Capitulo 16. Regalo

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Un auto avanza con velocidad acercándose cada vez más a la ciudad Satán donde se ubicaba la tienda de ropa y donde comprara lo que usaría para su fiesta de cumpleaños.

Dentro de la cabina el silencio está presente, denso eh incomodo al menos para la rubia que conduce.

Suspira silenciosamente ya que sabe el motivo por el cual aquel, mechas paradas va callado y posiblemente molesto, gira ligeramente su cabeza para echarle un pequeño vistazo, ahí está de brazos cruzado mirando tras la venta quien sabe qué.

Lz – Ya deja de estar molesto…quieres – le dice aburrida. Solo por el hecho de que no le dejo conducir, piensa que el hombre que considero mucho tiempo como un idiota posee algo de machismo…o inclusive se comporta como un niño…berrinchudo. Lo que le parece irritante e interesante a la vez.

Hace una mueca de enojo.

No se molesta en contestar, se siente como un completo inútil. De aquellas personas que son incapaces de hacer cosas, eso le hierbe, aquella que le habla le dijo que ella seria quien conduciría, eso le parece mal puesto que en alguna ocasión le han dicho que es de caballeros llevar a su dama a donde se les pide. Entonces como debe de interpretar tal acto, como inutilidad de su parte…

Su mente lo tortura…

Hasta que siente detener el andar del vehículo, suspira y sin más abre la puerta para salir. Ba vestido son el traje que uso en los diez días de descanso antes de los juegos de Cell.

Con una leve sonrisa se para frente a su acompañante que sigue con la misma aptitud lo que provoca que ella también lo vea de la misma manera.

G – ¿Que hacemos en una tienda de ropa? – le pregunta mirando dicha instalación.

Lz – Nada...me ayudaras con mis compras, casual – le dice con una sonrisa juguetona.

Le desconcierta lo dicho, la mira con cara de desubicado ya que un hombre como él no era el ideal en cosas así, de hecho le aburren y es muy torpe.

G – 18. Sé que ya has notado que no soy el más idóneo en cosas de moda – le dice serio.

Una carcajada se le escapa a Lazuli quien lo mira.

Lz – Cariño…tranquilo – posa un dedo en los labios del saiyan quien solo se queda quieto – lo único que debes hacer es observar…me – le musita coqueta, notando lo sonrojado que lo ha puesto.

G – Bien. Supongo que no tardaras mucho – dice caminando en dirección a la puerta.

Lz – No sabía que andas a prisa. Me has dicho que este día no tienes compromiso Goku – le dice con interés.

G – De hecho a las cuatro Bra sale de la universidad. Es necesario que hable con ella… - dice pensando en lo molesta que aquella joven debe estar con él.

Percibe la preocupación con la que habla y expresa por medio de su rostro. Un tic nuevamente llega a ella, una molestia bastante incomoda, desconoce del porqué, es la primera vez que algo así le pasa.

Lz – No comprendo tu insistencia en querer hablarle, digo, una borrachera le puede pasar a cualquiera – le habla con cierto fastidio – además me parece que Bra exagera…

La escucha la comprende puesto que ella desconoce su pasado de hace años, preferiblemente desea que no lo conozca, su cara pierde más tonalidad y decide darle la razón para no entrar en más comunicación que al final no entra en caso entablarlo con ella.

G – Te parece si entramos…en todo caso tú esposo se enfadará si tardas bastante en tus compras – se gira para entrar.

Se queda en blanco con la acción de aquel quien solo evadió el tema.

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