Produce Love Songs (X1 / Izone / Cravity and more)

10. Abrazos

Los gritos de sus padres eran altos y por más que tuviera la puerta cerrada no podía ignorarlos.

Wonyoung tomó sus airpods y su teléfono y se dirigió a su closet. El interior estaba sólo hasta la mitad ocupado por su ropa, la otra mitad era una gran cobija colgada a modo de carpa con algunos cojines en el piso. Se acomodó en ellos, colocándose los audífonos y puso play a la primera canción que encontró, subió el volumen al máximo y se abrazó a una gran almohada.

La melodía llenó sus oídos, intentó pensar en cualquier cosa que le llevara lejos de ese momento. Comenzó a repasar las coreografías que se sabía en su mente, pensó en los vestuarios, en las luces del escenario, en los aplausos. Eso la hacía sentir admirada.

Pensó en las secuencias de golpes que había aprendido esa semana, en la patada doble que había logrado ejecutar a la perfección y que le había valido la aprobación de sus mayores Yohan y Hangyul. Eso la hacía sentir fuerte

Pensó en sus amigas, sus sonrisas, sus bromas, su alegría. Eso la hacía sentir querida

La puerta de su closet se abrió y vio a Hyeongjun, que se agachó y gateó hasta ella, si decir nada se acomodó en un cojín junto a ella y la rodeó con sus brazos. Wonyoung tomó uno de sus audífonos y se lo entregó a su hermano, él se lo puso y ambos escucharon las canciones.

En otro lado de la casa, los gritos seguían, las palabras crueles...

Wonyoung se acurrucó en el pecho de Hyeongjun y rodeó la cintura de su hermano con sus brazos. Hyeongjun apoyó su cabeza sobre la de Wonyoung haciendo el abrazo más cálido y apretado. Wonyoung sonrió a pesar del dolor que sentía en su pecho. Hyeongjun estaba ahí, Hyeongjun no la dejaría sola, Hyeongjun siempre la protegería. Eso la hacía sentir amada.

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Yujin miró con ansiedad el refrigerador, tomó una soda y un paquete de galletas y volvió a su habitación. Se arrojó ruidosamente sobre su cama y tomó el libro que había estado leyendo. Era uno bueno

"En una mano el montaraz blandió su espada mientras en la otra sostenía una antorcha encendida, se abalanzó sobre los espectros intentando proteger a los medianos..."

Mordió sus galletas mientras se imaginaba a sí misma blandiendo una espada, llevando una larga capa azul mientras dirigía a su fiel ejército. En la torre el hermoso príncipe de cabello rubio platinado esperaba con ansias su llegada.

Yujin se abrió paso entre las hordas del malvado hechicero, a lomos de su fiel corcel cabalgó entre sus enemigos, nada le impediría llegar a su amado príncipe

- "Príncipe Kang he venido a rescataros de esta cruel prisión" – Yujin anunció con gallardía. Los ojos del joven se posaron en ella y sonrió sintiéndose al fin a salvo...

Yujin sonrió, el sueño empezaba a apoderarse de ella, abrazó su cojín favorito (un peluche de unicornio) y cerró sus ojos.

En la habitación de al lado Seongmin se miraba al espejo intentando no sentirse devastado, sus facciones eran lindas, tenía una sonrisa bonita, era tierno y querible. Pero al parecer nada de eso bastaba para llamar la atención de su princesa