Los ojos de Jungkook se encontraban nublados por la cantidad de lágrimas que había soltado pero, no eran de tristeza, eran de felicidad, el ambiente que lo rodeaba era tan mágico que hubo un punto en que deseó y el tiempo se detuviera allí pero, aquello era imposible y debían seguir con sus vidas.
Podía ver a los niños correr soltando risas y chillidos, Jungoo se encontraba en una de las mesas hablando felizmente con Woo el hijo de Jimin y Yoongi. Ambos niños se adoraban y siempre estaban juntos por lo que, había llegado a emparejarlos.
Sin embargo, aquello no era lo más relevante en ese punto, lo que era más importante para él en ese preciso momento es el Omega que suelta risas mientras baila en el centro del salón encontrandose totalmente deslumbrante a sus ojos, podía verlo brillar, aquel traje blanco acompañado de un velo resaltaban su belleza y su maquillaje...
Solo podía decir que la belleza de Taehyung no tenía límites y lo sorprendía.
De pronto sintió como lo abrazaban por los hombros y notó que era Hoseok por lo que dejó caer su rostro en el hombro de este ocultando su deplorable estado, su rostro probablemente se encontraba rojo y lleno de lagrimas y mocos.
—Sabes, yo creí que lloraría Taehyung, no tú— confesó y Jungkook soltó una pequeña risa ante eso, porque el más sentimental entre Taehyung y él, es él.
—Limpiate el rostro, algunos te ven con ternura y para otros luces patético— le dijo Yoongi y Jungkook mostró un puchero mientras limpiaba su rostro observando todo el salón.
En las esquinas habían mesas distribuidas con hermosas decoraciones, en la tarima había una larga y ancha mesa llena de regalos junto con muchos arreglos florales regados por todo el salón.
Aquella boda había sido hermosa, solo habían invitado a sus amigos de confianza y ya, por lo que mucha gente no había y para ellos era perfecto de esa manera.
—¿Qué hacen Googie y Woozie?— preguntó Hoseok señalando a los niños y Jungkook dirigió sus ojos a ellos abriendo sus ojos sorprendido y es que, Jungoo había tomado a Woo por las mejillas y se encontraba dejando gran cantidad de besos en los labios de este.
—Mierda— gruñó Yoongi dirigiendose a los niños y Jungkook no pudo evitar soltar una risa acompañándolo.
Cuando estuvieron frente a los niños JungKook sonrió enternecido al ver cómo los rostros de estos se ponían rojos, Yoongi miraba con enojo a Woo por lo que, su mano se dirigió al hombro de este.
—Calmate, son niños— le dijo y Yoongi enarcó una ceja no queriendo darle validez a su "argumento"—. Tú solo dile que cosas no debe hacer y darle besitos a su novio no está mal— dijo mientras se contenía para no soltar una carcajada.
—¿Son novios?— preguntó Yoongi a su hijo y este asintió teniendo la cabeza agachada. Jungkook soltó una risita y tomó al hijo de Yoongi en sus brazos dándole un beso a este en la frente.
—No te preocupes, está bien— le dijo y el niño sonrió abrazándolo, Yoongi suspiró y se sentó en una de las sillas que se encontraban alrededor de esa mesa—. Solo no hagan eso en público— le recomendó y el niño sonrió con inocencia asintiendo.
—Papi...— llamó Jungoo mientras estiraba sus brazos y Jungkook sonrió tomando a su hijo en su otro brazo, teniendo el rostro de este frente a él dejó un beso en la nariz de este disfrutando de la linda sonrisa que su bebé le regaló.
—Los consientes demasiado— le dijo Hoseok y él se encogió de hombros—. Aunque, no soy yo quien debería decirte eso— agregó y los niños soltaron una risa ya que, Hoseok era quien más los consentía, dándoles todo lo que pedían.
De un momento a otro, pudo sentir unos brazos abrazarlo por la cintura y después sintió aquel aroma que tanto amaba.
Era Taehyung, pudo sentir los labios de este en su cuello haciéndolo sonreír, lo observó y este también lo hizo. Inevitablemente unió sus labios con los de este en un pequeño beso para después mirarlo confundido ya que, el rostro de este se puso rojo después del beso.
Siguió los ojos de este y notó como sus amigos los miraban con burla haciéndolo reír y sentirse un poco avergonzado de igual manera.
—Nuestros padres... — susurró y Jungkook dirigió sus ojos hacia donde estos se encontraban para después dejar a los niños en el piso, estos rápidamente se alejaron corriendo hacia donde se encontraban los hijos de Seokjin y Namjoon jugando con Kookie, quien ahora era todo un adulto.
—Ahora regreso con ustedes...— avisó y escuchó como Yoongi le pedía que no regresara jamás por lo que soltó una gran carcajada.
Abrazó a Taehyung por la cintura y no pudo evitar dejar otro beso en los labios de este disfrutando de la sonrisa tímida que este le regaló y es que, ese tipo de muestras de afecto no solían darlas en público pero, aquella era una ocasión especial y podía hacerlo.
Al estar allí Jungkook vió la alegría que desbordaban sus padres haciéndolo reír, se sentó al lado de estos teniendo a su otro lado a Taehyung abrazándolo por el brazo.
—Todo esto ha sido maravilloso— dijo la señora Jeon y Jungkook tomó la mano de su madre entrelazando sus dedos con los de ella, disfrutando de la cercanía.
—Aunque, me habría gustado que fuera más grande— murmuró la señora Kim haciendo reír a todos en la mesa—. Sin embargo, todo fue hermoso pero, verte llorar fue... Incómodo— dijo la señora Kim burlandose de Jungkook quien escondió su rostro en sus palmas.
—Para mí fue adorable, no creí que Kook fue tan sensible— dijo la señora Jeon desordenando los cabellos de su único hijo.
Las dos familias unidas empezaron a hablar planeando eventos o simplemente, planeando salidas para un futuro mientras que la pareja, simplemente los oía con hermosas sonrisas en sus rostros.
Después, apareció un fotógrafo amigo de Taehyung y solicitó a todos reunirse en un solo punto para así tomar una fotografía y después, se dedicó a tomar fotografías familiares y en pareja.
Jungkook observaba con una hermosa sonrisa como el fotógrafo capturaba las sonrisas de Taehyung y Jungoo en una foto que se encargaría de enmarcar en gran tamaño porque no había personas o cosas que más amara como a Taehyung a su hijo, a ambos los amaba enormemente.
Se dirigió hacia donde se encontraban sus dos adoraciones y los abrazó sonriendo ante las hermosas sonrisas que estos le dedicaron y prontamente, habría otra sonrisa que adoraría.
—Te amo, mi omega— susurró Jungkook contra el oído del Omega que suspiró y en cuanto el alfa se alejó los ojos de este reflejaban adoración.
Nota: hola hola je.
Esta historia ha concluido sin embargo, tengo planeado subir un extra o dos ya que estoy realmente encariñada con esta historia.
Gracias a los que leen, los tkm. Duren 💜.
Stream ON, stream Stay Gold o mañana sus casas todas plomiadas.
