Más de lo que piensas.

Capítulo XII.

(Narra Babi)

Tras la puerta, mi pesadilla hecha realidad.

Era Jesús, con otra chica.

La chica era rubia y delgada, por el pantalón se le salía medio cachete el cual se lo estaba recogiendo Jesús.

-Eres un cerdo Jesús, ¿para esto querías que viniese? ¿No sabías como dejarme? Vete a la mierda Jesús, a la que peor huela.-Dije tranquilamemte pero con unas ganas indescriptibles de gritarlo, aunque no era cosa de ponerme a gritar en un lugar tan tranquilo.

Jesús no pronunció palabra, y la guarra esa... menos mal que no dijo nada por que hubiesen sido sus últimas palabras.

Salí dando un portazo y me esfumé corriendo hacia mi habitación. Cerré la puerta y por el otro lado me apoyé en ella llorando a lágrima viva.

-Joder, ¿por qué mierda me pasa todo a mi? Si hasta había convencido a mi padre para que me comprase dos entradas para ver a Justin Bieber cantar en Roma, sólo por Jesús, y ahora mierda.- Dije entre sollozos.

En ese instante, alguien tocó a la puerta.

-¿Quién es? -Pregunté cabreada.

-Emm... soy... soy David, el socorrista, no te precipites a mamdarme a la mierda, es que te he visto entrar corriendo y casi llorando, y me he preocupado un poco, si no quieres decirme lo que te pasa lo entenderé, era solo por curiosidad...

Yo abrí la puerta. No sé por qué. Simplemente lo hice. Tal vez por que era el único que se había preocupado. O tal vez por joder a Jesús como él me había jodido a mi.

-Pasa.-Dije con lágrimas en las mejillas, pero ya intenté dejar de llorar.

-Eh, Babi no llores, no sé qué te habrá pasado pero seguro que no merece tus lágrimas.-Luego me secó una lágrima con su dedo pulgar.

Yo dejé de llorar, por muy increíble que pareciese, David tenía razón, Jesús no merecía mis lágrimas.

-No sé qué decir, supongo que gracias David, después de lo mal que te he tratado te has preocupado por mí, ese diferente de como pensaba.

-Gracias, supongo. Y ahora vamos a dar un paseo por la cubierta, así te despejas un poco, ¿vale?-Dijo alzando la mano para que fuese con él.

Lo volví a hacer. Me dejé llevar. Aunque a decir verdad en ese momento sólo esperaba que estuviese Jesús por ahí y me viese con David.

Salimos y fuimos a la popa del varco.

Él se disculpó por haber sido un capullo en la piscina, lo sentía de verdad, se le notaba en la mirada.

Nos sentamos en las escaleras que conducen a la parte cubierta del barco.

De repente, mientras David y yo hablábamos, ví a Jesús pasear por ahi. Solo. Y por solo quiero decir sin la guarra esa.

David me estaba contando una anécdota graciosa y yo,para llamar a atención de Jesús, reí un tanto fuerte aprovechando que había acabado su anécdota.

Luego ví que Jesús nos miró y lo único que se me ocurrió fue darle un besito a David.

Sí, me dio un poco de grima hasta a mí. David no me atraía para nada, pero fue lo que me salió. Pensé Si él cree que me va a joder, yo le jodo el doble, y esa fue mi pequeña venganza.

Lo sé, lo hice fatal, pero estaba cabreada, no lo pude evitar.

Después de darle un pequeño beso a David, miré a Jesús que seguía donde antes, pero con una cara de rabia inmensa. Eso me reconfortó un poco, aunque seguro que no sintió ni la mitad de lo que sentí yo al verlo con aquella guarra.

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Hooola bebotas, primero de todo, deciros que gracias por leer, y que si queréis un maratón por todos esos días que me he pasado sin subir capítulo, tenéis que votar, en cuanto llegue a 10 votos subo 4 capítulos seguidos, solo si queréis.

Graaaaacias por todo bellas, besitos de nesquick ♥