Capítulo 9

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Luna había corrido hacia su habitación, todo lo que estaba pasando por su cabeza era demasiado. No podía asimilar todas esas imágenes que aprecian repentinamente. Se apretaba las sienes para intentar controlarlas, pero no servía de nada. De pronto, una imagen se detuvo, un recuerdo específico.

⬅️Estaba en el colegio, parecía ser día de San Valentín, todo estaba adornado con motivos relacionados. Hubo un momento en el que Sylene tocó la puerta e interrumpió la clase que estaba viendo.

—Permiso  -Le hablaba al profesor- Lamento interrumpir, pero en la dirección están solicitando a Luna. -Le entregó un pase de salida. El profesor lo leyó y dio la autorización.- ¡Vamos! -Le dijo emocionada a Luna. Al salir del salón, la rubia preguntó confundida-

—¿Por qué me llaman en la dirección?

—Nadie te busca en la dirección, el pase es falso. Era solo para que te dejaran salir. Te están esperando afuera,  atrás. -Le guiñó del ojo y se alejó. Luna se apresuró para ir al patio trasero, ese que a esa hora de la mañana estaría totalmente solo. Al estar ahí, se halló sola, pero al instante escuchó un “Swip” que le hizo voltear, encontrando frente a ella a Peter con dos rosas blancas en su mano-

—¡Feliz día de San Valentín! ¡Feliz segundo aniversario! -Luna sonrió emocionada mientras tomaba aquellas flores-

—¿Cruzaste la ciudad solo para entregarme dos flores? ¿Estás loco?

—¿Qué tiene de malo? Es mi tradición, te lo dije -Le tomó la mano y empezó a escribirle algo en el dorso- Y así será cada año. -Luna observó su mano intrigada-

—¿Luter? ¿Qué significa? -Peter le miró con reproche- ¿Qué?

—Luna y Peter, Luter. -Luna empezó a reírse-

—A veces te pasas de cursi.

—Y a ti, a veces te hace falta ser más romántica. -Le tomó delicadamente del rostro y le besó- Tengo que irme, tengo un examen en -Vio su reloj- Media hora.

—¿Sí llegas a tiempo?

—Claro que sí. -Respondió él con mucha confianza- Nos vemos más tarde. -Luna asintió- Te amo.

—Y yo a ti. -Respondió con una gran sonrisa.-

➡️Luna sentía una pena enorme, un gran dolor, no paraba de llorar. Pero dentro de todo ese caos mental una luz se le alumbró. Corrió hacia la mesa de noche en donde tenía el celular. Fue hacia aquella carpeta protegida e introdujo aquella palabra, Luter. Esa era la contraseña. Entonces esa inmensa cantidad de fotos y vídeos aparecieron. No eran solo fotos de Peter y Ella, eran fotos de los que parecían ser sus amigos. Entonces todo terminó de encajar, lo recordó todo. Pero esto no hizo más que aumentar el dolor, la pena y la rabia.

Abajo, Alexander y Jor se habían quedado en blanco, al parecer no entendieron lo que había pasado. Ethan bajó preocupado.

—¿Qué pasó? Vi a Luna entrar corriendo a su habitación. -La ver las caras de los dos, se preocupó- ¿Qué pasó?

—No lo sé, al parecer recordó algo. -Expresaba Alexander-

—Bueno, yo me voy. -Dijo con su cara bien lavada Jor-

—¿Cómo que te vas a ir? ¿Vas a dejar todo así?

—¿Y qué quieres que haga? ¿Qué le regrese el novio muerto a la niña? -Cero tacto tenía Jor con sus palabras. Al oír esto, Ethan volvió a sentir una pequeña presión en el pecho. Empezó a respirar profundo, pero estos dos que estaban ahí, no ayudaban mucho.-

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