Aimé es una chica sencilla, inocente e inexperta que solo vive para su trabajo, pero carga un secreto que la quema por dentro... como ella dice "El amor es un lujo que no se puede dar".
Laurent es un hombre extremadamente guapo y poli multimillonar...
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(Multimedia por favor)
Aimé Engels:
La tarde es lluviosa en la ciudad de Helsinki, bebo los restos fríos de café de esta mañana.
En la radio escucho "Uprising" de Muse , no puedo evitar que mis dedos se muevan sobre el volante al compás de la batería que me transporta a un universo paralelo lleno de vida, mientras que canto a todo pulmón tras los vidrios de la camioneta.
Siento con cada acorde y cada nota, una carga de energía que recorre todo mi cuerpo, alimentado cada vena, invadiendo mis sentidos, acelerando mi pulso para que me adapte a su infernal y seductor ritmo.
Me alegro que las ventas de la camioneta sean a prueba de sonido, y nadie pueda escucharme cantar a todo pulmón, así que solo me dedico a disfrutar el momento.
Atrapada en mi burbuja de cristal me olvido del mundo.
El semáforo cambia y acelero para llegar al estacionamiento de la constructora.
Cuando apago el motor, me coloco mis audífonos, tomo mi bolso junto con la enorme pila de planos con ambas manos, termino cerrando la puerta de mi Jeep color gris con el pie.
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Camino hasta el ascensor y este cierra sus puertas, al subir veo a través de los enormes cristales las gotas de lluvia caer, viene a mi memoria lo duro que fue para mí, adaptarme a un nuevo país, un nuevo idioma y una cultura tan diferente a la mía.
Suelto un suspiro y trago duro.
Brotan en mi mente, lo recuerdos de todo mi esfuerzo por mantener mi beca en la universidad y conseguir un buen trabajo.
Mis ojos comienzan a empañarse y se que es tiempo de ponerle un freno a mis emociones, sacudo la cabeza para diluir mis pensamientos
Decido concentrarme en lo más importante, el presente que me he forjado a base de trabajo, sudor, lágrimas y esfuerzo. Porque la chica asustadiza y llena de miedos que bajo hace años de aquel avión, ya no existe.
