ¿no? Y aunque no lo fueran, todo se te vería fantástico.
—Jungkook por Dios. ¿Y si enserio no me quedan? —Le sonrió, suplicando con la mirada. —No me tardo.

Caminó hacia los probadores, con paso lento.
((Por el amor de Dios. No salgas a mostrarme nada, temo no poder controlarme.))

JungKook miró a su alrededor. No había mucha gente, pero sí la suficiente como para verlos.

Él esperaba ansioso que ella terminara de una vez por todas. Pero antes de que eso sucediera, notó que una mujer alta de ojos azules y cabello negro lo miraba muy sonriente. Era muy bella, y al parecer estaba interesada en él.

((Pero qué descaradas son las mujeres. Es obvio que no estaría aqui sentado si no viniera acompañando a alguien. Y me imagino que eso ya lo sabrá ella.))

JungKook le devolvió una pequeña sonrisa de cortesía, pero luego cambió la mirada. Pero la joven no pareció darse por vencida, y se acercó a él.

—Hola.

JungKook volteó hacia ella, mirándola algo extrañado e incómodo.

—Hola. —Dudó en contestarle.
—Me llamo Aline. —Le sonrió coquetamente.
—Ah.

Su belleza era innegable, pero Jungkook sólo tenía ojos para su pequeña Sunhee. Después de luchar tanto tiempo por su amor, no iba a arriesgarla por nada ni por nadie, en especial por una ofrecida que lo más seguro era que supiera que él iba acompañado. Y antes de que le pudiera contestar otra cosa, la voz de Sunhee lo sacó de sus pensamientos.

—Jungkook, ¿qué te parece? —Preguntó, modelando una pijama bastante provocativa y sexy de color negro, que contrastaba perfectamente con sus tacones rojos, que aún llevaba puestos.

Jungkook la miró e inmediatamente se le iluminó el rostro, reconfirmando que no existía otra mujer para él en el mundo. Sunhee era todo lo que necesitaba, hermosa, joven, con los pies bastante puestos en la tierra, graciosa, divertida, independiente y sobre todo, sexy. Era un mujer capaz de encender sus más candentes deseos y fantasías con tan sólo mirarla por un segundo.

Jungkook se levantó del sillón y caminó con paso firme hacia ella.

La joven de tez morena que estaba a su lado hasta hace unos instantes, se puso seria ante su competencia, cruzó los brazos y levantó la ceja, un poco en tono desafiante, sin embargo era evidente que esa batalla ya estaba perdida, así que, con algo de coraje y pena, salió de la tienda.

Sabor a ti - Jungkook [+18] ADAPTADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora