Nunca me dejes | Finge ser mi novia #2 [EDITANDO]

Capitulo 67

OLIVER

¿Usarla?

—¿Estás escuchándote?— le pregunté con incredulidad— ¿como podré usarte Melanie? No eres alguien que deba usarse y desecharse cuando quiera. — me zafé de su agarre.— no puedo hacer eso.

—Puedes hacerlo Oliver— respondió volviendo a tomar mis manos. —Yo estoy consiente de que terminaré mal si no funciona, pero en verdad quiero ayudarte. — sus ojos buscaron los míos, debido a que sus ojos eran color azul verdoso podía ver sus pupilas dilatadas, ella se acercó más a mi y con su mano tocó mi rostro, su tacto me hizo estremecer.

—No quiero lastimarte Melanie— era cierto, debía admitir, ella es realmente perfecta, es atenta, es tierna, linda, sus labios son suaves y apasionados. No puedo dañar a un ser tan hermoso como ella. Melanie sonrió tristemente.

— ¿Soy tan fea? — yo negué rápidamente y tomé su rostro con mis dos manos.

—Eres preciosa— respondí mirándola a los ojos y comencé a acariciar su rostro con mis dedos, su piel era suave. — pero no— fui interrumpido por sus labios.

Me había interrumpido besando mis labios. Era inevitable querer apartarla, cuando menos lo esperé, yo ya estaba besando sus labios incesantemente, con desesperación, como si estuviese despechándome y desquitándome de todo el dolor que traía debido al rechazo de Gabriela.

No querías usarla pero mírate, estás besando sus labios por despecho.

Aquel pensamiento me hizo reaccionar, así que me aparté poco a poco, ella parecía aferrarse a mis labios como si quisiera soltarme, mi corazón latía con ganas. Cuando me aparté por completo, ella me miró con desilusión y agachó la cabeza. Ninguno dijo nada más. Me sentía completamente fuera de lugar, no sabía porqué pero sentía necesidad de besarla.

— En verdad quiero que me des la oportunidad de ser la persona que te ayude a olvidarla Oliver. — su voz se escuchó temblorosa, ella levantó la cabeza para verle directamente a los ojos, sentí pánico al ver sus ojos llorosos — ¿Por qué no me dejas intentarlo?

—Porque...— no sabía qué decir.

—Es porque sabes que nunca podrás olvidarla ¿verdad? —No sabía la respuesta de eso, bueno quizá sí, yo lo intenté por mi mismo y no pude, pues verla todos los días, en casa, en el salón... eso no me ayuda. — ella sonrió levemente dándome una expresión dolida— Bueno yo...— hizo una pausa y se encogió levemente de hombros — lo intenté. — mi expresión cambió cuando una lágrima cayó por su mejilla, ella inmediatamente la limpió con la manga de su suéter y agachó su cabeza.

Mi cabeza era un desastre.

—Me voy— dijo rápidamente, se levantó de la cama sorbiendo su nariz y limpiando sus ojos, yo miré todos sus movimientos, eran algo torpes— es tarde y mis padres me regañarán. — sus ojos miraron los míos y sonrió como si nada estuviera pasando. — Adiós Oli. — ella me miró determinadamente, como si estuviera esperando que alguna respuesta saliera de mi boca, pero al ver que no salió nada, lamió sus labios y se giró para tomar control de sus pies y caminar hacia la puerta, cuando llegó a ella tomó el pomo de ésta y se detuvo unos segundos, luego se giró un poco para verme— Me gustaría que esto quede sólo entre nosotros. Bueno— hizo una pausa— tu hermana ya sabe lo que yo quería hacer— yo fruncí levemente mi ceño. ¿Serina sabía que Melanie quería que fuera usada por mi? — Pero por favor no les digas a los demás sobre esto, espero que podamos seguir siendo amigos después de todo esto que ha pasado.— me sentía muy agitado, mis manos picaban y sudaban. — eres una persona increíble Oliver. Si Gabriela no lo pudo ver estoy segura de que otra aparte de mí — recalcó— lo verá.

Dicho esto último volvió a girarse para girar el pomo de la puerta y abrirla, ella ya estaba dando un paso pero yo, por inercia, me levanté de la cama y caminé rápidamente hacia donde ella estaba, la tomé de la mano y la jalé haciendo adentro, cerré rápidamente la puerta y la acorralé en ella.

—Oliver que est— No la dejé terminar porque besé sus labios intensamente. Ella colocó sus brazos detrás de mi cuello y yo pegué mi cuerpo al de ella, estábamos besándonos con intensidad. Dios, yo estaba teniendo problemas porque realmente ella es linda, pero en mi corazón está Gabriela y en mi cabeza está Melanie, no podía hacer esto, pero en verdad sentía una necesidad de besarla de esta forma. No sabía nada de su vida, fueron más las veces en las que nos besamos que las veces en las que tuvimos una conversación decente. El aire comenzaba a faltarme, debido a esto, mi respiración y la de ella estaba muy agitada, sus manos se dirigieron a mi cabello y comenzó a jalarlo levemente, esto se estaba saliendo de control pero si que se sentí increíble.

Melanie se fue separando poco a poco de mi, sin embargo ahora era yo el que no quería hacerlo.— es...pe... ra— dijo entrecortadamente mientras yo seguía besando sus labios— Oli...pa...para.

Yo hice lo que me pidió, miré sus labios, estaban rojos. Después la miré directamente a los ojos con confusión.

—¿Por qué paraste? — pregunté yo.

—¿Por qué me besaste?— preguntó ella ignorando mi pregunta.

—Yo— hice una pausa— yo no lo sé, sólo quería hacerlo. — Melanie desvió la mirada confundida.

—Debo irme— dijo ella intentando zafarse de mi, yo no la dejé. — Oli, por favor, es tarde.

—Yo te llevaré a casa.— ella me miró como si lo que dije fuese un chiste.

—¿Tu? — yo asentí nervioso, ella me miró divertida— ¿estás seguro? — volví a asentir— Oliver— se cruzó de brazos— ¿y sabes manejar?

Que vergüenza.

—Aprenderé— ella volvió a reírse y negó con la cabeza.

— No se aprende en minutos. — yo suspiré rendido.

—Bueno, cuando aprenda te llevaré a casa.

Ella sonrió levemente.

—No quiero morir joven.

El silencio volvió a inundar la habitación, ella agachó su cabeza.

—Oliver, en verdad, me tengo que ir. —Yo lamí mis labios y agaché mi cabeza asintiendo. Dejé de acorralarla y volví a mirarla. —¿Estamos bien?— preguntó ella.— yo asentí apretando mis labios con una sonrisa.

—Estamos bien— ella sonrió y se acercó para dejar un beso en mi mejilla. Me dio una última mirada y después se giró para volver a abrir la puerta y esfumarse.

Yo solté un largo suspiro y recargué mi espalda en la puerta con una sonrisa en mi rostro.

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Se besan toda la tarde y ella se despide de cachete, en fin la hipocresía.

Jajsjjs

CREO que es la primera vez que les actualizo "temprano"

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prettyyywomann__ (doble guión)