Un año después de que Ben y compañía salvarán a la tierra de la invasión Highbreed, viven sus vidas de la manera más común que les permite el ser plomeros; pero todo cambiará en el momento que una invasión llegué con intenciones no de supervivencia...
Una base militar subterránea era el terreno de una masacre sin duda alguna; militares muertos, casquillos y armas por los suelos, todo, mientras una imponente figura avanzaba entre el caos. Era un ser humanoide de gran tamaño, fácilmente alcanzaba los tres metros y llevaba un traje negro y rojo que le cubría todo el cuerpo a excepción de la cabeza, la cual era la mezcla exacto de un hombre y un pulpo, pues los tentáculos, que en este caso servían como barba, se movían de manera escalofriante en su barbilla; este mismo se movía hacia un misil cuya compuerta exterior estaba ahora abierta, estaba por ser lanzado.
—Estúpidos humanos, siempre creyendo que su poder de fuego sólido es más capaz de derrotarme que mi poder de fuego plasmático— decía este ser, mientras pisaba con desprecio los cadáveres de los soldados
—¿¡Oíste eso Max!? ¡Es nuestro día de suerte!— grito un joven Phil, con un traje similar al de un exterminador, quien estaba junto a un hombre joven y de un rojizo cabello castaño; este era versión joven de Max Tennyson.
—Genial. Estás no son de fuego sólido risitas— sentencio a secas el joven Max, mientras cargaba su arma y miraba fijo hacia el alienígena —Quedad detenido por invadir la tierra sin pleno aviso o porque tus bolas espaciales así lo decidieron hoy... Vilgax...
—¿Quienes se supone que sin ustedes para si quiera pensar en que hablarme así sería buena idea? Terrestres...
—El es Maxwell Tennyson, el mejor plomero que la tierra haya visto, y yo soy Phil— declaro Phil, mientras se movía lentamente hacia Max y ambos eran iluminados por la luz roja de emergencia
—Así que tú eres ese legendario humano que tantos estragos ha causado dentro y fuera de está roca ¿No, Max?— respondió entre una burlona carcajada Vilgax, mientras sacaba una especie de medusa biomecánica, la cual lanzó al panel del misil y está se ilumino en un brillante rojo, con el cual empezó el conteo del misil
—¿¡A dónde lanzaras el maldito misil!?— pregunto Max, mientras avanzaba y apuntaba con su arma
—¡Yo soy Vilgax, el conquistador! ¡Soy imparable! Pero aún así...— Vilgax hizo una pausa y llevo su arma hasta su muslo, donde una especie de correa se formó alrededor del arma, sosteniéndola ahí —Sus "plomeros" pueden ser una verdadera espina para mis planes. Sin su preciado Monte Rushmore, no serán más amenaza cuando empiece mi conquista aquí ¡Y nadie me parará!— grito Vilgax, mientras se daba la vuelta y avanzaba hacia el panel, solo para recibir el disparó del arma laser de Max en su hombro, seguido de un par de tiros de parte de Phil, quien acertó a su espalda, pero este la esquivo de manera hábil y saco su arma, disparado y causando un par de pequeñas explosiónes cercanas a los plomeros
—¡Asquerosos humanos!— grito Vilgax, mientras tomaba a Phil y lo jalaba hacia el, tomándolo del cuello y apuntando con su arma a Max
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