Mí Juguete Favorito...

Capitulo 19. Esclavo

Corrió sin detenerse, las lágrimas que abandonaban su rostros eran visibles, mientras huía de todo y de todos se preguntaba mentalmente si lo ocurrido solo fue una mala jugada del destino, tan mala que justo en aquel momento se sintió en lo más alto del paraíso.

Sube cada peldaño de la escalera que la llevaría donde se ubicaba su habitación, al llegar a medio pasillo se detuvo y sin más abrió la puerta y se fue directo a su cama.

Lanzo sus tacos por todos lados y de manera desesperada se quitó el vestido quedando solo en ropa interior, develando un hermoso cuerpo bien dotado.

Bra - ¿Porque me haces esto...Goku? - se preguntó, mientras con sus dedos acaricia sus labios pudiendo aún percibir aquel mágico rose.

Sin más se tumba en la cama dejando que aquel momento se quede clavado en su mente eh incrustado en su pecho, quien no ha dejado de palpitar desde que lo tuvo a tan solo un milímetro de ella. Mentalmente deseando que aquello hubiera culminado en un perfecto beso, apretó la sabana deseosa.

Sus lágrimas cesaron dado que sentía que no ganaría nada, se dio la vuelta quedando boca arriba, recordando aquella ocasión en la que el mayor la tenía bajo suyo, cuando le fue a pedir perdón, y nuevamente se comportó extraño.

"¿Qué pasa contigo?"

=================================================

11: 15 pm....

Se escucha golpes en la puerta, la persona quien descansa o eso es lo que intenta gruñe mientras esta boca bajo en la cama con un cojín sobre su cabeza, no está para que nadie lo moleste, suficiente tiene con la conciencia que no lo deja siquiera dormir por las docenes de preguntas que tiene.

No se levantara, esperara hasta que aquel quien quiera que fuse se aburra y termine por irse, más fue su sorpresa que no paran de tocar.

De mala gana se pone en pie de forma ligera se arregla el traje que porta que no se había quitado ya que ni de desvestirse tiene ganas. Camina a paso lento y prepara un breve discurso para decirle a esa persona que ahora esta sumamente cansado y que mañana pueden hablar.

Tomo el pica porte de la puerta y sin más abrió.

Quedo sorprendido de ver a esa persona por aquí. Bueno era su fiesta era natural que ella al ser la anfitriona estuviera con sus invitados pasándola de lo mejor y no aquí, en la tercera planta, tocando la puerta que no era la suya, y menos mirando de manera intensa y con una sonrisa que dilataba diversión y perversidad a un hombre que no era su esposo.

G - 18... - susurra su nombre aún sin salir de aquel trance de verla aquí, se pierde en aquella forma de verle, su cuerpo se relaja dejando que su mirada se pierda en ella, aquella bella dama que esta tras él marco de la puerta observándolo de igual modo.

No era necesario que se sorprenda por la mirada asombrada de aquel hombre, puesto que ya la conocía y aun así le parece encantador.

Quizás hizo mal en venir a usurpar o buscarlo pero no lo pudo contener esta noche acaba de sentir deseos de pasar las pocas horas de su cumple en brazos de ese adonis quien no deja de verla como la cosa más bella, lo que le parece excitante.

Lz - Hola cariño - le dice con la voz un tanto hebrea, bueno se le ha pasado un poco de copas pero aún esta consiente de las cosa que hace, está por ejemplo.

Deja de lado lo anterior.

G - No deberías de estar aquí - le dice serio y midiendo su voz ya que cualquiera los puede oír.

El silencioso pasillo es sacudido por las risas repentinas de la rubia quien no pudo más contenerse.

Lz - Y-yo estoy donde quiero - hace un gesto con su mano - si quiero besarte ahora mismo lo hago - dice dando un paso - porque se me da la puta gana...y porque eres de mi propiedad...