La niñera de Emma | Sebastini ✔️

Capitulo 15

Martina

Han pasado tres días desde que peleé con Sebastián, los peores tres días de mi vida. No hablamos para nada, nos vamos cuando uno llega, ni siquiera nos miramos, solo de reojo y para salir de la habitación... he estado pensando seriamente en volver a vivir con Laura, pero no quiero dejar a Emma, sé que la voy a lastimar si me voy, aunque creo que más daño le estoy haciendo quedándome, porque estoy casi segura de que las cosas terminaron entre nosotros... tal vez hasta ya tiene a alguien más, estos días Sebastián ha estado saliendo desde la mañana y llegando muy tarde, hay veces en las que ya estoy dormida y me despierto porque lo escucho llegar.

Sebastián

Soy un idiota, lo sé, pero no puedo contarle nada a Tini, no sé como, no sé como contarle ni como va a tomarlo, así que preferí el silencio y que los sentimientos estén claros, porque sí estoy confundido o eso creo... ya no sé ni que siento...

- Qué quieres ahora – dije contestando la llamada.

- Ya lo sabes Sebastián...

- No, ya te dije, no va a pasar, o dame más tiempo para pensarlo.

- ¡¡Pero eso es lo que no tengo!!

- Ya te dije, dame tiempo si quieres, si no déjame en paz.

- Pero tú no puedes ha...

- Si puedo.

- Tú me dijiste ayer que...

- Sé lo que dije ayer... hablamos luego, tengo cosas que hacer – Y sin más colgué, estas llamadas me estaban poniendo de mal humor todos los días, tenía que tranquilizarme un poco.

- Hola, perdón por el retraso – dije entrando al estudio.

- No te preocupes – dijo Martín.

- Uhhhh, ¿aún no has hablado con Tini? – preguntó Isa.

- No, y no creo que hablemos tampoco.

- Pero es una estupidez que estén separándose por eso – dijo Villa molesto.

- No puedo decírselo, ahora ensayemos las canciones que es para lo que venimos – dije y me levanté de mi asiento.

- No estarías así de mal genio si simplemente le dices a Martina lo que pasa, ella entenderá, estoy seguro.

- No, no lo hará... ¿que pasa si se enoja?

- Entonces, ¿ya decidiste que vas a hacer? – dijo Simón.

- No, no lo sé – suspiré, la verdad era que la pelea con Tini no me dejaba ni pensar, y con todo esto iba a terminar por volverme loco.

- ¿Te puedo decir algo? – dijo Martin y yo asentí. – Creo que sería bueno que digas que sí.

- No lo sé, tengo miedo – dije en un susurro.

- Miedo de qué – dijo Isa.

- De Tini, de Emma, que pasa si todo sale mal.

- Sebas, ahora ya no se trata de Tini, todo se trata de Emma – dijo Villa.

- ¿Pero si Martina no lo entiende?

- Si te ama, y créeme que lo hace, lo entenderá – dijo Isa.

- Gracias.

- Ahora... ¿hablarás con ella? – dijo Simón.

- Eso creo.

- ¡¡Muy bien!! – dijo alegre. – Tal vez y te ayude a tomar la decisión correcta.

- Si, gracias chicos – dije sonriendo de nuevo y me dirigí a la puerta.

- No, no, no... ¡espera! – dijo Villa. – Tenemos trabajo por hacer.

- Verdad – empecé a reír. – Lo siento. – Entré de nuevo.

- ¿Comenzamos? – dijimos todos al mismo tiempo.

Así pasamos toda la mañana, grabando algunas canciones, riendo y la verdad es que yo estaba muy animado después de lo que hablamos, tal vez ellos tenían razón y yo estaba armando una enorme tormenta en un vaso con agua.

Cuando llegué a la casa, Tini estaba haciendo dormir a Emma, así que dejé que se desocupara para poder hablar más tranquilos, les pedi a los chicos que por favor estén al pendiente de la niña.

- Tini – dije acercándome, susurré ya que Emma recién se acababa de quedar dormida, ella se asustó y me aguante las ganas de reír, creo que ella lo notó porque me miró mal. — ¿Podemos hablar?

Martina

Estaba haciendo dormir a Emma, cosa que no era nada fácil y cuando al fin se durmió, Sebastián se acercó para decirme que hablemos, no había escuchado que llego con los demás. Me pidió que hablemos, y yo la verdad no estaba de humor para eso, así que salí de la habitación encendiendo el monitor de la bebé para escuchar si se despertaba, últimamente no dormía bien. Cuando estaba por bajar las escaleras, para dirigirme a la cocina, Sebastián me agarró del brazo y me hizo voltear.

- Tenemos que hablar – dijo remarcando cada palabra.

- Lo siento, pero tengo que estar pendiente de Emma, no tengo tiempo para esto – dije intentando separarme, pero él solo apretó su agarre.

- Esta dormida Tini – iba a hablar, pero no me dejó – Los chicos van a cuidar de ella, yo se los pedí.

- Sebastián... – dije meneando la cabeza insegura, en serio no quería, él no podía enojarse y luego esperar que uno esté sonriente esperándolo para cuando él quiera hablar.

- Por favor.. yo no puedo seguir así – suspiró. – Tenemos que acabar con todo esto, no puedo, no quiero más – Y con esas palabras entendí que lo nuestro había acabado, sabía que estábamos mal, ¿pero terminar? Si no habíamos hablado nada al respecto, no... no me esperaba eso a pesar de que de alguna manera ya lo pensaba, sabía que iba a llorar y quería soltarme de su agarré, pero él solo seguía hablando, así que mejor lo interrumpí. – Creo que hay que olvidar todo lo que pasó y..

- Sebastián, ya entendí, no hace falta que sigas – le dije y me solté de su agarre, salí corriendo hacía mi habitación sintiéndome mal, muy mal.

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Haré un maratón de 5 capítulos(seguidos) y la meta es que todos los capítulos(del 1 al 15) lleguen a los 70 votos y 50 comentarios(20personas diferentes)
Y también, que aquí en Wattpad lleguemos a 200 seguidores(falta muy poquititooo)

Cuando se cumpla la meta, subiré los capitulo 💓

Twitter: @novelaSebastini