Te esperaba

Capítulo 16

Propuesta

Los días para Arthur desde que subió al avión con los miembros de la orquesta sinfónica eran un trajín diario.  Entre los ensayos y las presentaciones apenas tenía tiempo para orar y leer por unos minutos la Biblia.

Era un corre corre.  Debian estar a tiempo en cada presentación..

Una de esas noches de mucho cansancio volvió a la habitación del hotel para descansar,  mientras sus compañeros iban a tomar algo al bar del hotel.

Él sabía que ese no era su lugar. Así que aprovecharía para descansar un poco más esa noche.

Mientras iba a su habitación un pequeño niño chocó con sus piernas mientras se reía huyendo de su madre..

¡Perdon joven!.. se disculpó la señora  con Arthur mientras tomaba con fuerza la mano de su hijo..

¡Te he dicho mil  veces Angel que no te sueltes de mi mano!.. le decía la mujer a su hijo..

Arthur se quedó mirándolos mientras se cerraba la puerta del ascensor.

El nombre de la muchacha en la que no había querido pensar en esas tres semanas de viaje con la sinfónica volvía a sus oídos y le volvía a causar esa tristeza que él odiaba sentir..

Se baño y se dispuso a ver algo de televisión para olvidar lo que sentía.  Pero mientras del cansancio se iba quedando dormido con el control en la mano, una voz en la televisión lo despertó..

Esto es para ti hermano.  Abre tu corazón y escucha: "Porque mejor es tu misericordia que la vida; ¡Mis labios te alabaran!. Así te bendecire en mi vida; En tu nombre alzare mis manos. Salmo 63: 3-4

¡Tú sabes cuál es el camino!.  ¡Escucha su voz!, El Espíritu te está  llamando  ¡escuchalo hermano!

El pastor en la televisión parecía dirigirse a él y cuando quiso subir un poco más el volumen para escuchar todo el sermón, lo cambio por error y luego por más que lo intentó no pudo encontrarlo de nuevo..

Apagó el televisor y se disponía a orar cuando uno de sus compañeros de la sinfónica tocó su puerta.. ¡Ayúdame Arthur!. me pasé de tragos y el director no puede verme así.  ¡Ayúdame por favor.!

Mirando su estado lo hizo entrar a su habitación y lo metió en la tina con agua bien fría y pidió café bien cargado a su habitación.

Después lo dejó dormir en su cama mientras él se encerraba en el baño para orar: Señor ¿Que es lo que tú  quieres que yo haga?  Empiezo a cuestionar mi lugar aquí. Toda mi vida soñé con ser un gran pianista y que todos me conocieran.  Hoy tengo la oportunidad frente a mí de que reconozcan mi talento y no me siento feliz con eso..

¡Amo la música!.  Pero algo me hace falta.  ¡Y extraño mucho a Angel!.  ¡No sé que me pasa.!  Tengo lo que siempre quise. Una oportunidad que soñe durante años y ahora no la disfruto..

Es como si éste no fuera mi lugar. Soy muy bueno en lo que hago y ¡no entiendo.!

Salgo al escenario y disfruto la música.. Lucho por concentrarme en esto, con todas mis fuerzas me doy a lo que hago y ..