Capitulo 14

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La mañana del día siguiente era cálida pero acompañada de aire fresco que entraba por la ventana, se removió un poco en su lugar restregando su cara con lo que pensaba era la almohada, aunque sintió está bastante fibrosa abriendo entonces los ojos de par en par encontrándose con un Joaquín dormido que le abrazaba a su lado.

Fue entonces que se sobresaltó un poco, aunque quedándose estático en su lugar cerca del contrario sintiendo el calor de su cuerpo, teniendo recuerdos sobre lo que había pasado estando avergonzado, ¿cómo él había tenido el valor de hacer aquello? No decía que se arrepentía era solo que no pensó en tener el coraje para aceptar y cuando menos lo pensó ya se encontraba haciéndolo con el contrario.

Vio a Joaquín que le abrazaba con fuerza como no queriendo que se fuera de su lado, de alguna forma ese tacto era protector y cariñoso, algo tosco, pero así solía ser el joven a su lado; sonrió acomodándose y relajándose un poco observando el respirar tranquilo del contrario recargando su frente en el pecho de Joaquín queriendo permanecer así un poco más tal vez dormir un rato mas ya que no parecía que fuera a despertarse dentro de poco y no quería molestarle de todas formas.

Cerro sus ojos relajándose un poco y suspirar levemente, aunque no paso mucho para escuchar el leve gruñido del contrario que le apretujo más hacia si para besar su frente bostezando un poco después de eso

-buenos días mani - escucho el susurro del contrario quien le apretaba con su cálido abrazo

-buenos días Joaquín- respondió el joven volviendo a sentir el leve golpe de bochorno causado por la vergüenza tomando en cuenta que aún estaban desnudos

-vaya... - escucho comentar a Joaquín quien le veía sonriendo con el cabello despeinado

- ¿qué sucede? - pregunto tímido manolo quien sostenía la vista del contrario

- ¿cómo es que puedes ser tan hermoso aun acabándote de levantar? - pregunto sonriendo Joaquín riendo un poco al ver la mueca de vergüenza al manolo apartar sus ojos tratando de levantarse de la cama seguramente queriendo escapar de lo apenado que se sentía

-levanta es tarde - comento manolo tratando de levantarse siendo atraído de nuevo por Joaquín quien le abrazo besando sus labios riendo un poco divertido ante el contrario tratando de alejarle

-hueles horrible lava tus dientes para poder besarme - se quejó manolo colocando una mano en el pecho del contrario tratando de alejarlo

- ¿entonces puedo besarte siempre que quiera maní? - pregunto divertido ante el comentario viendo al menor darse cuenta de lo que había dicho

Podía seguir toda la mañana viendo el rostro avergonzado del contrario y los leves intentos que hacía para que dejara de molestarle, podía ver todo el día esas mejillas sonrojarse cuando su mirada se fijaba en el menor y cuando le decía halagos, como este nervioso trataba de tener el control de la situación sin mucho existo.

Pero tenían que levantarse y alistarse si querían llegar a San Ángel para el anochecer

-bien ya que dijiste que huelo horrible porque no vienes y tomas un baño conmigo

-yo...- manolo quedo mudo un momento no sabiendo que responder

-de todas formas, ya has visto todo lo que tengo no creo que sea problema el hacerlo juntos - siguió divertido el mayor viendo la mirada del contrario apartarse rápidamente aun en silencio

A manolo siempre le había molestado un poco el como Joaquín solía burlarse de él de forma amistosa y sin ganas de lastimarle porque sabía que él era sumamente vergonzoso, aunque no lo aceptara del todo, todavía era joven así que suponía que era normal, pero a Joaquín le encantaba ese lado del menor

Amor en San AngelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora