Cuando Jungkook despertó, logró sentir un punzante dolor de cabeza que lo hizo quejarse en voz alta llamado la atención de la enfermera que se encargaba de nivelar la cantidad de suero que pasaba a las venas del paciente. La mujer lo observó y después sonrió preguntándole como se encontraba.
—Me duele la cabeza— le dijo y ella asintió inyectando algo en el suero, probablemente sea algo para el dolor por lo que le agradeció su atención.
—Si necesitas algo más, preciona esto— le señaló la enfermera un pequeño botón que se encontraba en la pared, él asintió y vió como esta se marchaba haciéndolo suspirar.
Se sentía un poco agotado y es que, su lobo no había sido gentil con él pues, si había intentado matarlos a ambos pero, de una forma lenta por lo que, el lobo también sintió como moría y le dejó vivir, simplemente porque tenía miedo a morir.
Suspiró al escuchar la puerta ser abierta y dirigió sus ojos a ella encontrandose con Liseth, quien lo miraba con una sonrisa burlona haciéndolo sonreír de igual manera. Esta se adentró y detrás de ella aparecieron los demás haciéndolo ensanchar su sonrisa, era agradable ver qué todos estaban bien apesar de que él pudo haber muerto gracias a la ira de su propio lobo.
—¿Cómo te encuentras?— le preguntó la chica y él la observó sin borrar su sonrisa.
—Excelente— respondió él consiguiendo que sus amigos y su prácticamente pareja suspiraran haciéndolo soltar una risita.
—¿Sabes que te sucedió?— preguntó Yoongi y él suspiró—. El doctor nos aseguró que fue un ataque de pánico pero, no le creí— murmuró Yoongi desordenando los cabellos de Jungkook.
—Fue mi lobo— empezó a hablar el alfa mientras jugaba con sus manos—. Hace no mucho que despertó y se encontra muy sensible a cualquier sentimiento y por ello, cuando yo empecé a sentirme enojado y arrepentido esos mismos sentimientos en él se hicieron más fuertes y quiso matarme— informó Jungkook y los presentes lo miraron aterrado.
»Él intentó matarme pero, cuando se sintió morir se detuvo— finalizó Jungkook sintiéndose un poco incómodo ante lo tensos que se pusieron todos gracias a esa información.
—¿Él puede volver a hacer eso?— preguntó Taehyung y él asintió pero, probablemente no lo mataría, probablemente solo lo haga sufrir un poco.
—No me matará— aseguró y Taehyung suspiró—. Sin embargo, tengo que mantenerme comunicado con él para evitar inconvenientes— dijo con una sonrisa y sus amigos suspiraron.
—Ya he llamado al jefe, te dará tres días de descanso pero, si necesitas más, llámalo— avisó Liseth mientras intentaba mantenerse despierta pero, era bastante obvio para todos allí que ella se encontraba agotada.
—Regresa a casa y descansa— pidió Jungkook intentando peinar los desordenados cabellos de la chica que lo miraba con una sonrisa.
—Si, eso haré— aseguró viendo a los amigos de Jungkook y al que suponía era su pareja—. Fue un gusto haberlos conocido— dijo ella para después dar media vuelta y salir de la habitación.
Jungkook observó a sus amigos y a Taehyung quien lucía incómodo por alguna razón, lo miró confundido y este evitó sus ojos haciendo suspirar a Jungkook quien tomó su mano y lo hizo acostarse con él en la camilla. No era muy pequeña como para que ambos no pudieran dormir allí abrazados.
—Nosotros también debemos marcharnos— avisó Yoongi dirigiéndose hacia la puerta mientras soltaba un bostezo. Jungkook los observó irse y cuando la puerta estuvo cerrada posó sus ojos en Taehyung, quien tenía un encantandor sonrojo en sus mejillas.
Inevitablemente dejó un beso en ambas mejillas para después, abrazar el cuerpo de Taehyung y pegarlo contra el suyo dejando besos en todo el rostro del lindo Omega que lo abrazó. Era adorable, pero también era sexy, la mirada de Taehyung había cambiado, apesar del sonrojo en sus mejillas podía ver como este lo retaba con la mirada.
Sonrió y subió uno de los muslos de Taehyung a su cintura acariciando este mientras sobaba sus labios con los de Taehyung, hasta que este se hartó e inicio un beso en el que ambos se fundieron por unos cuantos minutos, era tan dulce y delicioso. Jungkook podía sentir la lengua de Taehyung moverse contra la suya haciéndolo entrar en calor rápidamente pero, aquel no era un lugar adecuado para lo que quería hacer con Taehyung.
Mordió el labio inferior de Taehyung y se alejó de este apreciando lo colorado que se encontraba el rostro de Taehyung, este sonrió viéndolo a los ojos y Jungkook sintió una corriente eléctrica por toda su columna dorsal.
—No es el momento— aseguró y pudo ver el puchero que se formó en el rostro de Taehyung haciéndolo suspirar, en cualquier momento una enfermera podría entrar y atraparlos en tan comprometedora situación.
Jungkook pudo sentir la mano de Taehyung bajar por su abdomen haciéndolo suspirar pero lo detuvo y pudo ver cómo el ceño del Omega se fruncía.
—Cariño, aquí no— volvió a hablar y Taehyung bufó levantándose y dirigiéndose a la puerta, Jungkook creyó que se iba a marchar pero, este solo aseguró esta y se metió a la camilla nuevamente pero, posandose encima del alfa que empezaba a perder la cordura.
—Hagámoslo— demandó tomando la mano de Jungkook y posandola en su abdomen haciendo suspirar al alfa, probablemente el Omega no estaría satisfecho si no le daba lo que quería por lo que, atrajó el rostro de este hacia el suyo y unió sus labios en un desesperado beso.
Sus manos se pasearon por la espalda de Taehyung hasta llegar a las nalgas de este donde apretó y amasó escuchando los sonidos que el Omega soltaba en medio del beso. Bien, aquello era emocionante por lo que, subió sus manos y bajó el pantalón que Taehyung estaba usando en sus momentos hasta donde pudo y después, subió sus manos nuevamente disfrutando de un tacto más directo con aquellas nalgas.
Sin embargo, aquello no parecía ser suficiente para el Omega y por ello, bajó de igual manera los boxers que este estaba usando y cuando sintió aquellas suaves nalgas contra sus palmas no pudo hacer otra cosa más que apretarlas y amasarlas, escuchando los quejidos que Taehyung soltaba.
Movió sus dedos hacia la entrada del Omega sintiendo como esta se empezaba a lubricar y sonrió con sorna para después, dejar una palmada en una de las nalgas del Omega que gimió ante eso.
Todo aquello, era terriblemente caliente para Jungkook y su erección crecía con cada gemido que soltaba Taehyung y diablos, quería perforarlo con su polla pero, no podía. Aquel no era el lugar y además de eso, no tenían condones a la mano.
Entonces, adentró uno de sus dedos en la caliente entrada del Omega sintiendo como este se derretía encima de él haciéndolo suspirar. El Omega rompió el beso solo para soltar gemidos con más libertad y Jungkook adentró otro, sintiendo como el agujero de Taehyung no tardaba en adaptarse a sus dedos.
Bajó su mano libre hacia la erección de Taehyung y empezó a darle atención a esta también mientras sus dedos en el culo de Taehyung buscaban el punto de este y cuando lo halló, se maravillo ante el increíble gemido que soltó Taehyung contra su oreja haciéndolo suspirar.
Aquello estaba siendo difícil para él.
