Amor propio.

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Aimé Engels:

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Aimé Engels:

Lunes ... sin duda mi día menos favorito de la semana.

Dejo salir todo el aire contenido.

Las puertas del ascensor se abren y saludo a Ilta.

—Buenos días Ilta ... —traigo mi té de limón en la mano.

—Buenos días Aimé ... por cierto llego esto para ti —me señala el arreglo floral precioso.

 por cierto llego esto para ti —me señala el arreglo floral precioso

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No hace falta aclarar quien lo envió.

"¡Adám!"

A mi mente vienen las palabras de Claire y titubeo.

«¿Estoy haciendo bien en aceptar? » me cuestiono a mí misma.

«¡Basta!» grita mi mente molesta.

«Necesitas que te recuerde que Laurent te atormenta en todos tus sueños, que quieres gritar y escapar de él ... que cada noche es un infierno ... ¡Que apenas puedes dormir!» me ataca mi conciencia.

Niego con la cabeza.

Titubeó un momento ... la duda en mis ojos es evidente y la veo reflejada en la mirada curiosa de Ilta.

Mis nervios van a estallar.

«Vamos Aimé ... tienes que avanzar ... tienes que obligar a seguir ... tienes que dejarlo ir ... Laurent no es para ti» me digo a mi misma tratando de convencerme.

Respiro profundo y las acepto finalmente.

—Gracias —le digo al Ilta y aspiro el aroma exquisito de las flores.

Mi corazón late sin parar.

Los ojos de Ilta se dilatan por la sorpresa.

—De nada ... no hay duda de que el que persevera alcanza ... —dice Ilta emocionada y sin poder creerlo me da una gran sonrisa.

 —dice Ilta emocionada y sin poder creerlo me da una gran sonrisa

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Eternamente TuyaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora