Capitulo 26

1.1K 104 64
                                    


Martina

- ¡Oh mi amor! Gracias... ¡me encanta! – dijo Sebastián mientras abría su regalo.

- Me alegra que te guste – dije sonriendo.

- ¡Me encanta! De verdad – me dio un beso.

- No olvides que Emma también ayudó.

- ¿Enserio?... ¿a qué? – dijo alzando la ceja.

- A mantenerte ocupado mientras yo compraba los regalos – reí.

- ¡¿Hay más de uno?! – yo asentí.

- Los tenés que buscar.

Y así pasamos agradeciendo por cada cosa que recibíamos, ahora íbamos a necesitar otra valija para los regalos, ya que Emma acabó con toda una juguetería.

Pasamos una gran semana en Medellín, pero teníamos que viajar a Los Ángeles para alistar unas nuevas valijas y viajar a España a encontrarnos con mis padres, aunque no tenía tantas ganas de verlos. Cuando llegamos a la casa habían seis paquetes, dos para cada uno, era más que obvio que mis padres mandaron regalos, era su "competencia del año"

Sebastián subió las valijas a la habitación, mientras yo cargaba a Emma para darle un pequeño baño en agua caliente. Cuando la terminé de bañar, la cambié y se quedó dormida, así que fui a ayudar a Sebastián a terminar de empacar.

- ¿Crees que me acepten? – dijo Sebastián luego de un rato.

- Claro que sí, sobretodo papá, él te va a adorar.

- ¿Y tu madre porque no?

- Ella y yo nunca hemos estado de acuerda en nada.

- Pero...

- Sebas, no importa lo que ella llegué a decir, te amo y eso es lo más importante.

- ¿Es loco no crees?

- ¿Qué mi amor?

- Qué no nos conocemos mucho, pero ya estoy seguro de que contigo es con quien quiero pasar el resto de mi vida – dijo abrazándome por la cintura.

- Te amo – dije. La verdad es que sus palabras me hicieron poner sensible y ya estaba por comenzar a llorar.

- Hey, no llores – dijo abrazándome más.

- Es.. es que... no quiero perderte nunca.

- Y no lo vas a hacer – dijo alzando mi cabeza para que lo vea a los ojos y luego me besó.

Luego de terminar de empacar, aunque solo nos quedaríamos tres días allá, y despertar a Emma nos fuimos al aeropuerto, pero tuvimos un pequeño problema al entrar, en la entrada habían muchos reporteros y eso era raro para mí, ya que en casi toda nuestra relación no han habido muchos o no los he visto y por lo general siempre están los guardaespaldas, pero luego vinieron los guardias del aeropuerto y nos ayudaron.

- Es raro – dije al entrar.

- ¿Por qué? – dijo Sebastián mientras nos dirigíamos a dejar las valijas y a la sala de espera, lentamente ya que queríamos que Emma camine un poco.

- Porque en casi toda nuestra relación no ha habido muchos de ellos, solo al principio y estábamos de gira, y ahora se me hace extraño.

- Amor, siempre hay noticias sobre los chicos y nosotros en la Tv, solo que no los has visto.

- Qué bueno, porque no me gusta ser el centro de atención.

- Bueno, hazte una idea, porque el día en el que nos casemos, tú serás el centro de atención – dijo sonriéndome y yo hice lo mismo.

- ¿Qué decís con eso? – dije mirándolo nerviosa y él se arrodillo.

Por un momento contuve el aliento, hasta que vi que se amarró los cordones de los zapatos y se levanto riendo.

- Boludo me asustas – dije golpeándole en el brazo, pero él no paraba de reír y luego Emma también, y yo seguí.

- ¿Por qué?

- Por un momento pensé que...

- Mi amor, el día que lo haga no será en un aeropuerto.

Dos capítulos para el final, soy este 😭

Twitter: @novelaSebastini

La niñera de Emma | Sebastini ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora