━━𝐒𝐄𝐌𝐏𝐈𝐓𝐄𝐑𝐍𝐎 ┊ ❝Malia Murphy no sabía lo que era una verdadera y eterna amistad hasta que conoció al club de perdedores.❞
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(𝟏) Sempiterno. It chapter one /✓
(𝟐) Serendipia. It /✓
(𝟑) Saudade. It chapter two / en proces...
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Octubre, 1988.
Aquella tarde oscura y lluviosa, que mantendría a cualquier habitante de Derry con un sentimiento de miedo y tristeza, no era problema para Malia Murphy quién escuchaba la música de The Clash, a pesar de que esta fuera opacada por el sonido de la lluvia que golpeaba con violencia la ventana de su habitación. Pero no, definitivamente eso no detendría a la adolescente que le subió el volumen a la música y ahora bailaba por toda la habitación moviendo su alocado y característico cabello rubio al compaz de la canción.
— ¿Ya estas lis...? — Su hermanastra abrió la puerta de la habitación confiando en que Malia estaría ya lista para su pequeña "salida", pero al observar como esta bailaba por toda la habitación como si nada, se escandalizó totalmente. — ¡Malia! ¡¿Qué se supone que estás haciendo?!
La nombrada, está vez si noto la presencia de Tracy —Cabe aclarar que sólo porque grito— y dejó de bailar, para luego formular una pequeña sonrisa inocente en sus labios.
— ¿Bailar?
— ¡Agh! ¿Ves por qué no te soportó? Eres una desconsiderada. Te pedí hace varios días este favor y ahora... — Exclamó con una voz exageradamente chillona que hizo que la rubia hiciera una mueca y la interrumpiera.
— ¡Dios! ¿Quieres calmarte, Tracy? Aún tenemos tiempo de sobra y si, te ayudaré, no te preocupes por eso, ¿Bien? — Le dijo esta vez con un tono más fuerte que logró calmar los nervios de su hermanastra.
Camino hacia su preciado tocadiscos que seguía sonando y con todo el pesar del mundo, hizo que este parara logrando que dejara de sonar su adorada música.
— Oh, no te preocupes, bebe. Nos veremos luego, ¿Si? — Susurró viéndo al objeto y acariciandolo por encima con suma delicadeza.
— Ay, no seas dramática — Escucho nuevamente la horrible voz de su hermanastra provocando que su "momento" se acabará. Así que se giro y la miró con molestia.
— Ay, mira quien habla — Habló a la defensiva imitando la voz de la castaña que optó por rodar los ojos y cruzar sus delgados brazos fulminandola con la mirada.
Malia la miró con confusión por unos segundos sin entender el porqué Tracy estaría molesta. Es decir, ella era quien la había invadido en su habitación cuando estaba cómodamente bailando. La molesta debería ser ella y no Tracy, así que...
Oh, la salida.
Una voz burlona en su cabeza le recordó y al entender por fin las miradas asesinas de su hermanastra, Malia volvió a sonreír inocentemente.
